El Grupo Parlamentario Socialista ha registrado en el Congreso de los Diputados una Proposición no de Ley que insta al Gobierno a promover, en el seno de la Unión Europea, la aplicación de la perspectiva de género en todas aquellas políticas que afecten a las personas refugiadas tras la invasión de Ucrania, con el objetivo de proteger a todas aquellas mujeres que huyen de la guerra.
Además, las y los socialistas inciden en reforzar el trabajo que está llevando a cabo la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), canalizando la ayuda a la ciudadanía ucraniana a través de los Organismos Internacionales y de las ONG humanitarias que trabajan en la zona.
Todo ello, teniendo en cuenta la situación de riesgo que sufren las mujeres en la zona de conflicto, en coherencia con la acción exterior y la cooperación española, que tiene entre sus principios rectores la igualdad.
PROTEGER A LAS MUJERES REFUGIADAS DE LA TRATA
La iniciativa registrada también insiste en desarrollar medidas concretas para evitar que las mafias de la prostitución y las redes de trata capten a las mujeres que huyen de la guerra, prestando especial atención a la vigilancia en las fronteras de Ucrania y en los países limítrofes.
Asimismo, ayer el Congreso dio luz verde a la tramitación de una Proposición de Ley socialista para proteger a las víctimas de trata con fines de explotación sexual en el contexto de la guerra en Ucrania. Una iniciativa que contempla una modificación penal temporal para agravar las penas por delitos de trata de mujeres refugiadas con motivo de la invasión del territorio ucraniano.
Una norma que viene a reforzar el conjunto de medidas preventivas que ha desplegado el Gobierno de España con motivo de la invasión.
TRABAJANDO POR ABOLIR LA PROSTITUCIÓN
La diputada por Barcelona y portavoz del Pacto de Estado contra la Violencia de Género del Grupo Parlamentario Socialista, Lídia Guinart, ha explicado que “las y los socialistas queremos abolir la prostitución y desde el legislativo estamos trabajando para conseguirlo”.
“La situación que padecen las mujeres ucranianas, sobre cuya vulnerabilidad se ciernen las garras de las mafias de prostitución y las redes de trata, es un ejemplo de lo que ocurre con la mercantilización del cuerpo de las mujeres y el falso mito de la libre elección. Sin prostitución, sin demanda, no hay trata”, ha concluido.
