El número de estudiantes universitarios españoles ha experimentado un crecimiento exponencial durante las últimas décadas. Son muchas las personas que han optado por mejorar su situación laboral y como consecuencia, muchas de ellas han optado por comenzar con nuevos estudios superiores. En la actualidad, la mayoría de los institutos y universidades en España son públicas, pudiendo ser accesibles para todos los ciudadanos. Dependiendo de la comunidad autónoma en la que nos encontremos, los precios de las matrículas pueden variar.
Después de la última reforma educativa, los estudiantes universitarios además de finalizar sus estudios, deberán obtener el certificado de idiomas B1 y un máster para poder ejercer su profesión, como es el caso del grado en psicología. En algunos casos y si se cumple con los requisitos exigidos por la legislación vigente, se puede optar a una beca durante la formación reglada; pero en los másteres posteriores, el pago recaerá de forma íntegra sobre el estudiante. Los precios pueden oscilar entre los 2.500€ y los 6.000€. Si sumamos todos los importes, la cuantía total podría superar los 7.000€.
No todos los estudiantes ni sus familias se pueden hacer cargo de estas sumas de dinero y por eso eligen a una ayuda extra: los préstamos. Estos productos financieros permiten pagar mes a mes una cantidad fija de dinero, lo que puede hacer que los solicitantes lleguen a final de mes sin dificultades económicas.
Consejos para elegir un buen préstamo online
Los estudiantes pueden encontrar a su alcance diferentes opciones en internet para comparar y elegir el préstamo que mejor se adapta a sus necesidades. Una de las páginas que puede ayudarles durante este proceso es LoanScouter, gracias a su experiencia en este sector.
Independientemente de la opción que elijan, prestamista online o entidad financiera tradicional, deben tener en cuenta ciertos factores esenciales para evitar sorpresas desagradables en el futuro. Es muy importante calcular bien el importe que van a necesitar y no solicitar más de lo estimado, ya que ese capital deberá ser devuelto con sus intereses y comisiones correspondientes. Lo que se traducirá en una suma total adeudada superior a la que se solicitó en un primer momento; por eso, es recomendable ajustar al máximo la cantidad de dinero a solicitar. También es necesario comparar los diferentes préstamos personales que se ofrecen y valorar la TAE (Tasa Anual Equivalente) para así, optar por la opción que menos encarezca el préstamo.
Otro aspecto a valorar son los pagos en las fechas estimadas. Se deberá evitar el retraso en los abonos, ya que esto supondrá una posible penalización económica e incluso, si la situación se repite en los meses posteriores, el prestatario podría aparecer en un fichero de morosos como Asnef.
Ventajas de los préstamos para estudiar
Aparte de la información previa, también hay que considerar los requisitos para obtener una titulación universitaria o para acceder al mundo laboral. Por lo que las ventajas que nos aportan los préstamos son muy variadas:
- Facilitan la totalidad del capital necesario en pocos días. Para los asalariados, trabajadores del gobierno o pensionistas sus posibilidades son mucho mayores.
- La devolución de las cuotas se realizará de forma mensual y con el importe elegido por el cliente. Se adaptan en función a tu capacidad económica, para así poder hacer frente al pago.
- Algunos prestamistas ofrecen la opción de realizar el pago de una sola vez cuando se haya reunido el valor del importe adeudado.
- Se puede contratar un seguro para garantizar la devolución del crédito en caso de accidente o defunción del titular del préstamo.
- Siempre se puede saber en tiempo real el estado financiero y las deudas vigentes del prestatario.
- Permiten afrontar diferentes gastos de una sola vez.
- Crean un historial financiero en la entidad financiera para solicitar préstamos en el futuro; como pedir una hipoteca para la adquisición de una vivienda nueva.
