La actual líder de la formación morada, Ione Belarra, ha afirmado en la mañana de hoy que desde Unidas Podemos apuestan por la creación de un «frente amplio» progresista liderado por la actual vicepresidenta del Gobierno y ministra de Empleo, Yolanda Díaz.
Con esta propuesta, la izquierda pretende generar unidad en un espacio que ha sufrido grandes rupturas durante la última década. Y para ello, apuestan por liderarlo desde un perfil como el de Díaz, teniendo como objetivo que el PSOE pase a un segundo plano y contando con otras formaciones y colectivos progresistas.
Su apuesta ha sido presentada en el acto de clausura de la Universidad de Otoño que cada año celebra la formación morada. Esta vez, ha tenido lugar en el Auditorio Pilar Bardem, en la localidad madrileña de Rivas.
En el análisis de Belarra se ubica a Podemos como el artífice de la «segunda transición», asegurando que los avances que se están produciendo por parte del Gobierno de coalición han sido gracias al empuje y compromiso de la formación morada con los principios progresistas.
Desde la formación creen que España debe dirigirse hacia un horizonte republicano y plurinacional.
Unas declaraciones que, sin duda, tendrán repercusión en el cónclave socialista que se celebrará el próximo fin de semana en Valencia.
Si España puede continuar existiendo como entidad política será siendo política y administrativamente federal para así asentarse en la pluralidad de las naciones y pueblos que la conforman. Si no más pronto que tarde, desaparecerá; Madrid no puede continuar siendo la capital del Estado, ya que eso conlleva la desaparición de España como Estado.
Moine, España es una «democracia plena», uno de los países más descentralizados del mundo y su modelo autonómico es de hecho federal. También es de los más respetuosos con sus lenguas minoritarias y diversidad cultural. En la Francia catalana no se puede escolarizar a los niños en catalán, en la Cataluña española la lengua de escolarización es exclusivamente el catalán.
No sé por qué os empeñáis en negar lo que es evidente.
Sobre los de la desaparición de España es difícil que suceda. Somos 40 millones los que estamos por su unión y continuidad como nación y apenas tres o cuatro millones quienes apoyan su disgregación.