viernes, 26abril, 2024
17.5 C
Seville

Que el fin del mundo te pille bailando, venid a las cloacas

César Maltrago
César Maltrago
Estudiante de filosofía, fotógrafo, escritor y músico.
- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

«En pos del milenio» clama el libro de Norman Cohn. Un análisis de lo más entretenido a cerca de las viejas revoluciones milenaristas . Y es que este tema fetiche se mantiene más vivo que nunca desde el más primigenio cristianismo.

«El mil(i)ena(i)rismo vaaa.. a llegar» repetía un enajenado y metafisicamente sereno Arrabal un 5 de Octubre de 1989 en el programa “El mundo por montera” de RTVE. Por entonces la TV publica aún tenía algún espacio para parías, aburridos, desencantados, ratas de biblioteca, alcohólicos y demás ralea. Por aquel entonces aún se vislumbran en los platós remansos de viejos standards de la transición, de gran calidad como “La Clave” o “La Mesa Redonda”. Otra época… una época donde Antonio Gasset y su cinismo eran posible.

Nunca presencié tal programa en directo, al igual  que muchos de mi generación… Deberíamos estar cagándonos en nuestros pañales o mirando con risueño misterio algún objeto luminiscente y sonoro (en este caso no me refiero a la TV). A pesar de la brecha generacional, dicho hito humorístico-cultural ha pervivido en nuestros lobotomizados, precarios y ni-nizados corazones (ninguneados)

Podemos decir que el patetismo y el psicodrama marida mucho con nuestra generación. La performance como comercio, el comercio como performance. La mercancía sacrificial de los payasos como bien preciado,«precario» . La mitología del consumo vestida  de risueño cachondeo, la mitología del drama vestida de lo inevitable.

Aquel viejo programa versaba sobre la profética tradición apocalíptica, sus paisajes, mesuras, lindezas, y escatologías. Parece que se tratará de una vieja oda a la añeja  mistura de esperpento, surrealismo y  autóctona performance.

Ya Dalí nos había abierto un liceo patrio para el esperpento en París y Nueva York; con sede en Figueres,

Y es que España guarda una conexión ontológica con lo surreal, lo patético, lo esperpéntico, lo dramáticamente hilarante, lo profético (vease nuestra guerra Civil y La Segunda Guerra Mundial).

En una sociedad protestante, rebosante de vidrieras y espejos, tal costumbrismo sarcástico supongo que sería imposible. Eso es algo que se percibe muy bien en el meollo de nuestra novedosa y bienpensante     «Sittlichkeit» calvinista; y es que ya que pocos consiguen escapar del influjo yankee u anglosajón en sus narrativas. Con la emoción a flor de piel… Hasta en el parlamento europeo se procuran danzas y rituales de lo más emocionantes y vanguardistas en pos del clima, la fraternidad, el dominio universal y el Dios dinero. La brillantina resulta asfixiante. ¿Quien preferiría “La Cinta Blanca” de Haneke a “Los Santos Inocentes” de Camus?

Y es que hasta el cine en España se viste de malditismo y vanguardia, tal que en muchas de sus otras artes. Bien lo supo Zulueta.

España, ese ente … o carismático fantasma divaga entre el complejo de inferioridad y un añejo imperialismo taciturno de cocinada ternura.

Arrabal, un tipo con un bagaje casi renacentista, siempre será recordado por su famosa performance inconoclasta en la TV pública, y recuerdese bien: – no por sus obras sino por sus vidrieras.

En un país donde la caricatura hipostasia la obra o el contenido es lógico que el arte plástico haya sido uno de los grandes hitos nacionales. Bien lo ejemplifica Goya. Y es que lo más español no es la paella o el gazpacho sino el arte de vanaglariogloriarse mediante la flagelación y demás deportes hagiográficos.

Y es que España tiene algo innegablemente quijotesco. El absurdo brota en toda su plenitud; en la novedad, la tradición, su folclore, etología y gastronomía. España como animal sagrado, animal de compañía («sacro»):« una de las más preciadas mascotas del Imperio», también una de sus mejores colonias. Un ente que prevalece en lo político entre un estigma ambivalente de autodesprecio y delirios de grandeza. Y es que como recitaba el slogan  turístico de FragaSpain is diferent”… Bien lo demostró Buñuel y bien lo corroboró Ruiz Mateos, McNamaraDon Juan Carlos de Borbón.

Y es que como tierra de vanguardia estética hemos perdido calidad considerablemente…

Vivimos una época donde la política es un reality show sin gracia y alto presupuesto. Hemos perdido calidad dramática y Arrabal es nuestro «prophetae» (profeta).

Arrabal es nuestro Kurt Cobain particular, un Luke Sky Walker de la farándula y el pensamiento.

Arrabal, como astuto publicista del fin de los tiempos homenajea el etilismo en un país irremediablemente etílico. Celebrando la escatología final… Su danza, un tango espirituoso y trasnochado en un plató gris e insípido. Si ese San Benito de mercadotecnia no es marketing de lo sagrado que baje Dios y lo vea.

En un mar de realitys, talent shows. programas sobre adicciones absurdas, pequeñoburgueses oligofrénicos exhibicionistas, prostitutas de baja calaña, putillas encandiladas por bajos atronantes, psicópatas exhibiendo sus mascotas, anuncios de poker, bestias multiformes, panaceas mefistofélicas, anuncios de apps manchados de grasa, soft porn papel couche, programas sobre famosos arruinados y politoxicómanos,  pitonisas empolvadas, luces estrobocópicas y noticieros que parecen un congreso evangelista Arrabal fue la luz que abrió nuestro Zeit-Geist socio-cultural; y además con cierto cinismo y elegancia. Y es que nuestro héroe no andaba desencaminado: el milenarismo ha llegado y esto no ha hecho más que empezar.

Auguro una nueva época de mercaderes del Apocalipsis con escapularios technicolores, luminiscentes, atronantes y de lo más divertidos.

Y es que como bien cantaba la canción de Los Siniestro todo parece una gran secta de embriagados flagelantes que se dan la mano hacía la extinción. Algunos guardan ciertos ingresos para el despiporre final, sus cuentas bancarias lo barruntan. Las bacanales dionisiacas serán demasiado ingenuas al lado de este nuevo teatro mitológico.

El psicodrama solo acaba de empezar; un baño de plasma nos dorará la piel.

Mientras la máquina mediática defeca a través su gran industria de estiércol y fértil hediondez, la red de redes nos muestra el camino del sibaritismo escatológico en sus dos sentidos (el griego y el judio)*etimología.

Seguro que el 2030 nos augura cruzadas de Youtubers, tertulianos e influencers milenaristas repletos de buenas propósitos, amor y consejos. Además estoy seguro que la democracía progresivamente se hará más humana; así podremos votar a nuestro actor favorito con un corazoncito a través de una app de moda; o quizás vía oral desde el sofa de nuestra casa. Quizás nuestra querida Alexa*2 pueda freirnos los huevos y darnos los buenos días mientras ingerimos antidepresivos, benzodeacepinas, suplementos alimenticios y algún tipo de bebida ecológica con altos niveles de E-240. Eso sí, todo muy correctamente homologado por las sociedades de consumidores y diversos organismos de intacta autoridad y moralidad.

Quizá no quede ni el monte y solo haya espacio en las cloacas para el que quiera escapar de este hedor pútrido y purulento. ¡Venid a las cloacas!

  • 1. Laescatologíajudía es una rama del pensamiento judío que se ocupa del destino final del pueblo judío y del mundo en general.
  • 2. Bot de Google encaminado hacia la domótica.
- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

1 COMENTARIO

  1. El que gana es el que impone su relato y, en eso, la derecha española es maestra desde siempre y desde los pulpitos que, como muestra, nos sirven para reconocer el origen de origen del anticlericalismo español que llego a percibir cómo funcionaba la propaganda política del momento en su alcance y extensión por todos los pueblos del país, así como en su investidura paternalista atentando con su forma contra la mayoría más débil. Nada ha cambiado y en la práctica no necesitan argumentos profundos que construyan opinión sino ir directamente a las emociones y necesidades de la gente agitando miedos y afectos que movilicen las masas contra sus adversarios; pues si es verdad que la solidez de una opinión y sus posibilidades de articulación racional pasan por el cerebro, la fijación inmediata y la identificación emocional lo hacen a través del deseo, el miedo y la culpa.
    El hecho es que consiguiendo hegemonizar, mediante la apelación a emociones primitivas como la tierra, la Patria, envueltas en una buenas dosis de enemigos peligroso responsables de nuestros males que nos lleva hacia el caos, se sustituye perfectamente el referente ideal de los anhelos populares y se llega a legitimación de otro que sostenga de las relaciones de dominación y explotación.
    Saben ir directos, a las emociones, a los miedos, a la angustia del fracaso; es tan viejo como la culpa del otro, del diferente (el que piensa distinto, tiene otro color, otra edad, otro sexo, otro estatus…) que esta presente en la demonización y el objeto de la fobia y da resultado, tan bien resultado que siguen desde siempre siendo minoría imponiéndose e incluso siendo respaldados por las mayorías victimizadas.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído