La Agrupación Reformista de Policías alerta del desamparo de los menores inmigrantes que viajan solos a España en busca de un futuro mejor que el que tienen en sus países y pone de manifiesto que entre 2017 y 2018 se ha incrementado la asistencia en más de un 600%.
La organización se declara sensible con la atención que se presta a menores de edad procedentes de los flujos migratorios que se asientan en diferentes comunidades autónomas debido al estado de exclusión social en la que viven en sus países de procedencia, de forma notoria en los países del Magreb. Al mismo tiempo, es vigilante de las actuaciones y protección que se brinda por ley y normas establecidas en Andalucía y en el resto del territorio nacional, a las personas que en su condición de migrantes deban ser atendidas por las Instituciones y Cargos Públicos, que deben velar por las mismas.
ARP, está observando y obteniendo información sobre un incremento de estos menores de edad no acompañados, fenómeno social denominado por las administraciones públicas, MENAS, que por ejemplo en la provincia de Sevilla, llama poderosamente la atención de que se pueda estar produciendo un desamparo institucional entre organismos competentes en materia de tutela y acogida, como son por una lado la propia Junta de Andalucía y por otro el Ministerio del Interior, responsable de las Unidades Adscritas a la Junta de Andalucía ( Policía Autonómica) y el propio Cuerpo de Policía Nacional, competentes en la recogida y auxilio de estos menores, en su labor de protección al menor.
Estos menores pasan numerosas horas en horario nocturno, sin las comodidades, manutención e higiene mínimas necesarias para cualquier persona
ARP también alerta que de forma continuada estos presuntos menores son detectados por la Policía Nacional en horario nocturno, por falta de funcionarios especialistas encargados de la identificación de estos menores y por la negativa de la superioridad a que los agentes actuantes realicen el traslado a Centros de Acogida Inmediata, se proceda en la mayoría de los casos a realizar una custodia en dependencias policiales en zonas no habilitadas para la guarda y protección de menores no acompañados. Esta circunstancia supone que dichos menores pasan numerosas horas en horario nocturno, sin las comodidades, manutención e higiene mínimas necesarias para cualquier persona, siendo en este caso de especial sensibilidad al ser menores.
La Policía Nacional, no debe ser objeto de ningún tipo de especulación política, en el trato y atención con estos menores, ni debemos aceptar ordenes internas que permitan poner en duda la respuesta por parte de los funcionarios del CPN, o de cualquier otro cuerpo policial, en cualquier incidencia que pueda dar lugar a una sobrecarga de responsabilidad profesional.
