Años de lucha desde las trincheras, a través de Ecologistas en Acción a la que después se unió Podemos, Foros de Izquierda-Los Verdes y otras organizaciones, hasta crear la Plataforma contra las minas de uranio, parecen haber tenido su recompensa al desplomarse en bolsa la empresa minera de Berkeley por la enmienda presentada por el PSOE y Unidas Podemos al proyecto de Ley de Cambio Climático que prohibirá estas minas.
Desde Salamanca y Badajoz se luchaba sin cuartel contra la instauración de unas minas donde ya no crecería la hierba, ni la vegetación autóctona. La pelea era desigual gracias a las campañas millonarias de marketing empleadas por Berkeley en ambas zonas a través de los medios de comunicación locales y regionales que ignoraban -poderoso caballero es don dinero- las múltiples iniciativas de la Plataforma contra estas minas de uranio.
Los dos partidos del Gobierno de coalición en el Gobierno de España, PSOE y Unidas Podemos, han acordado prohibir estas minas que son nocivas para el medio ambiente y para las propias personas que viven en el ámbito de influencia de las zonas.
Diario16, en estos últimos años, se ha hecho eco de las múltiples protestas acumuladas por la Plataforma creada contra las minas de uranio.
Marcha en tren
Hace apenas dos años, se realizó, entre otras muchas iniciativas, la marcha Tren Ibérica en Tren contra la mina de uranio en Retortillo (Salamanca), en la que expertos avisaron que “el polvo radiactivo y gas radón que emitirán las minas que Berkeley Minera pretende abrir” serán peligrosos para los vecinos de Salamanca.
Así lo corroboró también la Agencia Portuguesa de Ambiente, señalando que el proyecto de explotación minera de uranio en Retortillo “era susceptible de tener efectos ambientales significativos en Portugal” por la cercanía a la frontera portuguesa, en “atención a la dirección de los vientos”.
La empresa Berkeley continuó talando cientos de encinas de Retortillo en plena temporada de cría de las aves para seguir con el proyecto a pesar de que los servicios estaban paralizados. A su vez, lanzaba campañas mediáticas sobre las maravillas de estas minas que darían trabajo a la población salmantina y pacense.
El proyecto de construcción de la primera mina de este material químico en Europa llevado a cabo por la empresa australiana Berkeley supuso la tala inicial de un millar de encinas para desviar la carretera comarcal SA-322. Una tala a la que habrá que añadir otra de al menos 25.000 ejemplares que realizaron entre los meses de abril y mayo en plena temporada de cría de las aves.
Parece que, por una vez, ganaron los de las trincheras.
Vamos a ver, Berkeley es una macrocorporacion minera con cientos y cientos de miles de euros en el bolsillo. Si no abren la mina en Salamanca, la abrirán en Chile. O en Africa. O en India. Será porque no hay minas de uranio por el mundo.
Aquí despreciamos la mina y por ende puestos de trabajo, en una situación que dista mucho del pleno empleo y de los salarios europeos, a favor de un puñado de árboles y de que crien los pajaritos. Pero amigos, estamos llevando el problema a otros países, países más bien pobres y con una normativa laboral “más laxa” por decir un eufemismo.
No contaminamos aquí, pero contaminamos (y explotamos a los trabajadores) allá. En vez de producir aqui, lo importamos de allá (así que el producto que compramos se encarece). Compramos en vez de que nos compren, así que producimos la riqueza de otros en favor de la nuestra. Y por último, nos olvidemos que al importar, dependemos de otros (recordáis a quien compramos todas las mascarillas). Y esto aplica al uranio o a lo que queráis.
No hay que dejar de lado el problema medioambiental, PARA NADA, pero hay que tener una visión más amplia. Ecología SI, pero contaminar en otro lado NO. O no contaminamos ninguno, o contaminamos cada uno lo que nos toca. Los problemas no se resuelven armando un escándalo aqui para que la empresa se lo lleve a otro sitio.
La energía renovable tiene que prosperar, tenemos que descarbonizar nuestra economía, pero no puede ser nuestra prioridad a la hora de elegir entre empleo o pajaritos y bosque.
El comentario anterior no tiene ni principio ni fin, en una palabra, poca idea tiene de lo que habla. La información de como funciona el mundo es importante y este señor debe molestarse por adquirir parte de ese conocimiento y después dar su opinión, la que sea y todos contentos.
Tu lo has dicho, han ganado una batalla a la hora de lograr que psoe y podemos INTENTEN que no se llegue a abrir. La empresa tiene varias decenas de batallas ya ganadas. Con permisos y licencias, incluso sentencias judiciales. Por cierto esa batalla fue el pasado martes. Ya ha habido otra posterior este viernes. UGT ha salido defendiendo el proyecto, como un proyecto MUY BUENO para la comarca en puestos de trabajo ( mínimo unos 15 años y varios miles de puestos de trabajo entre directos e indirectos) y bueno para ESPAÑA por qué supondría unos 500.000.000 de euros en ingresos vía impuestos y Seguridad Social. Psoe y podemos prefieren subir impuestos a autónomos, obreros y clase media baja. Pero….
Espero y deseo que al final se abra. Si no ya se hará cuando estos descerebrados dejen de gobernar ( aunque con las declaraciones de #PableninIglesias igual nunca más se cambia de gobierno como ocurrió en Venezuela)
A Diario 16: A parte de hacer un artículo que no tiene ni un resquicio de objetividad y que obvia las necesidades económicas e impacto en la población salmantina, me surge una duda ¿Por qué hay en su página web un botón para darle a <> y en cambio no existe el botón contrario? Sois muy buenos con vuestra parcialidad la verdad. Que verguenza
Cambio de paradigma totalmente conforme con lo que dices.que hipocresía .no aquí no contaminemos cumpliendo las normas y con las medidas adecuadas pero contaminar en áfrica para que lo cojan los niños esclavos.y así lo importamos alucinante
No cantéis victoria, al final ganará la cordura y esta mina irá para adelante. La energía nuclear es mucho más limpia y segura que hace décadas y permitiría independencia energética a España.
PD: lamentable analogía con la guerra civil.