La ausencia de diálogo está dinamitando la relación entre los trabajadores de la Guardia Civil y el Ministerio del Interior. Y es que el equipo andaluz, con Zoido a la cabeza, continua enfadado por el escándalo del “pisito”, y así pese a haberse comprometido a entablar un dialogo efectivo con las asociaciones profesionales de la Guardia Civil, y con AUGC como referencia y colectivo mayoritario en el instituto armado, la realidad es que se niega a recibir y atender las justas demandas de los guardias civiles.

Ni él ni el secretario de Estado y Seguridad parecen receptivos a introducir cambios, ni tan siquiera a mantener unas reglas mínimas de cordialidad y buen entender que se traduzcan en entablar cauces de comunicación efectivos que proporcionen una mejor calidad de vida para los agentes de la Guardia Civil.

Desde hace años, el derecho de sindicación es una reivindicación irrenunciable para la Asociación Unificada de Guardias Civiles, y una petición puesta encima de la mesa del Ministerio del Interior. Cerrar la puerta al diálogo no solo no hará desaparecer nuestra reivindicación, sino que avivará las ansias de derechos entre las bases de la Guardia Civil.

Necesitamos cambios, en la reglamentación interna, en el modelo de interlocución, en el despliegue territorial de las unidades, en las garantías para ejercer nuestra profesión; pero lo que no necesitamos es un ministro que figure pero que no ejerza, que prometa pero que no cumpla, que anuncie dialogo pero que luego desaparezca.

En definitiva, no necesitamos lo que se conoce como un “bienqueda”, alguien que no corresponde a sus palabras con sus acciones y que tan solo dice palabras para regalar el oído, pero que luego no cumple.

Desde luego, la paciencia no es infinita, y ante la falta de avances los guardias civiles ejerceremos derechos conquistados en los tribunales que visualicen nuestro rechazo frontal a la gestión interna que se está realizando en la Guardia Civil. 

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Guardia civil destinado en la unidad de Tráfico de Tenerife, es el secretario de comunicación y portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), mayoritaria en la Guardia Civil. Ingresó por vocación y pronto se convirtió en un luchador ingénito en la defensa de los derechos de los y las guardias civiles, para conseguir el cambio hacía una Guardia Civil plenamente democrática y del siglo XXI. Actualmente desarrollando el Trabajo Fin de Grado de Sociología, por la universidad de La Laguna, en la realización de un estudio sobre la percepción de ciudadanía de los guardias civiles y su relación con la sociedad.

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