En las últimas semanas la ciudadanía española ha sido testigo de cómo un pueblo que lucha logra victorias sobre los diferentes poderes. Ocurrió, en el ámbito laboral, con los trabajadores del metal de Cádiz y, el pasado jueves, con los vecinos de la localidad madrileña de San Fernando de Henares al conseguir que su tesón y su lucha fuera reconocida por el poder legislativo de la Comunidad de Madrid con la aprobación de la Proposición No de Ley (PNL) presentada por los partidos de la oposición al gobierno de Isabel Díaz Ayuso. Focílides lo dijo muy claro: «El pueblo, el fuego y el agua no pueden ser domados nunca».
Ambas luchas tuvieron, además, una cosa en común: el apoyo de los alcaldes a las reivindicaciones del pueblo olvidándose de colores políticos y ejerciendo las funciones de defensa de la ciudadanía. En Cádiz, José María Álvarez «Kichi» no dudó en coger un megáfono para apoyar a los trabajadores del metal. En San Fernando, Javier Corpa, lleva años trasladando el problema de las más de 250 familias afectadas por la Línea 7B de Metro a todas las instituciones que hiciera falta y reuniéndose con los partidos con representación parlamentaria, tanto los de izquierda, como los de derecha o de extrema derecha.
Quien escribe esta crónica fue testigo de cómo Corpa, durante un paseo por la zona más afectada y con una agenda muy apretada por tener un acto institucional, no dudaba en pararse el tiempo que hiciera falta con las familias afectadas para trasladarles el estado en que se encontraban sus reclamaciones.
Si el pueblo se une y, además, cuenta con el apoyo de sus dirigentes, entonces ningún poder podrá pararlo. Eso es lo magnífico de la política municipal que, desgraciadamente, se está extinguiendo de la nacional: el gobernante al lado de los gobernados para lograr hacer efectivas las reivindicaciones justas.
Sin embargo, cuando esto ocurre, los poderes utilizan sus resortes para tratar de neutralizar esas simbiosis entre el pueblo y sus gobernantes porque para ellos es más efectiva la generación de una mitosis que los separe definitivamente y, de este modo, que los poderosos sigan manteniendo su control del poder político. A Kichi le llamaron «populista», a Corpa «pesado».
«Estamos dando pasos, pero falta consignación económica»
El alcalde de San Fernando de Henares compareció ayer en rueda de prensa acompañado por los/a portavoces de Infraestructuras de los grupos parlamentarios en la Asamblea de Madrid del PSOE, Gonzalo Pastor, Más Madrid, María Acín y Unidas Podemos, Agustín Moreno.
También asistieron el presidente de la Federación de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), Enrique Villalobos, el secretario general de CCOO Henares, Vicente García y José Delgado, de UGT en la comarca, además de representantes de la Plataforma de Afectados por Metro.
Corpa fue contundente en su intervención al afirmar que «esto es un triunfo de la lucha de los afectados, de la Plataforma y del tejido social. Y quiero aprovechar para agradecer la implicación de los grupos parlamentarios, de sindicatos y de la FRAVM […]. Queda mucho por delante. Ahora, tenemos que pelear para llevar a cabo esta PNL, que es una ‘hoja de ruta’ a seguir y, para ello, hacen falta partidas presupuestarias […]. Es el momento de comprobar el compromiso real del Ejecutivo autonómico con los vecinos y con esta localidad».
Corpa, además, destacó que, por fin, las reclamaciones de la ciudadanía tienen «voz» en la Asamblea de Madrid. «La presidenta ha reconocido este grave problema, que afecta a vecinos que son madrileños, y que sufren en sus carnes una situación que ellos no han creado». El alcalde, además, no quiso olvidarse de los afectados y señaló que «estamos dando pasos, pero falta algo muy importante, consignación económica; y vamos a continuar, de su mano, siempre de su mano, en esta lucha».
