sábado, 27abril, 2024
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El fracaso de la Conferencia de Glasgow o COP 26

José Amestoy Alonso
José Amestoy Alonso
Escritor y profesor licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Zaragoza. Sus líneas de investigación son Climatología, Medio Ambiente y Tercer Mundo.
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análisis

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Seguramente para «algunos» la COP 26 habrá sido un éxito descomunal, pero para la mayoría que creemos que el Cambio Climático y el Calentamiento Global hay que abordarlo con valentía ¡Ya! y hay que cambiar las energías fósiles por fuentes alternativas de energía limpias, ha sido un ROTUNDO FRACASO como fueron en su día las anteriores Conferencias sobre el Cambio Climático.

Hay tres hechos que que no se nos puede pasar por alto:

Las grandes potencias que más contaminan con Gases Efecto Invernadero han sido, como siempre, las que más inconvenientes han puesto a la hora de tomar soluciones y han impuesto su voluntad negativa, disfrazada de consenso; la lucha por abordar el problema del carbón supone que se deja a la buena voluntad de los países su supresión, lo que implica que seguimos como estábamos o peor, ya que se emite más Dióxido de Carbono cada día comparado con los niveles preindustriales de CO2, y con los niveles de 2010.

Si a esto añadimos que la quema de combustibles fósiles se ha incrementado y que ha aumentado el Metano en la Atmósfera (hecho curioso es que se eche la culpa de su incremento al consumo de carne y que por ello hay que eliminar de la dieta alimenticia la carne, cuando sabemos que las proteínas son necesarias para el organismo humano y con ello eliminar muchas cabezas de ganado).

SIEMPRE ha habido ganadería en el mundo y nadie decía nada. Y si es verdad que el metano lo generan los animales, entre otros, por qué no se ha hablado de las MACROGRANJAS que además de generar metano contaminan el Medio Rural y a sus habitantes con los excrementos fecales y purines?. Pero llegar a acuerdos sobre esto no es rentable, pierden dinero las multinacionales del sector.

Es verdad que se ha incrementado la emisión de metano a la Atmósfera, por la agricultura, ganadería, quema de biomasa, basura, pero poco o nada se habla de las «chimeneas de Metano del Ártico» por las que salen miles de toneladas de metano siendo mucho más contaminante que el CO2, pero a qué se debe que existan esas » chimeneas de metano»? La respuesta es sencilla, pero se oculta?, es debido a la cada vez mayor desaparición del «permafrost«, es decir, suelo completamente helado que ha dejado de serlo por el calentamiento global y porque en la zona ártica las temperaturas han subido 4°C, y debajo del permafrost existen cantidades ingentes de metano, y otros gases efecto invernadero.

En tercer lugar, no olvidemos que vivimos en un mundo dominado por los lobbys, las multinacionales, los oligopolios, por el CAPITALISMO RABIOSO que solo busca el » beneficio» de unos pocos y no le importa para nada ni los ciudadanos ni las consecuencias del CAMBIO CLIMÁTICO en el Medio Ambiente ni en la sociedad.

«No es un secreto que la COP 26 es un fracaso”. La activista sueca Greta Thunberg se ha mostrado así de rotunda en la primera protesta masiva contra la cumbre climática, casi una semana después de que comenzara la cumbre en la ciudad escocesa de Glasgow. “¿Cuánto llevará a los políticos despertar? La cumbre del clima se ha convertido en un festival de dos semanas para lavar su conciencia, donde todo sigue igual y todo es bla, bla, bla”, dijo ante los miles de manifestantes que esperaban su discurso en George Square. “Las voces de las futuras generaciones están siendo ignoradas con sus falsas promesas”, añadió la activista.

La financiación a los países más vulnerables y pobres no ha quedado claro y además a largo plazo.

En este sentido, según Gemma Durán, Profesora de Estructura Económica de la Universidad Autónoma de Madrid, «la cuestión de la financiación responde a la petición de los países más pobres y vulnerables y, por regla general, con emisiones más bajas, de ser compensados por los países más ricos en términos de financiación climática. Compromiso que no se ha cumplido en los términos que se establecieron en el año 2009, cuyo objetivo era movilizar una financiación anual de 100 mil millones de dólares para 2020 en acciones de mitigación.

Esta cuestión ha sido incluida en el Pacto Climático de Glasgow. Este exhorta( que largo me lo fiáis) a los países a adoptar una acción climática más ambiciosa para el año 2022 y, además, incluye el compromiso(?) de alcanzar mayores niveles de financiación climática a partir de 2025, así como financiamiento para pérdidas y daños.

El plan de financiación a largo plazo, que se mantiene en discusión hasta 2027, y la lista de contribuyentes a este objetivo son algunas de las muchas cuestiones que han quedado en el aire sobre la financiación a los países más vulnerables, poniendo en tela de juicio el cumplimiento de este compromiso».

Según las estimaciones del Banco Mundial, «en los próximos diez años, los efectos del cambio climático en las naciones más vulnerables podrían llevar a 130 millones de personas a la pobreza. Y para el año 2050, 200 millones de personas pueden verse obligadas a migrar dentro de sus propios países».

La COP 26 es una cumbre llena de promesas y obligaciones pospuestas.

De acuerdo con el independiente.com, «la ciencia y la sociedad civil pedía ambición y los estados han dejado

promesas, unas más ambiciosas y otras menos. Falta ver si las promesas bastan para contener la subida de las temperaturas de la Tierra en 1.5ºC».

Indica además que, «como en otras ediciones de la conferencia de partes el documento final que suscriben todos los países en una batalla por las palabras y por su dureza e intensidad. Pues no es lo mismo «instar» a los países a reforzar sus objetivos de emisiones para 2030, que “pedir”, que “obligar”.

Estás y otras afirmaciones similares nos hacen pensar en un FRACASO, no se ha conseguido unas conclusiones que, de verdad, luchen contra el Cambio Climático, sino una especie de paseo triunfal de los países industrializados que han ido a Glasgow más a lucir sus «buenas intenciones», que unas conclusiones reales contra el Calentamiento Global.

Así, no vamos a ninguna parte, sino a la paulatina destrucción del clima terrestre, de los ecosistemas, y los señoritos, como los señoritos andaluces, de la política tan ufanos y dos semanitas de vacaciones luciendo el tipo, y a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga.

Que bien viven algunos.

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