Vox necesita dinero para afrontar los gastos de la próxima campaña electoral, entre ellos el mitin central de Madrid que el partido pretende convertir, como ya ocurriera hace un año, en un apoteósico acto de exaltación nacional. Si consiguen reventar el Palacio de Vistalegre o esta vez pincharán en hueso es algo que está aún por ver. Tanta cita electoral (con sus consiguientes dispendios que desangran a cualquier partido político, mucho más a un proyecto emergente) y los discretos resultados que las encuestas auguran al partido de Santiago Abascal el 10N han generado cierto clima de pesimismo en las filas ultras y han hecho saltar las alarmas en el departamento de recursos económicos. Así, Víctor González, vicesecretario del órgano encargado de obtener fuentes de financiación, se ha dirigido a los simpatizantes de Vox en el habitual tono épico (y hasta melodramático) del partido para pedirles una colaboración altruista.
En una carta a las bases colgada en la página web, la formación de Abascal hace un repaso de los “heroicos” logros del partido en los últimos dos años. “Es por ello que necesitamos una vez más tu apoyo y sé que si puedes lo harás. Cualquier aportación es importante cada uno en la medida de sus posibilidades”, asegura la misiva. Según Vox, el próximo 6 de octubre “la España Viva volverá a llenar Vistalegre, algo para lo que también necesitamos vuestro apoyo”. La dirección nacional se ha propuesto recaudar 150.000 euros y hasta el momento ha ingresado cerca de 5.000.
La carta pasa por ser una especie de relato exagerado, distorsionado y en clave bélica de la historia reciente del partido para tocar la fibra sensible y el sentimiento patriótico de sus destinatarios, siempre con la intención de que se rasquen el bolsillo y apoyen el proyecto. “Querido compañero: hoy han pasado dos años desde que se perpetró el fallido golpe de Estado, el mismo que el presidente del Partido Popular dijo que no se iba a producir. Ese domingo a media mañana, angustiado, dejé a la familia y me fui a Barcelona. Vi con mis ojos a miles de catalanes, héroes, enfrentarse con sus manos en alto a la terrible maquinaria del totalitarismo secesionista. Recuerdo saludar a cientos con nuestro presidente, Santiago. Sólo pedían una cosa: No nos dejéis solos”.
Por descontado, la petición de donaciones no deja pasar el momento de arremeter contra Mariano Rajoy, el líder de la “derechita cobarde”, a quien el partido de Santiago Abascal culpa de haber sido tibio y tolerante con el ‘procés’ independentista y de no haber tomado las medidas oportunas para cortarlo de raíz.
El jefe de recursos de Vox recuerda que el partido verde “no abandonó” a los catalanes españolistas. “Tú y yo no lo hicimos. Pusimos más empeño en la defensa de nuestros compatriotas, de nuestra patria y pasamos al ataque. Querellas, redes sociales, medios de comunicación por tierra, mar y aire. Ni un paso atrás”, asegura su carta que se está distribuyendo por las redes sociales.
Según Vox, el próximo 6 de octubre habrán pasado 365 días desde que “desbordamos el Palacio de Vistalegre en una jornada histórica que cambió el rumbo de la política española. Millones de españoles recuperaron la esperanza con un viento de aire fresco, limpio y valiente. Nueves meses desde que irrumpimos en el Parlamento de Andalucía con 12 diputados y desalojamos al régimen socialista. Cinco meses desde que Santiago Abascal lideró la entrada de los 24 de Vox en el Congreso de los Diputados. Cuatro meses desde que la España Viva logró representación en todos los rincones del país en las elecciones autonómicas y municipales”. Y añade: “Habéis hecho historia, abriendo debates proscritos y defendiendo causas que parecían perdidas, pero esto es sólo el principio”.
El encargado de la financiación del partido verde termina su arenga: “Tu ayuda es esencial. Los enemigos de España tienen importantísimos recursos económicos y mediáticos. Nosotros la voluntad, la esperanza y lo que tú y yo podamos aportar. Primero nos ignoraban, luego se reían, después nos demonizaban y ahora quieren silenciar a millones de españoles que están dispuestos a ir más allá. Plus Ultra”. Y cierra la carta, cómo no, con un “sin miedo a nada y a nadie. ¡Viva España!”.
