Tratar a tiempo los problemas oculares es muy importante para evitar que vayan a más, sobre todo llegados a una edad en la que la vista puede verse seriamente perjudicada. Por ejemplo, las cataratas son una de las enfermedades más habituales entre las personas mayores. Afectan al cristalino y hacen que esta lente del ojo pierda su transparencia, de modo que empeora la calidad y nitidez de la visión. No obstante, es uno de los problemas que se pueden operar con más facilidad. La cirugía de las cataratas es una de las intervenciones más practicadas y con más éxito.
¿Cómo se lleva a cabo la operación de cataratas?
Esta operación es cómoda para el paciente y se realiza en poco tiempo, “aspirando” la catarata y extrayéndola del ojo a través de una pequeña incisión en la córnea. La tecnología actual ha hecho posible reducir lo máximo posible esta incisión, por la que también se introduce una lente intraocular que ocupa el lugar del cristalino que estaba afectado de catarata.
La operación de cataratas ha tenido importantes avances, al contar con grandes profesionales y con novedades tecnológicas que permiten usar pruebas diagnósticas, microscopios, láseres, lentes etc. de muy alta precisión. Todo ello, para garantizar la seguridad de cada operación y que los pacientes consigan un resultado satisfactorio. Cada vez más personas pueden mejorar su salud visual de la mano del progreso de la cirugía de cataratas, que ofrece excelentes posibilidades de volver a ver bien, incluso sin gafas.
¿Cuándo se opera una catarata?
La catarata hoy se opera mucho antes que años atrás, cuando se esperaba a que estuviera muy desarrollada y la visión ya había sufrido un deterioro significativo. No obstante, ahora en la oftalmología se apuesta por retirar la catarata de forma más temprana, puesto que se trata de una operación muy exitosa que aporta grandes beneficios a los pacientes. No hay necesidad de que la pérdida de transparencia del cristalino progrese hasta fases severas, aunque será el médico especialista quien valore el momento más adecuado en cada caso.
Beneficios de operarse de las cataratas
La operación de cataratas tiene la ventaja de que se realiza normalmente con anestesia local o con gotas y sin ingreso hospitalario, así que el paciente puede volver a casa ese mismo día. La cirugía en sí dura menos de media hora por cada ojo y no implica suturas, porque la incisión que se practica es mínima.
Una vez realizada la intervención, las mejoras son apreciables ya en las primeras 24 horas y el paciente puede seguir con su rutina habitual, aunque tomando ciertas precauciones para evitar que haya cualquier complicación. También es necesario utilizar medicación postoperatoria y acudir a revisiones de control para confirmar que todo esté correcto.
Someterse a una operación de cataratas significa mejorar la salud visual y conseguir una calidad de vida mayor. Así, se consigue una visión más nítida, dejando de ver borroso, y las actividades cotidianas se pueden llevar a cabo sin dificultades añadidas. Gracias a este tipo de intervenciones, los accidentes o lesiones por caídas se reducen drásticamente, sobre todo en gente mayor.
La salud visual es muy importante y cuidarla de manera continuada es una forma de mejorar la calidad de vida. Las cataratas son una enfermedad que principalmente surge con la edad, pero que también puede aparecer en personas más jóvenes. Por ello, resulta esencial llevar un control a corto plazo. Tratar a tiempo los problemas oculares es muy importante, ya que favorece que aquello que nos gusta hacer en el día a día no se vea limitado por una mala visión.
