El Juzgado de lo Social 25 de Barcelona ha dictado una sentencia que contradice el criterio que hasta ahora venía imponiendo el Instituto Nacional de la Seguridad Social, sosteniendo que un bebé que haya nacido muerto en el parto, o que haya fallecido durante las 24 horas posteriores, sí debe computarse como hijo al calcular el complemento de maternidad en las pensiones.
El juez afirma en la sentencia que «no tiene sentido adoptar una perspectiva puramente mercantilista como si se estuvieran fabricando unidades productivas de seres humanos». Pone el foco en la cuestión que se plantea al admitir el cómputo para un bebé que haya sobrevivido 48 y no para uno que haya sobrevivido 24 horas o incluso haya nacido muerto.
El complemento de maternidad que se estimaba hasta ahora fijaba un porcentaje de aumento en la pensión en base al número de hijos: desde un 5% en caso de tener dos, hasta un 15% para mujeres con cuatro hijos o más.
El asunto proviene de la demanda que interpuso una mujer a la Seguridad Social, que solamente le reconocía dos hijos, sin reconocerle el tercero que murió al nacer y no había llegado a sobrevivir 24 horas. La ley establece que en este caso no adquiere personalidad jurídica.
El juez explica en su sentencia que el complemento de maternidad pretendía generar una «discriminación positiva para compensar a las mujeres por el hecho que supone la gestación, compensando sus perjuicios y equilibrando la denominada brecha salarial». Según esta sentencia la Seguridad Social debe reconocer a la demandante un complemento del 10% en lugar del 5% que pretendía fijar.
