miércoles, 24abril, 2024
21 C
Seville
Advertisement

La gestión de la sanidad pública amenaza la estrategia electoral de Moreno Bonilla consciente de que envió a Susana Díaz al ostracismo

El colapso de la atención primaria y el despido de 8.000 sanitarios en pleno repunte de la sexta ola lastran la última etapa de la legislatura del presidente andaluz de cara a las elecciones de 2022

- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

La gestión de la sanidad pública envió en buena medida a Susana Díaz al ostracismo político tras perder para el PSOE por primera vez el Gobierno de la Junta de Andalucía en casi cuatro décadas de ejecutivos socialistas consecutivos. Era su “joya de la corona”, no se cansaba de repetir públicamente la ex líder socialista, un sector fundamental al que dedicaba “uno de cada tres euros” de los Presupuestos autonómicos. Ahora, a las puertas de unas nuevas elecciones autonómicas trascendentales en 2022, la sanidad vuelve al centro del debate político y el ejecutivo de Juan Manuel Moreno Bonilla se limita a reeditar su estrategia de echar la pelota al tejado de Madrid y exigir más celeridad al Gobierno central en la entrega de vacunas, como ya hiciera en olas anteriores con resultados partidistas más que dudosos. De reforzar la colapsada atención primaria, nada de nada. De hecho, estas navidades ha decidido cerrar por las tardes todos los centros de salud pese a la avalancha de nuevos posibles contagios por covid. Y eso sin tener en cuenta el lacerante caso de los 8.000 sanitarios despedidos a finales de octubre pasado, precisamente coincidiendo con el crecimiento espectacular de nuevos contagios por la covid y a las puertas de las fiestas navideñas.

El líder socialista andaluz, Juan Espadas, ha vaticinado que el presidente Moreno Bonilla saldrá del ejecutivo andaluz tras la próxima cita electoral debido a la gestión que ha realizado de la sexta ola de la pandemia y sobre todo por su decisión de enviar al paro a esos 8.000 sanitarios contratados precisamente para reforzar la lucha contra la covid-19, coincidiendo con el fuerte repunte de contagios de esta sexta ola y el colapso que viven los centros de salud de la Administración autonómica, debido sobre todo a la falta de personal a todos los niveles, tanto administrativos como sanitarios, como han reiterado con sucesivas protestas las principales centrales sindicales.

El Gobierno andaluz, lejos de achacar a su gestión de la sanidad pública el colapso de la atención primaria, algo que sí admite, se refiere a la covid como responsable de este atasco. Así lo ha reiterado el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, quien ha asegurado que “el alarmismo no lleva a ningún sitio”. El número dos del ejecutivo bipartito andaluz se pregunta: “¿Alguien dice que contratando a esas 8.000 personas se va a acabar todo? Porque estaban y hemos tenido nuestros hospitales saturados. Y los mismos que dicen eso son los que han hecho la pinza aquí en el Parlamento para que no tuviéramos recursos para contratarlos”, ha asegurado en una entrevista en la Cadena Ser.

El Gobierno andaluz, lejos de achacar a su gestión de la sanidad pública el colapso de la atención primaria, algo que sí admite, se refiere a la covid como responsable del atasco

Las masivas protestas ciudadanas por una sanidad pública de calidad marcaron el principio del fin de la socialista Susana Díaz al frente de la Junta en 2018 y el descontento actual de la ciudadanía va in crescendo, con una población cansada de que el sistema no funcione y a la que el simple hecho de conseguir cita con su médico de cabecera se convierte en una odisea heroica que puede retrasar el encuentro hasta varias semanas. Esta realidad palpable a todos los niveles en cualquier centro de atención primaria de Andalucía sirve para lanzar una seria advertencia el ejecutivo andaluz de PP y Ciudadanos por el caos de la atención primaria, algo que ningún miembro del ejecutivo de Moreno Bonilla se atreve a reconocer a día de hoy mientras achaca exclusivamente el caos de este servicio público esencial a las consecuencias de la pandemia y por supuesto también al Gobierno central, al que culpa de retrasar el envío de virales para la vacunación masiva.

El nuevo líder socialista andaluz ha tomado precisamente el ariete de la sanidad pública como principal causa de lucha contra el ejecutivo de Moreno Bonilla consciente del descontento de los profesionales y también de los ciudadanos. Las sucesivas protestas de sanitarios exigiendo mejores condiciones laborales y alertando de la falta de personal han caído en oídos sordos en la Junta, pero no en el principal partido de la oposición, consciente de que la experiencia es un grado y algo así envió a su entonces líder Susana Díaz a la oposición política y a un largo periplo hasta el ostracismo actual que vive en el Senado.

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

2 COMENTARIOS

  1. Lo que viene a decir que la Susanita y Bonilla defienden los mismos intereses: los del gran capital y el robo (ellos dicen privatizaciones) del patrimonio público, como la sanidad, educación, etc…

  2. Le contradigo,sr Natalio.
    A Susana no fue Moreno Bonilla quien la condeno al ostracismo,fue el pueblo andaluz de centro izquierda que el dia de las elecciones se quedo mayoritariamente en su casa porque antes de votar a Susana o al PP de Moreno Bonilla se abstuvo.
    El problema es que los de derecha votan siempre,siempre,aqui y en berlin,les da igual si han robado,si han mentido,si son corruptos/as,ellos siempre votan.
    Susana,que nunca ha trabajado y siempre ha vivido de la politica,igual que Abascal,fue la mas votada pero la derecha tiene mayoria.
    A Moreno Bonilla en esas elecciones le toco la loteria.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -
Advertisement
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído