Joan Laporta ha decidido cambiar de estrategia ante el caso Negreira. Si hace solo unos días el presidente del FC Barcelona aseguraba que en breve darías las explicaciones oportunas sobre los acuerdos del club con el vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, para supuestos asesoramientos de partidos, hoy vuelve a abrazarse a la teoría de la conspiración, el complot urdido desde Madrid para perjudicar a los culés. “El Barça es inocente de lo que se le acusa. Es víctima de una campaña contra su honorabilidad en la que ya están todos”, aseguró a la hora de comentar el comunicado del Real Madrid en el que el club blanco anuncia medidas legales para llegar al fondo del asunto.
“Ninguna sorpresa. Defenderemos al Barça y demostraremos la inocencia del club”, añade Laporta, que todavía no ha explicado los pagos que el club hizo a Negreira, entre 2001 y 2018, por un importe de 7 millones de euros. Hoy, hay cada vez más sospechas de que ese dinero sirvió para influir en los arbitrajes y beneficiar al equipo blaugrana. Es decir, para comprar a colegiados de Primera División.
Servicios de Negreira al Barça
En menos de un mes, Laporta ha ido afinando su discurso. Del todo es mentira pasó a colaboraremos con la Justicia. Hoy se escuda en todo es un plan para destruir a la entidad deportiva. A finales de febrero, el presidente del FC Barcelona aseguraba que “en breve” daría “todas las explicaciones necesarias” respecto al caso Negreira. Lo dijo en una rueda de prensa en la que no aportó grandes novedades sobre las implicaciones del club en este caso de corrupción deportiva. El dirigente culé, en un mensaje institucional sin preguntas después de un acto público, aseguró que explicaría próximamente lo que el club tiene al respecto “en todos estos años”.
Laporta aclaró que en su primer mandato (2003-2010) “estos servicios”, de la empresa del exárbitro y entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, se realizaron “con la factura y el soporte documental y de video correspondiente” y que las facturas se pagaban “por servicios prestados”. También se quejó por las filtraciones de datos y documentos que se están produciendo desde que salió a la luz el caso y aprovechó para responder al presidente de La Liga Profesional, Javier Tebas, quien pidió la dimisión de Laporta si no daba explicaciones convincentes del asunto: “No le daré el gusto, porque el Barcelona es de sus socios y socias”, se defendió Laporta.
Laporta reacciona contra Tebas
Hoy, el dirigente blaugrana se aferra a la teoría conspiracionista como a un clavo ardiendo. Quizá tenga algo que ver con que la Fiscalía ha pedido que Joan Laporta declare como testigo en el nuevo Barçagate al ser uno de los cuatro presidentes que en ese período tuvieron contacto con los hechos. “No es sorprendente. Ya nos habían avisado de que Tebas estaba detrás de una campaña reputacional contra el FC Barcelona y contra mí”, denuncia Laporta en un comunicado institucional realizado en el gol sur del Spotify Camp Nou ante los medios de comunicación. “Tebas sigue con su obsesión con el Barça y su fobia con nuestro club”, sentencia el mandatario azulgrana. Y recuerda: “En 2005, como vicepresidente del Alavés, puso una denuncia para que Messi no jugara con el Barça”. Ahora Laporta dice que Tebas “no perdona que el FC Barcelona no haya suscrito el acuerdo con CVC” ni que esté “en la Superliga”.
Por otro lado, Laporta advirtió de que “quien intente perjudicar la imagen del FC Barcelona y aminorar su historia tendrá una respuesta contundente por parte de la entidad”. En este sentido, lamentó “profundamente que se estén produciendo filtraciones constantes de una causa que está en una fase de investigación por la Fiscalía y que entendemos que debe tener la máxima custodia”.
