En pleno siglo XXI, las modas mueven el mundo. Y cuando se trata de tendencias que, de algún modo, mejoran notablemente la vida de las personas, su crecimiento y expansión son imparables. Es el caso de los trasplantes capilares, unas intervenciones médicas que no son necesarias para mejorar la salud de los pacientes, pero sí ayudan a recuperar la seguridad en sí mismos, la confianza y la satisfacción con su apariencia.
Las clínicas especializadas en tratamientos capilares han empezado a proliferar en España. A las tradicionales, se suman otras de reciente creación y que han aprovechado el tirón para ofrecer los injertos de pelo como el pack estrella de todo su catálogo. Aun así, la verdadera tendencia está fuera de las fronteras nacionales: cada vez son más los españoles (y europeos) que deciden viajar a Turquía para solventar sus problemas de alopecia. En muchos de los casos, solo van a necesitar una única visita a este lado del Egeo. Después de superado el tiempo estimado por el médico responsable, su cuero cabelludo lucirá como en sus mejores años.
Pero ¿por qué tienen tanto éxito las operaciones de trasplante de pelo en Turquía? Según el Sr. Eyad Attar, responsable de Clinicana – uno de los centros con más prestigio y reconocimiento de todo Estambul en el ámbito capilar – los usuarios eligen la ciudad turca por la excelente relación calidad/precio de todos los servicios que se ofrecen en las clínicas especializadas y reconocidas como oficiales por el Gobierno.
De dónde viene la moda de los trasplantes de pelo
Los problemas capilares son cada vez más frecuentes entre la población. Es normal que el pelo se caiga, esa es su naturaleza (proceso de regeneración o renovación). La preocupación llega cuando aparecen factores como el estrés, las enfermedades y los tratamientos farmacológicos o la propia herencia genética que hacen que el número de cabellos acumulados en el peine o cepillo sea cada vez mayor. En estos casos, el primer paso es siempre acudir al dermatólogo para que determine cuál es el nivel de gravedad y cuáles son los primeros pasos para evitar la pérdida total del cabello.
Pero cuando la calvicie es galopante, no hay solución posible. La raíz del pelo está enferma, se debilita y, al final, los folículos pilosos mueren. Como consecuencia, de los que corren esta suerte ya no podrán nacer nuevos cabellos. Hasta ahora. Las operaciones de injerto capilar han abierto un nuevo camino en el ciclo de vida del cuero cabelludo afectado por alopecia.
Razones a favor de los trasplantes de pelo en Turquía
Ya no se puede decir que la calvicie es irreversible. Solo es necesario buscar a los profesionales adecuados para ponerle solución. Y Turquía, gracias a la renovación y a la fuerte inversión de la última década en materia sanitaria, puede presumir de contar con un buen puñado de centros especializados en injertos capilares. Estos son los valores añadidos que los convierten en una excelente elección para realizarse en ellos un tratamiento:
- Calidad certificada. Uno de los primeros requisitos que buscan los futuros pacientes de las clínicas de tratamientos capilares en Turquía son los certificados oficiales de calidad. De hecho, las autoridades de uno y otro lado del Egeo recomiendan no dejarse encandilar solo por las ofertas económicas, sino fijarse en los sellos de autentificación de la excelencia de los centros. Solo así se puede garantizar el éxito de los tratamientos y evitar engaños y futuros problemas de salud.
- Competitividad económica. Los trasplantes de pelo en Estambul son notablemente más baratos que los ofrecidos en España. Eso no tiene nada que ver con la calidad del servicio, sino con la apuesta del gobierno turco con el turismo sanitario. Las grandes inversiones de capital acometidas en el sistema de salud les permite ser competitivos: más turismo sanitario, más abaratamiento de los costes.
- Tratamiento personalizado. No vale todo en las operaciones de injerto capilar. Si la clínica elegida no realiza un estudio previo del estado de salud general del paciente y de su cuero cabelludo, se debe desconfiar. El especialista debe analizar cada caso para saber qué tipo de trasplante va a necesitar (mediante la técnica FUE, tratamientos con plasma rico en plaquetas o PRP, etc.) y cuál es la previsión de resultados. En casos excepcionales, ni siquiera el injerto de pelo asegura que el paciente vaya a recuperar la densidad de su pelo. Y esto también hay que decirlo en una primera consulta.
- Atención continua. El mero hecho de estar lejos de casa ya supone una contrariedad para todos aquellos que se plantean la realización de un injerto de pelo en Turquía. Por esta razón, es importante saber que las mejores clínicas de Estambul suelen ofrecer paquetes completos de viaje que garantizan el acompañamiento desde la salida hasta la vuelta a España. ¿Qué incluyen? La estancia en un hotel próximo al centro donde va a ser intervenido; comunicación continua con alguno de los miembros del equipo médico; revisión antes y después de la operación (previa a la vuelta a casa); teléfono para emergencias… En estos centros, el paciente nunca se siente solo en el proceso de recuperación de su cuero cabelludo. Ni siquiera cuando llega a casa: hasta el alta definitiva (que puede ser hasta dos años después), los contactos son constantes a través de llamadas, videollamadas y fotografías.
- Resultados asegurados. Los factores anteriores ya dejan el camino más que hecho para que la operación de trasplante de pelo sea todo un éxito. Solo se necesita que el paciente siga todas las recomendaciones recibidas después de la operación por el especialista sanitario y esperar pacientemente que su pelo vuelva a ser el que era.
