viernes, 26abril, 2024
18.1 C
Seville

“El momento en que se jodió Venezuela parece infinito, sigue sin terminar”

El escritor venezolano Alberto Barrera Tyszka presenta en ‘Mujeres que matan’ la brutalidad reinante en una ciudad claramente identificable donde el hambre y la violencia lo invaden todo

- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

El escritor, poeta, guionista y articulista venezolano Alberto Barrera Tyszka (Caracas, 1960) ha ambientado su nueva novela en una ciudad asolada por el hambre y la violencia que bien podría ser la propia capital venezolana. Allí, un grupo de mujeres desesperadas recurre a un inusual club de lectura como única válvula de escape. A ritmo de thriller, Barrera Tyszka pone en manos de de una periodista que investiga la tendencia al alza de los suicidios entre la población femenina el peso de una historia trepidante y absorbente.

“Apenas ahora se está haciendo visible que llevamos décadas viviendo bajo una normalizada violencia masculina”

 

Una sociedad distópica, un Alto Mando que remite al Gran Hermano orwelliano, un club de lectura compuesto por mujeres… ¿Hacia dónde quiere llevar al lector con su nueva novela?

Creo que la novela quiere invitar al lector a hundirse en un lugar donde reina la impunidad y donde un grupo de mujeres, de pronto, empieza a pensar que el asesinato podría ser una forma de justicia, que matar no es tan riesgoso, ni tan malo, que el asesinato no da resaca.

 

¿Son las mujeres en estas sociedades de perfil autoritario el elemento más débil y vulnerable de la cadena?

No sé si son “las más” afectadas. Se suele promover con frecuencia la asociación entre lo femenino y la debilidad y, probablemente, eso también le reste complejidad al tema. Lo cierto es que estamos asistiendo a un cambio cultural, simbólico, importante. Yo siento que apenas ahora se está haciendo potentemente visible, evidente, que llevamos décadas viviendo bajo una normalizada violencia masculina.

 

Se valora especialmente de su literatura su sensibilidad especial con el universo femenino. ¿Cómo lo logra?

No sé si lo logro. A veces no estoy tan seguro. Pero es parte del desafío y de la tarea de todos los escritores: tratar de meterse en la piel de sus personajes, tratar de sentir y de inventar un lenguaje desde los otros.

“Venezuela se ha convertido en un territorio irracional donde hay dos presidentes y un ejército que controla casi todo y tiene permiso para asesinar”

 

¿Qué parte del guionista y poeta que es Alberto Barrera Tyszka podemos encontrarlo también en su novela?

¡Eso también quisiera saberlo yo! Yo tengo claridad con respecto a los distintos géneros y formatos en los que escribo, algunos con intenciones y naturalezas absolutamente distintas. Pero finalmente, sigo siendo uno solo, sentado en una única silla, frente a una única pantalla. En algún punto, se tocan y se mezclan esos diferentes tipos de escritura.

 

Todo en Mujeres que matan parece tener un lado oscuro, oculto, incluso el a priori edificante club de lectura. ¿Por qué?

Porque si no no hay literatura. Ni tampoco vida. Porque todos estamos hechos un poco así, con lados oscuros, ocultos, incluso con verdades o valores, establecidos a priori, que de repente, de forma inesperada, se derrumban.

 

Vive en México desde hace ya años. ¿Cómo ve desde la distancia el discurrir sociopolítico de los últimos tiempos de su país?

Dolorosamente, Venezuela se ha convertido en un territorio irracional donde hay dos presidentes y un ejército que controla casi todo y tiene permiso para asesinar. Donde la gasolina es gratis y la gente se muere por desnutrición o por falta de medicinas. Donde la destrucción voraz de una crisis económica convive con el lento estancamiento de una crisis política…

“Maduro no tiene una historia personal interesante. No tiene ni siquiera una anécdota conmovedora, un gran evento épico”

 

Usted escribió una biografía de referencia del fallecido ex presidente Hugo Chávez. ¿Merece Nicolás Maduro otra obra de ese nivel?

No lo creo. Maduro no tiene una historia personal interesante. No tiene ni siquiera una anécdota conmovedora, un gran evento épico… ¿Alguien acaso recuerda alguna idea de Nicolás Maduro? Algo que haya pensado él, que sea genuinamente una ocurrencia valiosa suya. No. No tiene tampoco una obra. Maduro siempre ha sido un funcionario al servicio de otros. Un instrumento. Y los instrumentos son más eficaces cuanto menos vida propia tienen.

 

Y la pregunta de rigor: ¿en qué momento se jodió Venezuela?

Sería ideal poder establecer ese instante preciso. Pero por desgracia la historia no es así de mágica. Lamentablemente, Venezuela se sigue jodiendo ahora, hoy mismo. Somos un Estado petrolero quebrado, una sociedad que vive aun bajo las claves del populismo, un país dominado por una casta militar… El momento en que se jodió Venezuela parece infinito, sigue sin terminar.

 

¿Tiene solución o será un país zombi durante mucho tiempo?

Yo necesito creer que tenemos solución. No puedo vivir sin esa esperanza. Pero, si la hay, será una solución larga y difícil. No se puede dejar de ser zombi de la noche a la mañana.

 

¿Qué debe hacer Estados Unidos respecto a Venezuela, o dejar de hacer?

El tema de Estados Unidos es complicado, entre otras cosas por la presencia de un personaje polémico e irritante como Donald Trump. En este sentido, yo creo que la posición del resto de la comunidad internacional es muy importante. Porque pluraliza el cuestionamiento a la dictadura, evita que el tema se pierda en la narrativa del chavismo, y continúa ejerciendo la única presión frente a la que reacciona el régimen de Maduro.

 

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído