¿Cómo os sentiríais si, en los medios de comunicación oficiales, os insultaran cada día? A mí me duele, por no decir, que me irrita profundamente. Nunca le he faltado al respeto a nadie porque haya tomado una decisión diferente de la mía. Podré estar de acuerdo con él, o no, pero no le faltaré al respeto. La utilización de un lenguaje ofensivo hacia una parte de la población, lo único que hace, es dividir a la sociedad en dos bandos: buenos y malos. Cuando esto sucede, la rabia, la indignación, la violencia y la confrontación, tienen el terreno abonado para germinar.
No soy “negacionista” ni tampoco antivacunas. Soy una persona que decidió no inyectarse un producto que es de inoculación voluntaria y que, aún, está en fase de experimentación. Un producto del que se desconocían los efectos adversos que provocaba a corto, medio y largo plazo. El motivo inicial por el que decidí no inyectarme esta sustancia fue la prudencia. Tengo dos enfermedades crónicas y nadie me aseguraba que, la inoculación de este producto, no pudiera agravar mi sintomatología. Ahora, con la información que tengo, sé que mi decisión fue la correcta y no recomiendo a nadie que se ponga esta “vacuna”.
He perdido amistades y he visto vulnerados mis derechos fundamentales. Sufro, cada día, presión psicológica por parte de los medios de comunicación oficiales. He oído declaraciones y he leído artículos que se pueden calificar como delitos de odio hacia las personas no inoculadas. Me han tratado de egoísta… Y todo, por haber tomado una decisión totalmente lícita.
Yo os pregunto, a vosotros, personas que os habéis “vacunado”: ¿Cuándo lo hicisteis, pensasteis primero en la salud de la sociedad o en la vuestra propia? ¿Os “vacunasteis” para no enfermar o lo hicisteis para que no enfermase vuestro vecino? Ahora me diréis, claro, que por ambos motivos pero, ¿cuál fue la razón principal? ¿Qué habríais hecho si os hubiesen dicho que, la supuesta “vacuna”, no os protegería de tener la enfermedad ni de contagiarla y que, incluso, os podría ser perjudicial? Creo que vosotros, igual que yo, mirasteis primero por vuestra salud. Entonces, si esto es ser egoísta… todos lo somos.
Desde hace más de medio año me dedico a compartir la información que me llega de médicos, periodistas, abogados… Personas que nos avisan del peligro de estas “vacunas”, de la vulneración de derechos fundamentales que estamos sufriendo, de la inconstitucionalidad de algunas de las medidas que se están tomando, de la utilización del miedo y de la culpa para hacer daño… No pretendo convencer a nadie de nada. Sólo comparto la información que tengo para que, cada uno, saque sus propias conclusiones.
Si un médico os dijera que os han de operar, ¿verdad que consultaríais con otro profesional antes de hacerlo? ¿Por qué, pues, en el caso del covid, dais por válidas e inamovibles determinadas opiniones y, en cambio, os negáis a escuchar otras? Existen profesionales de todos los ámbitos que cuestionan la versión oficial y lo hacen con argumentos bien fundamentados. ¿Creéis que, estas personas, pondrían en peligro su trabajo y se jugarían su prestigio si no estuvieran seguras de la que dicen? Yo misma y, como yo, muchas personas anónimas, ¿Por qué nos empeñamos en no inyectarnos esta sustancia? Nuestra vida sería mucho más fácil si lo hiciéramos. Os lo aseguro. No sufriríamos por miedo a perder nuestro trabajo ni a que señalasen a nuestros hijos en el colegio. Podríamos entrar en la residencias de personas mayores para visitar a nuestros familiares. Iríamos a bares y restaurantes, a locales de ocio nocturno y al gimnasio. Podríamos viajar al extranjero y conservaríamos nuestras amistades…
Creo que todo el mundo tendría que ser libre, también las personas que no nos hemos “vacunado”, de hacer aquello que nos aporte seguridad y tranquilidad. Como he dicho antes, no pretendo convencer a nadie de nada. Pero sí querría haceros reflexionar sobre lo que está pasando.
A veces, me siento cansada, triste y desanimada. Pero ahora, más que nunca, sé que hago lo correcto y que estoy en el lugar que me corresponde. Nunca deberíamos permitir que el miedo escriba nuestra historia. Estamos aquí para ser los autores y los protagonistas de ésta pero, a menudo, no actuamos en consecuencia y dejamos nuestra vida en manos de otros.
No les hagáis el trabajo sucio. Ellos no estarán si, algún día, les necesitáis. En cambio, vuestro vecino, aquel que no lleva mascarilla por la calle ni se ha “vacunado”, aquel… sí que estará.
A mi me encanta… Siento que vamos en el buen camino. Esa desesperación de algunos que llegan al insulto y al no ser capaces de nada más que de tratar de imponer, es puro oro para los que lo aguantamos con argumentos y la cabeza alta. Vas a salir bastante más fuerte mentalmente de esto. A mi particularmente, como ya había tenido otras muy malas situaciones con las injusticias continuas de este país y de esta Europa, esta situación me pilla entrenado y me da hasta risa, cada vez que insultan a Miguel Bosé, le compro otro disco.
Muchas gracias por tus palabras!!!! Sí, seguro, que vamos por buen camino y, cuanto más aprieten, más gente se dará cuenta de lo que está pasando. Seguimos!!!!…
Gracias por tus palabras!!!! Sí, seguro, que vamos por el buen camino. Cuanto más aprieten más gente se dará cuenta de lo que está pasando. Seguimos!!!!
Bienvenida a mi mundo: el bulling de la administracion lo empece a sufrir en 2016 cuando un grupo de gobernantes decidieron inicar a guerra a los que tenemos vehiculos. Empezaron con los que tenemos vehiculos antiguos, aparte de prohibirnos circular con ellos iniciaron una campaña de culpabilizacion feroz: fuera donde fuera veia la campaña ahi, señalandome como culpable del asma de los niños, de no se cuantas muertes, etc, etc: bulling institucional en toda regla. Ahora me ha tocado como tu bien describes, sufrir el buling nuevamente por decidir que me meto en el cuerpo o dejo de meterme…bievenida a la realidad: la administracion es nuestra propia maltratadora.
Gracias por tus palabras, Mónica!!!! Suerte que vivimos en un País democrático…
yo tampoco me he vacunado y me cuesta decirlo por ahí. creo que somos muchos pero andamos «emboscados» como decía aquel.
y es reconfortante leer artículos como éste. pocos periodistas hay que se atrevan a disentir. menos todavía, periódicos que les publiquen sus artículos. pero cuando sale uno, como en este caso, es maravilloso. ya véis, con qué poco nos conformamos.
si te sirve para sobrellevarlo, ma. àngels, tienes la solidaridad y el cariño de mucha gente. si algún dia se acaba todo esto y podemos volver a respirar aire limpio, si nos dejan, tendremos que hacer monumentos a quienes lo han pasado peor en estas horas oscuras.
Muchas gracias, Pasqual!!!! Cada vez seremos más. Yo tampoco voy contando que no estoy «vacunada». Fuí sincera con unas «amigas» y me dejaron de lado. Pero, siempre, intento ver la parte positiva de la cosas. Ahora estoy conociendo a personas maravillosas!!!! A seguir!!!! Ya falta menos…
Excelente artículo que retrata con precisión cómo nos sentimos cientos de miles de personas. Nos ayuda a saber que no estamos solos.
Muchas gracias, Fernando!!!! Cada vez seremos más!!!!
Gracias MÀngels. Una carta llena de coraje, valentía y, sobretodo, para darnos un trocito de esperanza mientras atravesamos este oscuro túnel del que poco a poco empezaremos a ver un pequeño rayo de gran luz.
Somos muchos los que estamos unidos a un nivel de conciencia y aquí brilla la esperanza….
Espero y deseo que la verdad aflorará por encima de todo.
Gracias de nuevo por tanta luz en medio de esta oscuridad.
Muchas gracias por trasmitir con tus palabras el sentir de muchos de nosotros. Un abrazo y siéntete acompañada, fuerza y ánimo para todos
Gracias por tu comentario!!!! Estamos juntos en ésto. Un fuerte abrazo!!!!
Gracias por tus palabras, Marta!!!! Estamos en el principio del final. Somos la luz que ilumina el túnel.
Gracias M.Àngels, todos unidos en este camino tan oscuro para empezar a ver un rayo de luz y de esperanza.
La verdad siempre aflora porque ante todo es amor.
Escrito excelente con un reflejo claro, directo y con una gran sensibilidad y respeto.
Gracias de nuevo!
Solo escribo para decirte que soy uno más, junto a otras personas que estamos aguantando. Animo
Amor y respeto
Muchas gracias, Martín!!!! Somos muchos y, cada vez, seremos más!!!! Un abrazo!!!!
Gracias por dar voz a millones que pensamos como usted. Millones, la mayoría aún callando y esperando. ¿A qué? A que los demás solucionen ese problema, que también es de ellos y lo saben. Pero callan. Y nosotros aguantando y llevándonos los palos y soportando crisis de ansiedad. Así son las cosas. No lo hemos elegido, la verdad nos ha elegido a nosotros.
Muchos ánimos!!!! Poco a poco, se irá desmoronando todo.
Gracias por tus palabras!!!! Sí, seguro, que vamos por el buen camino. Cuanto más aprieten más gente se dará cuenta de lo que está pasando. Seguimos!!!!
Muchas gracias, me siento totalmente identificada con cada uno mandé tus palabras.
Gracias por compartir mis palabras!!!! Me alegro que te haya gustado mi escrito!!!!
Muchas gracias por trasmitir con tus palabras el sentir de muchos de nosotros. Un abrazo y siéntete acompañada, fuerza y ánimo para todos💪💪
Pues yo tampoco me he vacunado. Y no soy un anti vacunas, aunque me los están provocando… Es lo que tiene investigar. Tengo las típicas y la del tétanos varias veces. (Lo del Timerosal es muy fuerte).
He pasado el Covid, he estado en el hospital, y he salido y mi mujer estuvo en la UCI con respirador.
No me voy a vacunar, y creo que es una tomadura de pelo. Es ilegal lo que están haciendo, y si no fuera por los efectos secundarios de las vacunas, los suicidios y las depresiones, las familias rotas y los compañeros y amigos que ya no se hablan, sería de chiste.
Creo que a la mayoría les han tomado el pelo, y algunos van ya a la tercera porno decir, me tomaron el pelo. Cada vez con más achaques y consecuencias de cada pinchazo.
Pero sí, este artículo sirve para que millones de personas, comprendan cómo están haciendo sentirse a otros millones de personas. Somos un pueblo, no dos bandos, el problema no son los vecinos, si no los gobernantes que se saltan la ley o la aplican incorrectamente.
A mi no me importa no poder ir al teatro o al cine o al bar, ellos se lo pierden, pero el país, que es de todos se está yendo al garete por estas medidas estúpidas.
Ojo que ahora nos tocará lidiar con las consecuencias de los pinchazos, no solo son muerte súbitas e ictus, hay cosas peores.
Mucho ánimo Mariángeles.
Me siento totalmente identificado con lo que has escrito, a mi me ha sucedido lo mismo.
Creo que hay que resistir hasta el final y el tiempo pondrá a cada uno en su sitio.
¡Simplemente, gracias, cada vez somos más, mucho ánimo, sin duda estamos en el camino correcto!
Somos cada vez más los resistentes. Y me encanta ver que ello fastidia a las elites. Gracias, valiente.
Genial artículo , como siempre últimamente este periódico dando voz a opiniones censuradas en el resto de medios. ¿¿ Pero que época estamos viviendo ?? Es Histórico! Censura pura y dura, coacciones, amenazas, señalamientos .. y mucha gente aplaudiéndolo. Ahora se comprenden muchas cosas que pasaron años atrás…
Por suerte también hay mucha gente neutral, y otros muchos despertando y quitándose la venda de los ojos. Hemos de aguantar, tarde o temprano seremos los héroes de todo esto. Nosotros y los muchos expertos: médicos, enfermeros, virólogos, abogados y gente de a pie que van en contra de la verdad «oficial» y esperemos que gobiernos y periodistas de pacotilla reciban su merecido perdiendo su ahora » estimada credibilidad».
Enhorabuena por el artículo y por la posición que has elegido en estas circunstancias tan difíciles.
Con esta «pandemia» se está viendo la catadura moral de mucha gente, de cualquier ideología, de cualquier rango social, vacunado o no. Y esto es el reflejo de la quiebra moral e ideológico cultural de occidente. Y todo esto que está pasando, parece ser, ojalá sea una equivocación, el inicio de un plan de mayor envergadura. Así que, si es así, no sé dónde meterme, porque estamos perdiendo a muchas personas y cosas.
Muchas gracias, y ánimo a todos.
Gracias. Tus palanras son tambièn mi voz. Tengo problemas de nacimiento. Y operada ya tres veces durante esta distopìa. He petdido amigos, he sigo echada de un bar del que era clienta hace años, he estado a punto de asfixiarme en el autobùs por la nascarilla, he sigo presionada por personal sanitario, he intentado abrir los ojos de mis seres queridos…y solo he conseguido amenazas de no volver a ver a mis nietos. Està siendo muy angustioso y duro. Pero lo màs duro de todo ha sido cuando han vacunado a mi nieta de 6 años y la quieren volver a vacunar…me siento impotente . Sòlo me alivia leer artìculos como el tuyo . Ir a concentraciones de personas que ven y sienten lo mismo, y ver que cada dìa somos màs. Gracias por estar despiertos.
Muchísimas gracias a todos por vuestros comentarios!!!! Contenta de que os haya gustado mi escrito!!!! Estamos juntos en ésto y, cada uno, aporta su pequeño granito de arena. Ánimos y adelante!!!
Muchas gracias por el articulo. Estos tiempos que vivimos aunque no lo parezca tienen su lado positivo. A muchos se le ha caído la mascara. Ahora sabemos de que material humano están hechos los «demócratas»que toman las decisiones. Yo tampoco me he vacunado ni me vacunaré. Un abrazo de corazón a todos por vuestra resistencia y muy especialmente a Mª Angeles por su valentía y dar la cara.
Muchas gracias por tus palabras. Pensamos que estamos solxs, pero me doy cuenta de que cada vez menos y es un alivio. Un día, mientras comía en mi centro de trabajo- una universidad – oí decir a los profesores de la mesa de al lado que a los no vacunadxs deberían meterles – meternos en tiendas de campaña fuera de las ciudades… Nunca había sentido la segregación tan fuertemente y pensé que era un ejercicio de empatía para con los otros de la sociedad. Ahora siento aunque sea un poco y en la aún comodidad de una casa cómo se sienten los que siempre son ninguneados y excluidos. Que nos haga al menos reflexionar que siempre podemos ser el otro y que ojalá nunca haya personas que tengan que sentirse así.
gracias por esas palabras tam maravillosas uff se me saltaron las lagrima, con gente como tu merece la pena esta lucha y la ganaremos un saludo y un abrazo