viernes, 26abril, 2024
19.8 C
Seville

Made in PP (versión Andalucía)

Joaquín Francisco Castillo Eslava
Joaquín Francisco Castillo Eslava
Profesor de secundaria y doctor en Economía asociado a la UCA.
- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

La herramienta “Made in” ha sido utilizada desde hace años para ver el origen de fabricación del producto. En el caso de “Made in China”, supone más que un simple control para visualizar el lugar de elaboración del bien ya que ha manifestado; por un lado, una deslocalización del proceso productivo de las grandes marcas para así reducir sus costes empresariales esquivando derechos laborales y conservación del medio ambiente. Y, por otro lado, ha reflejado que productos provenientes de occidente han sido copiados, a veces de dudosa calidad pero de gran imitación, por empresas chinas añadiéndole la etiqueta del “Made in China”.

En esta línea, la deslocalización, con permiso de la globalización, se consagró y fue un elemento clave para entender el “Made in”. Asimismo, su modus operandi dejó sin industria a occidente y con ello miles de empleos bien remunerados fueron sustituidos en trabajos de condiciones miserables. Por ello, gran parte del “Made in” se justificó en competitividad y progreso, pero se convirtió en venganza contra la humanidad debido a los desequilibrios que origina. 

Sin embargo, “Made in” no sólo vincula lo empresarial puesto que también está de moda en el ámbito político. Por ejemplo, el PP andaluz maneja el mismo instrumento de copiar e imitar símbolos históricamente del andalucismo de izquierda para sus intereses electorales. De esta manera, ha embelesado a una sociedad andaluza, carente de relato andalucista, logrando la mayoría absoluta.

Banderas andaluzas a doquier en cada uno de sus manifestaciones cuando siempre renunciaron a ella debido a la gran exaltación, casi orgásmica, de la rojigualda. Además, incluso, han oficializado el día de la Bandera Andaluza. Comunión con el Partido Andalucista (PA),  donde comparten encuentros piropeándose uno a otros: “quién te ha visto y quién te ve y sombra de lo que eras”. Fomento, en la televisión pública, del idioma: “el andalúh”.

Este último punto resulta curioso puesto que no conozco a ningún integrante de su partido que hable o tenga acento andalúh; es más, somos la nación que más dota al Parlamento de diputados y mis oídos sigue sin oír una persona que se exprese en andalúh. 

Estos son sólo algunos de los elementos que utiliza el PP en su afán de imitar un andalucismo de gran envoltorio, pero sin consistencia alguna puesto que el andalucismo se demuestra con políticas que generen oportunidades para todos y todas y no, exclusivamente, para el 1% de la población. Sin embargo, queda patente, por los últimos resultados electorales andaluces, a los votantes no les importa; y es a partir de aquí donde la izquierda tiene que hacérselo mirar porque nos están comiendo la tostada a golpe de “Made in PP”. 

Poco a poco van conquistando símbolos andaluces y todavía no han tocado Blas Infante, e incluso, los asesinados por el franquismo ¿quién sabe?. Pero, ¡Tranquilos!, todo llegará y de ser así, y no reaccionar, nos espera otro régimen de cuarenta años. 

Tampoco se conforman, con copiar y hacer suyos elementos andalucistas puesto que se están apropiando e integrando en sus discursos de términos emancipadores, que han sido por historia vinculado con la izquierda, como son: revolución (verde, digital y fiscal), y libertad (económica).

Esto le están permitiendo no sólo asentar sus políticas neoliberales, con las consecuencias socioeconómicas negativas (sanidad, educación y servicios social) que ya conocemos, sino que logran que gran parte de la ciudadanía andaluza se sientan identificado con ellos y ellas. Por tanto, es muy peligroso en el largo plazo porque la perpetuidad de sus políticas puede soslayar una Andalucía totalmente privatizada; eso sí, con la etiqueta del “Made in PP”. 

Made in PP, un gran instrumento que sirve para envolver en verdi blanco cada práctica que va directo en hacer al rico  más rico y al pobre más pobre como así lo denuncia Intermon Oxfam afirmando que el 1% más rico acumula el 63% de la riqueza producida en el mundo desde 2020 debido a, precisamente, políticas socioeconómicas que promulga el PP (ejemplo: suprimir impuesto al patrimonio).

Made in PP, un gran instrumento que funciona como “caballo de Troya” lleno de símbolos andalucista que la sociedad andaluza percibe como algo aparentemente agradable pero que traerá consecuencias de desigualdad atroz protagonizado por un mercado laboral del “sálvese quién pueda”.

Por tanto, el Made in PP sigue su curso y la izquierda andalucista debe despertar en crear un relato ganador caracterizado por:

uno) Denuncia: ser altavoz en dejar claro que existe un sistema 1d3 fomentando tanto por el PP cómo por el PSOE. Esto significa que uno de cada tres familias andaluzas está cerca o son marginales y pobres, acompañado por barrigas vacías de niños y niñas.

Dos) Alternativa: ser alternativa en la construcción de proyectos socioeconómicos que inviten a recuperar la cesta de la compra para que las familias andaluzas jamás tengan la nevera pelada y al fin obtengamos la victoria de la soberanía.

Tres) Nación: sin nación no hay paraíso. Si titubeamos en decir lo que somos, mostrando así complejos con respecto a otras naciones, directamente nunca nos tomarán en serio. Por ello, si no somos nación no tomaremos decisiones y seremos dependiente del centralismo tanto español como europeo donde nos mandan directamente a la periferia con la desigualdad que ya padecemos hoy.

Andaluzas y andaluces, hacer boicot en aquellos productos que escriba en la etiqueta “Made in PP” puesto que “aunque la mona que vista de seda…”

 X la revolución de los desigual3s…

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído