Es una persona extraordinariamente inquieta e interesante: Angie Gray.
Musa de la MOVIDA, sus fotos de juventud son deslumbrantes, actriz de Almodóvar, modelo, pintora y promotora de artistas y eventos colectivos; y también cineasta en los últimos tiempos.
Me manda un mensaje para decirme que van a proyectar su película WAITING FOR GALA en el GRIS.
El GRIS, en la calle San Marcos 29, es uno de los poquísimos locales de Madrid nacido durante la celebre e inolvidable MOVIDA y que ha conseguido mantener no solo del espíritu, sino también la apariencia.
Tú entras en el GRIS y es un viaje en el tiempo: vuelves a 1984.
Y no sólo por la apariencia, por las luces y la decoración, ni siquiera por los camareros, aunque al menos uno está allí desde el principio, sino porque en el GRIS sobrevive algo más: la cordialidad, la facilidad de hablar con todo el mundo.
Llegas al GRIS y en diez minutos te sucede como cuando vas a Nueva York.
En Nueva York a los diez minutos te sientes neoyorquino, en el GRIS a los diez minutos te sientes uno más de la casa, y te pones a hablar con todo el mundo, a escuchar a todo el mundo y el universo recupera ese optimismo mítico que tenía en la época de la no menos mítica MOVIDA.
Me gustó mucho ver la película de Angie Gray, el homenaje que le hace a Paul Eluard, Salvador Dalí y Gala, pero incluso me gustó más el VIAJE FANTÁSTICO fantástico en todos los sentidos, que es entrar en el GRIS y pedir una cerveza.
Recomiendo a cualquiera que visite el local de la calle San Marcos 29 en Mad Madrid y compruebe la veracidad de lo que estoy diciendo. Se sorprenderá.
Te sorprenderá.
(Mecanografía: MDFM)