No es la primera vez que el ingeniero de Checo Pérez comete el mismo error. Ya sucedió en el Gran Premio de Hungría. Checo no pasó a la segunda manga de la clasificación. Y ha vuelto a suceder.
: En el Gran Premio de los Países Bajos.
Excepto los estrechos de mente capaces de culpar al piloto por algo así, nadie puede pensar que -ni como piloto y como monoplaza- el Red Bull de Pérez no estaba en condiciones de pasar a la segunda manga; y también y a continuación a la Q3, por supuesto.
Es trabajo de su ingeniero sacarle en un momento que no tenga tráfico ni problemas para dar una vuelta lanzada, y también la de conseguir que se advierta a los pilotos que puedan molestar al suyo para que se aparten.
Red Bull tiene fama de ser muy duro con los pilotos, pero en este caso el piloto es totalmente inocente. La responsabilidad la tiene el ingeniero, y si nosotros fuésemos Helmut Marko no dudaríamos en cambiarlo inmediatamente.
No sabemos si el responsable directo y final de ambas pifias es Simon Rennie, el hombre que le habla por la radio cuando está en el monoplaza, o Guillaume Rocquelin, jefe del anterior. Pero sea quien sea merece ser relevado de su puesto fulminantemente.
¿Imagina alguien que el ingeniero de Max Verstappen hubiese cometido dos veces ese mismo error? Lo habrían atado y echado a una pira.
Tigre Tigre
