Gobierno y Comunidades Autónomas conectarán sus registros de autoprohibidos, para proteger a personas con adicción al juego, gracias a una propuesta aprobada por el Consejo de Políticas del Juego, que preside el ministro de Consumo,Alberto Garzón. El acuerdo ha contado con el apoyo de todas las Comunidades a excepción del voto en contra de Cataluña y las abstenciones de País Vasco y Comunidad Valenciana.
Autoprohibidos
Cuando una persona admite su adicción al juego y pide ayuda, una de las medidas de protección que existen en España es la inscripción en un registro de autoprohibidos. Esto supone que la persona adicta al juego no podrá acceder y apostar tanto, de manera presencial, en salas de apuestas como, de manera virtual, en portales online.
Jóvenes en peligro
España cuenta con 54.294 registros de personas que admiten tener problemas con el juego online y que utilizan este mecanismo de protección para ser excluidos de participar en ningún tipo de apuestas. Otro dato preocupante es que el porcentaje de jóvenes con problemas con el juego no para de crecer. En el 2012 el 11% de los registrados tenía menos de 25 años. En 2019 esta cifra se dobla alcanzando el 22%.
Falta de coordinación
La falta de coordinación suponía, hasta ahora, que si alguna persona con problemas de adicción al juego solicitaba ser inscrita en el registro estatal de autoprohibidos, la restricción se limitaba solo al juego online, y si el registro lo realizaba en su Comunidad Autónoma sólo tendría efecto en los espacios físicos regulados por el Gobierno autonómico. El objetivo del Ministerio de Consumo es que la inscripción se extienda a todos los registros como forma de potenciar la protección institucional a las personas y familias afectadas por la adicción al juego