San Fernando de Henares es una localidad de casi 40.000 habitantes situada a 25 kilómetros de Madrid. Esta ciudad tiene, desde hace más de 10 años, una «zona 0» donde las viviendas se van resquebrajando poco a poco, donde los edificios crujen y los vecinos viven con el miedo a que les ocurra lo mismo que sucedió este verano en Peñíscola o en Miami, donde dos construcciones se derrumbaron sin previo aviso provocando la muerte a casi un centenar de personas.
Uno de los vecinos con los que ha contactado Diario16 y que ha pedido mantenerse en el anonimato, cuando se le hizo la comparación de lo sucedido en Peñíscola con la situación que lleva sufriendo desde el año 2009, torció el gesto y dijo: «La verdad, [silencio] es que uno lo piensa cuando vi esas imágenes por televisión. Hay mucho miedo, eso te lo puedo asegurar. Yo tengo miedo a que se me caiga el edificio encima y morir sepultado. Y hay mucha gente que vive aquí que también te lo dice. Claro que tenemos miedo».
¿Qué está pasando en San Fernando de Henares para que los sanfernandinos y sanfernandinas vivan así? La respuesta está en las consecuencias de las obras de la Línea 7B del Metro.
Los afectados señalan como causa principal la cercanía de las elecciones a la Comunidad de Madrid de 2007. Según indican a Diario16 las fuentes consultadas «se decidió, sin hacer el estudio geológico adecuado, ampliar la línea con dos estaciones más y que así llegara al Hospital del Henares, hospital de gestión privada que llevaba muy poco tiempo en funcionamiento».
Este hecho provocó que se diera a Dragados, empresa constructora de Florentino Pérez, un permiso de obra de 24 horas al día 7 días a la semana, puesto que el único objetivo era inaugurar el Metro antes de las elecciones, lo que supuso que los vecinos que residen en la ahora llamada «zona 0» que incluye las calles Pablo Olavide, Rafael Alberti y aledañas, pasaran meses sin poder dormir por las noches. «Llamábamos a la policía local y nos decían que no tenían competencias porque la obra era de la Comunidad de Madrid y había permiso para operar 24 horas al día», denuncia una de las víctimas.
Sin embargo, otras calles de San Fernando de Henares más alejadas de la «zona 0» también están viendo cómo sus casas se llenan de grietas, las puertas no encajan y hay miedo a que les pueda ocurrir lo mismo que a sus vecinos, tal y como ocurre, por ejemplo, en algunos edificios de la calle Lisboa o de la calle Pontevedra.
Al año de la puesta en funcionamiento se comenzaron a escuchar crujidos en algunos de los edificios que están sobre el túnel del metro y aparecieron las primeras grietas. «Mi vecino y yo fuimos los dos primeros afectados de mi edificio, ya que vivimos en un piso bajo».
Varios afectados se pusieron en contacto con el Ayuntamiento de San Fernando, quien contactó con la Comunidad de Madrid pero nadie daba una solución. Los desperfectos se fueron expandiendo a más edificios y, ante la falta de soluciones ante un problema evidente, el Defensor del Pueblo tuvo que solicitar la actuación de la Comunidad de Madrid tras las múltiples quejas recibidas.
«A partir de ahí, la pesadilla. Cierres constantes del Metro, técnicos de la Comunidad de Madrid peritando los desperfectos, arreglo de viviendas, inyección de un material para estabilizar el terreno. Esto una y otra vez, trabajando incluso por las noches», afirma a Diario16 una de las afectadas.
Realojo de familias
Hace dos años la situación se volvió tan crítica que hubo que iniciar el realojo de varias familias para poder realizar la reparación de las viviendas, porque cada vez iba a peor. Había que arreglar las paredes por las grietas, las ventanas y puertas desencajadas y un sinfín de desperfectos.
«A cada arreglo que hacían, las palabras del técnico de la Comunidad de Madrid eran “esto ha quedado como un búnker”, pero a todos los años cerraban el metro en torno a tres meses, porque los túneles no están estabilizados», afirma una de las víctimas.
Por otro lado, hace unos meses se produjo la ruptura de un colector que atraviesa la calle La Presa y esto ya remató todo. Se declararon en ruina legal dos viviendas bajas y un local y, posteriormente, realojaron a 27 vecinos de un bloque que también va a ser declarado en ruina porque no logran estabilizar el terreno.
«En mi edificio han vuelto los crujidos y han aparecido más grietas, además de ventanas que cuesta abrir, puertas que no abren del todo o no cierran del todo, etc.», afirma una vecina.
Varias familias han sido realojadas en un aparthotel que se encuentra a 12 kilómetros de San Fernando.
Ayuso y su «complicada» agenda
Fuentes del Ayuntamiento de San Fernando han confirmado a Diario16 que está abierto un censo de viviendas para saber exactamente cuáles están afectadas por la ampliación de la Línea 7B de Metro, una herramienta que a los vecinos que no se encuentran en la «Zona 0» les puede ayudar porque, en muchos casos, se están acometiendo reformas o actuaciones en algunos edificios sin tener conocimiento de si esas grietas están provocadas por el Metro o por otras razones.
Por otro lado, desde el Ayuntamiento también se señala que el actual alcalde, Francisco Javier Corpa, ha comparecido en la Asamblea de Madrid y ha mantenido reuniones con los grupos parlamentarios para «exigir la creación de un plan integral de medidas que dé respuesta a todos los problemas generados por Metro tanto en viviendas como en dotaciones públicas. Se han remitido cartas a Isabel Díaz Ayuso para que visite la zona y que nos dé respuestas y que caminemos juntos para la consolidación de ese plan integral», señalan fuentes del Ayuntamiento de San Fernando que añaden que la respuesta de la presidenta de la Comunidad de Madrid es que no puede visitar la localidad porque «tiene la agenda muy llena». Diario16 se puso en contacto con la Comunidad de Madrid para recabar información de las actuaciones que tenían previstas, pero aún no hemos recibido respuesta.
