Yolanda Díaz tendrá que aprobar la subida del Salario Mínimo sin el apoyo de la patronal, pero con el apoyo de UGT y CCOO. Aunque hay discrepancias sobre el importe de la subido, no lo hay sobre la necesidad de incrementarlo. Los secretarias generales de ambos sindicatos ven “complicado” el acuerdo para subir el salario mínimo (SMI) y se preguntan: “La patronal debe decidir si quiere continuar la senda del acuerdo”
La negociación comenzó la semana pasada con un primer encuentro entre los agentes sociales sin acuerdo en cuanto al importe de subida del SMI. Esta semana se produjo una segunda reunión sin que se moviera la patronal de sus posiciones iniciales.
No se puede ir a una subida ridícula
El secretario general del sindicato CCOO, Unai Sordo, ha asegurado que ve la posición de la CEOE está “bastante cerrada y que no se puede ir a una subida ridícula, sino que el reto es que el salario mínimo, que ahora se sitúa en 950 euros brutos mensuales, sea en 2022 «de 1.000 euros al menos”.
“Tripartito no tiene ninguna pinta de que vaya a haber”, en referencia a un acuerdo en la Mesa del Dialogo Social, ha dicho el secretario general de CCOO, entrevistado en Las Mañanas de RNE.
“Hay mucha presión por parte de algunos sectores. Hay que ver si es posible un acuerdo entre Gobierno y sindicatos”, ha agregado Sordo. Aunque las negociaciones se siguen produciendo de forma telemática, no parece que se vayan a mover las posiciones iniciales.
Desacuerdo profundo con la patronal
El líder del sindicato UGT, Pepe Álvarez, ha dicho en La Hora de la 1, sobre la negociación del salario mínimo que “le parece que están en un desacuerdo profundo con la patronal que ha ido dando diferentes excusas, como hacer un SMI para cada comunidad autónoma”.
La patronal ha dicho el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, “debe de decidir si quiere continuar en la senda de un acuerdo razonable que sitúa los salarios en una posición aceptable para las empresas, menos aceptable para los trabajadores, pero en todo caso una senda positiva (…) o si, definitivamente, le da un portazo al SMI que creo que en todo caso no es por el SMI en sí, sino que es por razones políticas de la propia patronal”.
Una subida de entre 25 y 30 euros
Preguntado por si CC.OO. aceptaría la propuesta del Ministerio de Trabajo de situar la subida entre 12 y 19 euros, Sordo ha dicho que “va a depender de si se fija también la senda de crecimiento para 2022, porque para subir el SMI quedan apenas cuatro meses y hay que ver en perspectiva más amplia”.
“Vamos ya muy tarde y por eso la perspectiva ha cambiado, nuestra posición en la mesa es entre 25 y 30 euros, absorber el impacto de los precios para este año 2021 y un compromiso de que en 2022 se llega a esos 1.000 euros si se cumple por parte del Gobierno ese compromiso creo que la negociación para este 2021 hay margen de negociación […] luego habría que cerrarlo en 2023 para llegar al 60% del salario medio”, ha explicado.
15 euros es insuficiente
Pepe Álvarez ha insistido en que la subida planteada de 15 euros “como punto de partida, es insuficiente”, y sobre el posible aumento de hasta 19 euros ha dicho que “si no hay un acuerdo que incluya el año 2022 y 2023 también sería claramente insuficiente porque, ya que se hace en septiembre, debería tener en cuenta el coste de la vida actual, lo que significa que nos deberíamos estar moviendo en 25-30 euros”.
Posible una prórroga de los ERTE hasta final de año
Las dificultades para un acuerdo sobre el SMI, para Unai Sordo no cree “vaya a contaminar las negociaciones que están por venir, como la de los ERTE, cuya prórroga finaliza este mes de septiembre, aunque considera que las negociaciones que van a venir son complejas con intereses muy divergentes entre sindicatos y organizaciones empresariales”.
Sordo ha mostrado su confianza en que “llegarán a un acuerdo de extensión de los ERTE hasta final de año”.
En relación con otras negociaciones que están por venir, Sordo ha dicho que van a ser “muy duras porque la reforma de 2012 fue muy desequilibrante dio mucho poder al empresariado”.
“Cuando se le da tanto a una parte es difícil que luego esa parte renuncie”, ha asegurado el líder de CCOO, pero desde el sindicato “van a poner «todo el empeño en modificar la reforma laboral para romper los peores vicios del modelo laboral español”.
