Operación Santander-Casa Real: ¿todo queda en familia?

Diario16 ha publicado en los días pasados parte del curriculum de Jaime Pérez Renovales, secretario general del Banco Santander y, por tanto, máximo responsable del departamento jurídico de la entidad, en relación con su candidatura a sustituir a Jaime Alfonsín como Jefe de la Casa Real.

Además del escándalo que podría suponer para la reputación de España que la mano derecha de Ana Patricia Botín ocupara un puesto que da acceso directo al Jefe del Estado, nos podríamos encontrar con una serie de presuntas relaciones personales y familiares que ya llevarían el asunto a otra esfera aún más peligrosa para el prestigio del país y del propio Felipe VI, sobre todo en una situación límite como el que vive en la actualidad la Monarquía por los escándalos del rey emérito.

El director de la Asesoría Jurídica de Litigios, Ciberseguridad y Riesgo Legal del Banco Santander se llama Jaime Calvo Alfonsín. Por tanto, es un subordinado de Pérez Renovales. Por otro lado, Emilio Calvo Alfonsín es apoderado de una empresa de la que el banco cántabro es el socio único: Santander Operaciones España, una Sociedad Limitada con un capital social de 3,6 millones de euros. Además, durante dos años fue también apoderado de Santander Global Operations.

¿Existen relaciones familiares entre Jaime Alfonsín y estos dos altos ejecutivos del Banco Santander? ¿Es casualidad el hecho de que Jaime Calvo Alfonsín sea un subordinado de Pérez Renovales y la elección de éste como candidato a sustituir al actual Jefe de la Casa Real?

Por otro lado, el currículo laboral de Jaime Alfonsín también lo relaciona de manera indirecta con el banco presidido por Ana Patricia Botín. En 1996, Juan Carlos I decide dar más responsabilidad al príncipe Felipe y amplía el organigrama adjunto a él. Se eligió a Jaime Alfonsín, un abogado que no había alcanzado aún la cuarentena, a través de la amistad que une al rey emérito con Aurelio Menéndez, uno de los fundadores del despacho Uría y Menéndez, el bufete de cabecera del Santander. Menéndez, por cierto, fue quien se encargó de diseñar y organizar el programa de estudios del actual Jefe del Estado.

Alfonsín accedió a la Secretaría del Príncipe, tras abandonar su trabajo en, precisamente, Uría y Menéndez, despacho de cabecera del Santander y lugar donde conoció a su esposa, la abogada Natalia Uranga, y el bufete encargado de redactar las capitulaciones matrimoniales del rey.

Durante estos años ha sido la sombra de Felipe VI y uno de los hombres de máxima confianza, hasta el punto de que fue el encargado de diseñar los encuentros secretos con Letizia Ortiz. Por otro lado, el actual Jefe de la Casa Real ha logrado ser una de las personas en las que el rey confía plenamente. ¿Por qué, si es así, se pretende colocar en la Jefatura del Estado a un hombre como Jaime Pérez Renovales?

Banco Santander, el apellido Alfonsín, Ana Patricia Botín, Uría y Menéndez y la sombra del nombramiento de Jaime Pérez Renovales como sustituto del actual Jefe de la Casa Real. Un cóctel donde hay demasiadas coincidencias. ¿Todo queda en familia?

Nepotismo y pago de favores

El nepotismo y el pago de favores es algo habitual en el Santander, algo que en algunos estados de EE.UU. está catalogado como delito, además de no estar bien visto entre los círculos empresariales.

 Uno de los ejemplos más conocidos de colocación en el Santander, presuntamente por pago de favores, es el del hijo de Luis Pineda, el que fuera factótum de AUSBANC que actualmente está siendo juzgado por un supuesto delito de extorsión. La fluida relación de Pineda con el Santander y su vicepresidente Juan Manuel Cendoya y el intercambio de favores trascendió a los medios tras un informe de la UDEF. Personas bien informadas cuentan que Luis Pineda Cuadrado fue nombrado en Santander UK en Londres en pago del favor de su padre por retirar en su día la acusación popular en el caso de las cesiones de crédito que implicaba directamente a Emilio Botín, Rodrigo Echenique Gordillo, Ignacio Uclés Romero y Ricardo Alonso Clavel en un fraude fiscal de más de 80 millones de euros y falsedad en documento oficial y mercantil, y que dio lugar a la bochornosa doctrina Botín (con el voto particular contrario de 5 magistrados del Tribunal Supremo entre ellos el actual y anterior Fiscal General del Estado). A partir de la retirada de la acusación en las cesiones de crédito, Ausbanc consiguió para sus publicaciones jugosos ingresos por publicidad del Santander y su presidente consiguió colocar a su hijo en el banco.

También existen otros casos de colocación, que podrían considerarse como pagos de presuntos favores judiciales al Santander y a la familia Botín, como los hijos de algún miembro de la judicatura que ha dictado alguna sentencia favorable y, en pago, ha conseguido que su hijo termine sus estudios en la Universidad Pontificia Comillas y sea colocado en empresas de la esfera de los familiares de los altos directivos del Santander, como Rodrigo Echenique Sanjurjo, hijo de Rodrigo Echenique Gordillo, el sempiterno vicepresidente del Santander. Rodrigo Echenique hijo, después de su paso por el Santander como managing director, llegó a Altamar Capital Partners de la que es socio director.

Esos hijos de altos directivos del Santander también son colocados en otras empresas vinculadas al banco como Manuel Echenique Sanjurjo que se incorporó en 2000, nada más acabar la carrera de Derecho, a Uría y Menéndez, despacho de referencia del Santander, siendo nombrado socio en 2012. Pocos llegan a socios de un despacho como Uría y Menéndez tan temprano salvo que destaquen o tengan padrinos tan importantes como el vicepresidente del Santander.

Ejemplos hay muchos más, pero, siempre da la casualidad de que Uría y Menéndez aparece en los asuntos del Santander. Como decimos, todo queda en familia.