La Policía Judicial ha detenido y puesto en custodia al expresidente francés Nicolas Sarkozy, en el marco de una investigación que plantea que pudo haber financiado ilegalmente su campaña electoral del año 2007. Se sospecha que Sarkozy pudo haber recibido haber recibido financiación desde Libia, que en aquel año era un régimen dictatorial. El exmandatario permanece bajo custodia policial en la localidad de Nanterre, al noroeste de París.
Es la primera ocasión en la que Sarkozy tendrá que declarar, a pesar de tratarse de una investigación que se abrió en marzo de 2013. El expresidente francés podrá ser retenido por la Policía Judicial hasta 48 horas tras su arresto antes de pasar a disposición de un juez.
Las primeras informaciones de una posible financiación ilegal por parte de Sarkozy surgieron en 2012, cuando el grupo mediático Mediapart afirmó que el el mandatario pudo haber recibido dinero para su campaña electoral del dictador (ahora derrocado) de Libia, el coronel Muamar Gadafi.
Algunos responsables del régimen libio así lo han confirmado, entre ellos el hijo del líder libio, Saif Al-Islam Gadafi, que en 2011 quiso que “Sarkozy devuelva el dinero que ha aceptado de Libia para financiar su campaña electoral”. En noviembre de 2016, el intermediario Ziad Takieddine aseguró en pleno proceso de elecciones primarias de Los Republicanos que había tenido que trasladar cinco millones de euros de dinero en metálico de Trípoli a París entre finales de 2006 y principios de 2007. Añadió además que entregó ese dinero a Claude Guéant para que éste se lo facilitase a Nicolas Sarkozy, que en aquel entonces era Ministro del Interior. El mandatario francés ha negado las acusaciones.
No obstante, esta decisión de los magistrados galos de poner a Sarkozy bajo custodia policial conlleva que han surgido suficientes nuevas pruebas sobre la supuesta financiación ilegal que habría recibido su campaña presidencial en 2007. Según las informaciones recabadas por ‘Le Monde’, ex dirigentes del régimen libio liderado por el coronel Gadafi habrían decidido aportar nuevas elementos que confirmarían la financiación recibida por Sarkozy en la campaña que le llevó al palacio del Elíseo.
