La última campaña de vigilancia y concienciación sobre el peligro que suponen las distracciones al volante que ha desarrollado la Dirección General de Tráfico pone de manifiesto que usar el teléfono móvil mientras se conduce es la principal infracción de los españoles al volante.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado un total de 304.126 vehículos que circulaban por carreteras convencionales y han efectuado 8.295 controles en los que han denunciado a 6.708 conductores por realizar acciones que suponen una distracción durante la conducción.
El peligro de usar el móvil al volante
De las 6.840 denuncias interpuestas, casi el 43% (2.930) lo fueron por utilizar manualmente el teléfono móvil mientras conducían, según datos de Tráfico a los que ha tenido acceso Diario16.
En este sentido, la Dirección General recuerda que es importante recordar que «nadie debería hacer uso del teléfono estando al volante ya que está constatada su peligrosidad«. Desde Seguridad vial se reconoce esta infracción como equiparable con la conducción bajo los efectos del alcohol.
Además, 327 conductores fueron sancionados por el uso de cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, distintos del teléfono móvil, una conducta que está prohibida porque también supone una distracción en la conducción.
Otras de las acciones más sancionadas por implicar una distracción en la conducción son la lectura (145), la búsqueda de objetos (108), comer mientras se conduce (56), la utilización o manipulación de navegadores, pantallas de acceso a internet, reproductores de video o DVD (51) o distraerse con otros ocupantes del vehículo (47).
