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Parque Nacional de Timanfaya: una de las joyas de las Islas Afortunadas

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análisis

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Visitar las islas Canarias es algo que suele asociarse al turismo de playa, pero nada más alejado de la realidad. Cualquiera de las islas ofrece innumerables atractivos además de ese. En Lanzarote se encuentra el Parque Nacional de Timanfaya, un auténtico tesoro natural que debes descubrir y qué no te va a dejar indiferente. Cuenta con la particularidad de ser un parque cuyo principal valor reside en su geología, por muchos citada como muy similar al paisaje lunar.

Formación del Parque en Lanzarote

Este espacio se formó tras una serie de erupciones volcánicas, acaecidas durante los siglos XVIII y XIX. Furiosas coladas de lava, dieron lugar a un paisaje que hoy podemos admirar y qué es único. La fundación del parque está fechada el 9 de agosto de 1974, momento en el cual se pone en valor la riqueza geológica y natural de este espacio, que tiene una extensión de 5107 hectáreas.

El parque se encuentra situado en la parte noroeste de la isla, comprendiendo los municipios de Tinajo y Yaiza. De esta manera, la provincia de Las Palmas cuenta con un parque nacional de características singulares, y que recibe una gran cantidad de visitantes cada año. Y es que más del 50% de los visitantes a Lanzarote visitan el parque, siendo, de hecho, uno de los principales atractivos para el turismo insular.

Una de las características más sorprendentes de este parque es que todavía cuenta con 25 conos volcánicos activos, alcanzándose temperaturas muy elevadas, incluso en oquedades cierta profundidad de la tierra. Esto permite cocinar en el restaurante El Diablo alimentos de manera natural, una sorpresa para cualquiera que visita este espacio.

Visitar Timanfaya sin esperas

Las Excursiones guiadas al Parque Nacional de Timanfaya son una de las maneras más acertadas de conocerlo, porque vas a poder comprender cómo es el parque en su totalidad, sus curiosidades y toda la información que necesita saber. Se trata de una extensión muy amplia de terreno, en la cual podemos perdernos muchos detalles, por tanto, no lo dudes, debes contratar tu excursión guiada al parque para poder comprender toda su inmensidad. Una de las ventajas de contratar tu excursión es que puedes visitar el parque si esperas ni demoras. Así, tanto tú como tu grupo podéis aprovechar al máximo el tiempo dentro de este espacio natural que tanto valor posee.

Pero, además, tendrás la oportunidad de contemplar una gran cantidad de curiosidades que solamente podrás vivir en el parque. Uno de ellos es el de los experimentos que ahí mismo se realiza, el del géiser del islote Hilario. Se vierte el contenido de un cubo de agua por un agujero en el suelo. Al contacto con el interior caliente y procedente de las cámaras magmáticas, se convierte en vapor de agua que sale rápidamente despedido. Algo que no te puedes perder y que es uno de los atractivos principales de quién es visitan el Parque nacional de Timanfaya.

Probablemente, también esté deseando realizar un paseo en camello. Este animal está perfectamente adaptado a las condiciones de la isla, con una vegetación prácticamente nula y un suelo muy complicado. Disfrutar de toda la inmensidad del parque a los lomos de uno de estos animales es una experiencia que no puedes dejar de hacer. El caminar pausado de los camellos invita siempre a descubrir todo lo que el parque ofrece de una manera única.

También es muy recomendable hacer la Ruta de los Volcanes, en un recorrido de 14 km podrás contemplar todos los conos que hiciste en el parque, y que le proporcionan toda su idiosincrasia. Se realiza en jeep, por lo que podrás disfrutar al máximo de un escenario único y que no va a dejarte indiferente. Puede decirse que quien visita el Parque Nacional de Timanfaya está introduciéndose en un lugar diferente que no vas a poder ver en otra parte del mundo. La especial configuración de estas tierras le dieron la categoría de Parque Nacional hace casi cinco décadas, y supone un importante estímulo para el turismo de esta isla del este del archipiélago canario.

Si estás planeando una visita a Lanzarote, debes buscar un hueco para visitar el Parque Nacional de Timanfaya. Supone el contrapunto a tus jornadas de descanso, pero vas a llevarte una sensación muy agradable y conocer la grandiosidad de la naturaleza desde otro punto de vista. La magia del parque reside en su suelo, y parece increíble que un paisaje tan árido sea capaz de provocar unas sensaciones tan mágicas a los sentidos. A la vuelta de tu visita al parque, tendrás que asumir toda esa gran cantidad de sensaciones que este te ha dejado. A tu regreso a tu lugar de destino, podrás seguir recreándote en las características únicas de uno de los parques nacionales más singulares de nuestro país. Timanfaya va a dejar un hueco en tu corazón.

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