Según apunta el diario libanés Al-Akhbar próximamente el sur de Siria, concretamente la provincia de Daraa, será el objetivo elegido por Estados Unidos para atentar contra la célula radical del Daesh, que pretende atacar las ciudades de Hit y Zizun fronterizas con Jordania.

Esta vez Estados Unidos contará con Jordania y Reino Unido como aliados en un enfrentamiento para el cual se han desplegado vehículos y equipamiento militar en la frontera, a la vez que están formando a los grupos opositores sirios en centros militares jordanos para atacar al Daesh. Todo ello, mientras militares estadounidenses y británicos se han infiltrado en Daraa para vigilar a la agrupación extremista radical, tal y como informa el periódico libanés.

De esta manera se confirman las informaciones vertidas durante los últimos días por algunos medios de comunicación que barajaban la posibilidad de que Estados Unidos, Reino Unido y Jordania pudiesen haber desplegado sus fuerzas militares en la frontera jordano-siria, aunque el informe no incluye a Israel y Arabia Saudí como dos posibles aliados más de EEUU como se especulaba. Y ante las cuales Walid al-Moalem, ministro de exteriores sirio, respondió que la propia Siria, Rusia e Irán tomarán “actuaciones comunes contra cualquier agresión que pueda tener por blanco el territorio sirio”.

Por el momento y ante los numerosos incidentes ocurridos durante las últimas semanas en Siria, a los que Rusia ha acusado directamente a Estados Unidos, han provocado el traslado de los cazas del ejército sirio a la base que los rusos tienen en Hmeimim, en la provincia siria de Latakia.

El movimiento de los aviones militares sirios se produce después “del ataque de 59 misiles crucero Tomahawk contra la base aérea de Shairat, que destruyó unos 24 aviones de combate sirios», tal y como relata la cadena CNN.

En Hmeimim la Fuerza Aérea Siria operará bajo la protección del escudo de defensa aéreo avanzado ruso S-300 y S-400 ante posibles nuevos ataques por parte del ejército estadounidense, a pesar de que Donald Trump -presidente de EEUU– pidiese al presidente ruso Vladimir Putin distanciarse del ejército sirio.

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