Un trío de congresistas estadounidenses ha presentado un asalto a los derechos de los trabajadores con un proyecto de ley que los excluye, incluso a los que trabajan bajo demanda, del salario mínimo y del pago de horas extra.
La «Ley de elección y flexibilidad de los trabajadores» permitiría «acuerdos de flexibilidad de los trabajadores» que eximan a los empresarios de pagar el salario mínimo y las horas extra si permiten que los trabajadores rechacen un encargo de su empresa y busquen trabajo en empresas competidoras.
Esta propuesta refuerza la estrategia alarmante de que los trabajadores deben elegir entre la flexibilidad en cómo y cuándo trabajar y su derecho a una vida digna. En realidad, muchos trabajadores podrían terminar sin ningún tipo de salario o sin empleo.
Los salarios en muchos sectores de la economía colaborativa ya son impredecibles y bajos. Los trabajadores de las aplicaciones de entrega de comida a domicilio denunciaron que los algoritmos opacos que controlan cuánto se les paga por entrega afectan negativamente a sus ganancias, a veces haciendo que su salario sea inferior al salario mínimo.
Múltiples estudios también han encontrado, según los registros de pago presentados por los conductores de viajes compartidos y los trabajadores de entrega a domicilio de alimentos y comestibles, que muchos de ellos no ganan lo suficiente para cubrir el alquiler o sus gastos de manutención, incluso cuando trabajan en condiciones de inseguras.
Esta es la razón por la que es vital extender los requisitos de salario mínimo a la hora de contratar a los trabajadores, es decir, exactamente lo contrario de lo que exige el proyecto de ley.
El trabajo por encargo también puede ofrecer menos flexibilidad de lo que se les ha hecho creer a los trabajadores. Un estudio dirigido por la economista y socióloga del Boston College, Juliet Schor, descubrió que las personas que dependen del trabajo por encargo para llegar a fin de mes tenían más probabilidades de aceptar un salario más bajo por la misma cantidad de trabajo.
También trabajaron más horas que aquellos que se dedican a trabajar por dinero extra. Para estos trabajadores, la urgencia de aceptar tantos trabajos como sea posible para improvisar una vida restringe drásticamente la libertad de iniciar o cerrar sesión como les plazca.
Los datos del gobierno de Estados Unidos indican que la mayoría de estos trabajadores son asalariados dependientes: una encuesta de 2018 realizado por la Oficina de Estadísticas Laborales encontró que el 69 por ciento de las personas que trabajan para viajes compartidos, entregas y otras plataformas laborales digitales trabajan a tiempo completo.
Este es un proyecto de ley muy peligroso porque el efecto contagio con Estados Unidos siempre está presente en la Unión Europea. Si se toma en serio la libertad y el bienestar de los trabajadores, hay que ampliar las protecciones laborales para los trabajadores, no hacerlas retroceder.
Lo mas digno hubiera sido poner que esa noticia se refería a EE.UU en el titular. Lo demás suena a basura. Un titular engañoso. Pareceis el As
Menos mal que estamos en España…….aunque hay unos salarios de mierda, los trabajadores estamos mucho mejor protegidos y los desempleados también.
Ese titular os rebaja.