El buen uso de las redes sociales es fundamental para evitar consecuencias jurídicas. Así lo ha recomendado el Colegio de Médicos de Madrid durante la jornada formativa ‘Consecuencias jurídicas derivadas del uso de las redes sociales’. “Todo lo que digamos los médicos en las redes sociales es tenido muy en cuenta tanto por los pacientes como por nuestros compañeros”; motivo por el cual “debemos saber cuándo se puede vulnerar un derecho”, ha resaltado el Dr. Pablo Lázaro Ochaíta.
La jornada ha estado organizada por el vocal de Médicos en Ejercicio Libre, el Dr. Ochaíta y ha contado con la presencia de las abogadas María Suárez Pliego, experta en privacidad y vulneración del derecho al honor y Helena Suárez Jaqueti, experta en propiedad intelectual y redes sociales. Y en ella, se han expuesto los riesgos que provocan un mal uso de las redes sociales, especialmente en el ámbito de la Medicina.
“Los médicos no podemos mantenernos al margen del uso de las redes sociales”, ha afirmado el presidente del Colegio de Médicos de Madrid, el Dr. Miguel Ángel Sánchez Chillón, quien considera que las mismas “ofrecen muchas posibilidades para relacionarnos con otros profesionales e intercambiar información”. Aunque ha advertido que “debemos ser conscientes de los riesgos y daños que conlleva su utilización”.
En esta línea, la abogada Helena Suárez Jaqueti ha insistido en que un uso indebido de las redes sociales “puede producir ataques al prestigio profesional porque hay personas que no tienen medida a la hora de hacer afirmaciones”, pues “los contenidos que se difunden en redes sociales tienen una gran viralidad y todo lo que se diga puede afectar a derechos de terceros”, ha subrayando Suárez Jaqueti.
Por su parte, la abogada María Suárez Pliego ha que “determinados comentarios pueden atentar contra el derecho al honor”. Además, el hecho de compartir determinada información “puede incurrir en una vulneración del derecho a la intimidad y a la protección de datos de carácter personal; también se corre el riesgo de cometer un delito de injurias, calumnias o atentado a la autoridad pública”, ha explicado Suárez Pliego.
Ambas expertas han recomendado a los facultativos que “las discrepancias de opiniones entre los profesionales deben manifestarse evitando siempre el daño, las descalificaciones personales, las injurias o las alusiones a aspectos privados”, evitando así las polémicas a la hora de relacionarse con otros compañeros de profesión. Asimismo, han indicado que “los médicos deben abstenerse de criticar de manera despectiva actuaciones de sus compañeros”, porque hacerlo a través de las redes sociales supone “un agravante” que podría estar castigado “con multas o penas de prisión” en el caso de los delitos “por injurias y calumnias”. Por ello, han recordado a los profesionales que “lo que no podemos hacer en la vida real tampoco debemos hacerlo en las redes”.
Otro de los temas que se han planteado durante la jornada formativa ‘Consecuencias jurídicas derivadas del uso de las redes sociales’ ha sido el de la relación médico-paciente. Sobre este tema, Suárez Jaqueti y Suárez Pliego han comentado que la relación debe cumplir las premisas convencionales: respeto, discreción y confidencialidad. Además Suárez Jaqueti ha resaltado que, en muchos casos, esta relación se ha extendido más allá de la consulta con el uso del correo electrónico, SMS o WhatsApp, por lo que los médicos “deben tener el consentimiento expreso y por escrito del paciente”.
Finalmente, las abogadas María Suárez Pliego y Helena Suárez Jaqueti han compartido diez recomendaciones a tener en cuenta por parte de los profesionales médicos a la hora de usar las redes sociales:
– No olvidar el Código Deontológico del Colegio de Médicos cuando usemos las redes sociales.
– En las redes sociales todo se magnifica para bien o para mal y hay que evitar cualquier desliz.
– El médico debe cuidar su actitud, lenguaje, formas, imagen y conducta para favorecer la confianza del paciente también en redes sociales.
– El médico que recomiende un fármaco debe comunicar su vinculación con la compañía farmacéutica.
– No compartir en redes sociales datos o imágenes de pacientes que desvelen su identidad.
– Los comentarios en redes sociales se pueden considerar actos médicos.
– Evitar descalificaciones y/o expresiones peyorativas hacia otros médicos.
– El anuncio publicitario de los servicios médicos que ofrece un profesional debe hacerse de una manera objetiva, prudente y veraz.
– Mantener la confidencialidad de los estudios realizados hasta su publicación en revistas científicas.
– Es recomendable contar con un Protocolo de actuación.
