Ley de Memoria Democrática, que impulsara Carmen Calvo como ministra de Presidencia, llega mañana jueves al Congreso donde se espera un duro debate. Como ya anunciaron tajantemente, la norma contará con el rechazo del PP y Vox, y la enmienda con texto alternativo de ERC.
Sin embargo, parece que los grupos que apoyaron la legislatura lo harán también con esta norma que condenará el golpe de Estado del 36 y anulará las sentencias contra los represaliados.
Esta propuesta de ley fue aprobada en el Consejo de Ministros el pasado mes de julio y busca actualizar la ley de Memoria Histórica de 2007 y adaptarla a las sugerencias de los organismos internacionales en materia de Derechos Humanos.
Debate del proyecto
A pesar de que fue un proyecto de ley por el que luchó y trabajó intensamente Carmen Calvo y su equipo, lo cierto es que su defensa correrá a cargo del actual ministro de Presidencia, Félix Bolaños.
El grupo socialista tiene claro que será un debate duro donde la derecha volverá a tratar de impedir cualquier reconocimiento a quien no formara parte del bando vencedor en la Guerra Civil del 36 provocado por el levantamiento militar.
Valle de los Caídos
El Valle de los Caídos, según esta norma, no podrá tener ningún cuerpo de los protagonistas en ningún lugar preponderante. Claro ejemplo será José Antonio Primo de Rivera, cuyos restos tendrán que salir del recinto, como ya lo hicieron los de Franco.
Se creará, según confirmó Bolaños cuando el proyecto fue aprobada en el Consejo de Ministros, el Centro Documental de la Memoria Democrática en Salamanca, donde están los legajos desde el 36 de la Guerra Civil. Además, se prohibirá la Fundación Francisco Franco y se extingue la fundación Del Valle de los Caídos y se aprobará un real decreto que establezca un nuevo régimen jurídico Del Valle.
Las víctimas, en primer plano
La norma pretende, según el Ejecutivo, «situar en primer plano a las víctimas de la guerra civil y la dictadura». Hay medidas específicas de reconocimiento y reparación: se fijan, por ejemplo, dos días oficiales para la memoria que serán el 31 de octubre de recuerdo y homenaje a todas las víctimas y el 8 de mayo para las del exilio.
También pone en valor el papel del movimiento memorialista durante estos años y plantea reconocer el trabajo de mujeres en la defensa y conquista de los valores democráticos y los derechos fundamentales. Bolaños ha recordado cómo muchas de las víctimas mujeres de la represión franquista lo fueron tan solo por ser pareja, madre o hija de hombres comprometidos políticamente.
