Ya es mío. Ya lo tengo. Todo. Todo. ¡¡TODO!!!
Y de repente TODO es NADA. El muro… ¿Qué ha pasado? No lo comprendo.
No entiendo.
No puedo creerlo. Es imposible. No lo entiendo.
La meta a unos pocos metros. Todo el trabajo estaba hecho.
Luego veré en las imágenes a mi padre doblándose sobre sí mismo, pegando un puñetazo sobre el monitor. ¡Papá, lo siento! Lo siento.
Vacío por completo. Los ojos sin brillo ni expresión. Como un fantasma.
Estaba hecho.
He perdido la pole, la carrera, el mundial, el sueño.
Pero no . Quizá no. La carrera es mañana. Si consigo levantarme…
Volver a creerlo.
El mundo entero está anonadado. Es demasiado inverosímil. ¡Estaba hecho!
Jamás lo olvidaremos, Max. Como tampoco lo olvidarás tú. Tampoco Hamilton es capaz de reaccionar, ni él ni su valedor, Toto Wolff, pueden asimilarlo y creerlo.
Verstapp…END!!!
SE ACABÓ EL MUNDIAL Y SE ACABÓ EL SUEÑO.
El mayor espectáculo del mundo: la Fórmula 1. Hombres hechos y derechos jugándose la vida.
Mañana aún puedo luchar. ¿Puedo? Padre, lo siento. No sé si puedo.
Arabia era el cielo, Arabia es el infierno.
Tercero, si no se ha roto nada que haya que cambiar, mañana salgo tercero.
No hay nada en su mirada. Estupefacción y desconcierto.
Max Verstappen. La vuelta más alucinante que la mayoría de los espectadores jamás habían visto en un circuito de Fórmula 1.
Parecía hecho.
Hasta el rabo todo es toro, no basta con esquivar los cuernos.
Verstapp…¿END?
¿O logrará mañana resucitar de nuevo?
Ninguna guerra está perdida si no estás realmente muerto.
Tigre Tigre.
