De 2021 a 2022 ha subido, según la TV privada, la afiliación en la sanidad privada, pensando en que las esperas son más cortas, pero todos sabemos que colas de espera también se producen en la privada, y también hay atascos y cobro de, por ejemplo, una radiografía.
Los partidarios de la sanidad privada aducen que hay que esperar mucho tiempo para que te hagan una ecografía.
La realidad empezó a producirse con las clínicas privadas de Madrid, y potenciada por la Presidenta de la Comunidad de Madrid; la señora Ayuso para luchar contra lo público, comenzó a privatizar centros sanitarios y creó otros hospitales privados, cuando la SANIDAD PÚBLICA en España ha sido ejemplar y de gran calidad y sigue siéndolo.
Los ciudadanos no podemos caer en el error de dejar que se privatice la sanidad, puesto que ésta actúa como un pingüe negocio sin importarles si los pacientes tienen más o menos dinero, o si se tienen que endeudar o arruinarse con tal de salvar la vida de un familiar o la suya propia, porque pueden morir tanto en una como en otra, si está de ello.
En España la SANIDAD PÚBLICA siempre ha funcionado bien, pero en la actualidad en las CCAA y Ayuntamientos gobernados por el PP se está haciendo propaganda contra la Pública y no se financia ésta con suficiente dinero y «sobran» sanitarios, bien sean enfermeras o médicos, intencionadamente para potenciar la sanidad privada y para mancillar el nombre de la PÚBLICA y de paso atacar al Gobierno de la Nación.
A este paso, va a ocurrir como en EEUU que prácticamente no hay Sanidad Pública, y el ciudadano tiene elegir hospitales de primera, segunda o tercera división; los dos primeros tienen que pagar grandes cantidades de Dólares para que los visiten y los de tercera división son solo para gente pobre e indigentes y son atendidos por parasanitarios; es decir, por personal no suficientemente preparado.
El Ministerio de Sanidad de España es el departamento del gobierno para asegurar la salud de los ciudadanos y el derecho a la protección de la salud.
Es bueno recordar algunos datos de Sanidad: De acuerdo con el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2019, «el gasto total del sistema sanitario español en el año 2016 fue de 109.855 millones de euros (77.404 millones correspondientes al sector público y 32.451 millones al sector privado). Esto supone 2.351 euros per cápita y un gasto del 9,1% del Producto Interior Bruto (PIB) español. Asimismo, el Sistema Nacional de Salud cuenta con 3.055 centros de salud, 10.067 consultorios de atención primaria y 468 hospitales (322 públicos)».
Según dicho Informe, «en cuanto a los recursos humanos, el sector sanitario a fecha de 2018 contaba con 780.377 profesionales. De ellos, 188.166 son profesionales de la medicina, 274.633 profesionales de la enfermería y 317.578 son otro tipo de profesionales del ámbito de la salud».
A partir del «control» de la pandemia ha disminuido el personal médico, enfermeras y personal sanitario en CCAA regidas por la derecha.
En este sentido, el 25 de octubre de 2021 elpaís.com indica lo siguiente:
«Las comunidades prescinden de al menos 21.000 sanitarios de refuerzo contratados durante la pandemia
El descenso de la covid precipita el recorte de personal y comunidades como Andalucía o Galicia ya han anunciado que no renovarán una parte de los contratos. Los sindicatos alertan de la sobrecarga laboral que sufrirán los que se quedan…Andalucía, por ejemplo, ya ha anunciado que, de los 20.000 sanitarios que reforzaron su sanidad durante la pandemia, 8.000 dejarán de trabajar el 1 de noviembre. También Galicia ha anunciado que entre noviembre y diciembre prescindirá de los 1.200 sanitarios contratados para la pandemia…pero también hay quien se ha conjurado para consolidar esas plazas pase lo que pase: Cataluña, Baleares, Canarias y La Rioja, por ejemplo, quieren mantener a los efectivos que han incorporado…este contingente llegó a ser de, al menos, unas 80.600 personas, según los datos facilitados por 13 autonomías. Se trataba, sobre todo, de enfermeras, auxiliares, celadores y médicos, aunque algunas comunidades incluyen en esta bolsa también al personal de limpieza y de cocina de los hospitales, por ejemplo».
Con fecha 1 de abril de 2022 la Comunidad de Madrid ha rescindido el contrato a 6.000 sanitarios con contrato covid, de refuerzo para hacer frente a la pandemia, se quedarán sin puesto de trabajo el 1 de abril, después de estar en la primera línea de la lucha contra la pandemia durante más de dos años, según el país.com de 30 de marzo de 2022…la alternativa que les queda es lo que denominan como “contratos basura”: cubrir bajas temporales, entrar en la sanidad privada o mudarse a otras comunidades.
Ejemplo de «contrato basura»: médico en clínica privada dos horas a la semana por 700 €. INCREÍBLE.
El 2 de marzo de 2022, según el diario.es, «Ayuso despedirá este mes a 6.000 sanitarios contratados como refuerzos para la Covid.
La Comunidad de Madrid ha informado a la mesa sectorial de que prescindirá del 60% de los 11.200 médicos con contratos Covid que en muchos casos ya trabajaban para la sanidad madrileña encadenando contratos precarios»…en 2019, últimos datos recogidos por el Ministerio de Sanidad y año precovid, el Gobierno madrileño destinó únicamente el 3,7% a la sanidad. Únicamente Catalunya se situó relativamente cerca de Madrid, al destinar el 4,9%. Estos datos contrastan con los de otras comunidades como Extremadura (8,6%) o Asturias y Castilla-La Mancha (7,6%). La media española es el 5,6%, dos puntos por encima de Madrid.
Con estos datos comprenderemos que potenciar la privada es absurdo, por mucho que quieran los políticos de derechas y ultras engañar al pueblo soberano, con datos falsos.
La historia del ministerio de sanidad se remonta a la Segunda República, cuando Federica Montseny fue nombrada ministra. Tras el final de ésta, el departamento desapareció, y no volvió a recuperarse hasta el año 1977. Desde su aparición, se ha centrado en la política sanitaria del gobierno y, desde el traspaso de la competencia en materia de sanidad a las comunidades autónomas, se encarga de la regulación del marco general y las bases de la sanidad, dirigiendo el Sistema Nacional de Salud.
Ha tenido numerosas variantes, incluyendo dentro de su estructura ámbitos materiales diversos como la Igualdad, el consumo o los servicios sociales.
Con estas sucintas líneas comprenderemos como en la actualidad, los políticos derechistas quieren volver a tiempos pasados y privatizar la SANIDAD, lo que los ciudadanos no deben permitir que España se convierta en un país tercermundista desde el punto de vista sanitario, al contrario los ciudadanos deben apoyar las medidas sanitarias del Gobierno de Coalición. Y luchar:
POR UNA SANIDAD PÚBLICA Y DE CALIDAD.
En realidad la cosa va de lo mismo que el que “inventen ellos”; que mostraba hasta que niveles se infiltraba el pensamiento reaccionario hasta en nuestros más destacados intelectuales; en el que lo arreglen otros. Ciudadanos que se han satisfecho de los beneficios de una sanidad que llego a destacar como las mejores del planeta –al menos en servicios y aplicaciones técnicas- reconociendo al pensamiento reaccionario, a sus representantes políticos, la capacidad para desmontarla y servirla en bandeja al mundo de los negocios como un producto más, mediante este mecanismo de la dejación que desprecia la obligación, uno a uno, de defender lo de todos. Ellos solo tienen que debilitarla y degradarla de modo que el retraso en la atención, en lugar de ser un motivo de lucha y de unión ciudadana, se transforme en la aceptación y la sumisión, una razón de justificación a las estrategias del individualismo egoísta que, teóricamente, mediante su mano invisible, nos resolverá los problemas y nos arreglara la vida.