Te duele Fernando Alonso, verle así, esforzándose tanto.
Te duele que aún no haya logrado superar a su compañero de equipo, Esteban Ocón, por muy magnífico piloto que éste sea.
Te duele que siga llevando una placa de titanio en la mandíbula y que sufriera aquel estúpido accidente
Te duele Fernando Alonso incluso si no eres uno de sus seguidores.
Sabías que era un año de transición y difícil, pero nadie había imaginado que fuese a serlo tantísimo; tanto. Y duele.
Te duele que los agoreros, y siempre los hay a mansalva, quieran darle ya por acabado. Estás seguro de que no, pero te duele ese ambiente derrotista y putrefacto.
Te duele Fernando Alonso, incluso si tú eres Fernando Alonso.
Pero al mismo tiempo es tan magnífico cómo está luchando. Cómo busca en sí mismo las claves para aguantar y hacerse más grande. Cómo no se rinde. Cómo demuestra que es un luchador y un guerrero.
Te duele Fernando Alonso; y le mandas desde estos artículos lo mejor de tu energía, tu propia y pequeña magia, todo tu apoyo.
Te duele porque es algo tuyo, porque sus éxitos son tus éxitos y sus dificultades son tus dificultades.
Te duele. Pero bajo ningún concepto ni motivo vas a abandonarlo. A Fernando Alonso. Nacido para ganar. Campeón nato.
Tigre Tigre
Bueno….se podria decir muchas cosas pero no tantas de las que se puede aprender de el. Afan de superacion, humildad, competitividad, solidario….serian 4 de tantas.
Gracias FA
A mi me duele el periodismo con el dedo en la boca que no se entera que Ocon es francés.