Tal y como publicamos en exclusiva en Diario16, un grupo de conductores de empresas de alquiler de vehículos de transporte con conductor (VTC) presentaron una querella criminal contra JTT Hiring ETT S.L., Vector Ronda Teleport Barcelona y Forever Tours S.A., por la presunta comisión de delitos contra los derechos de los trabajadores, detención ilegal y coacciones. La querella ha sido admitida a trámite.
Los conductores señalan en su querella que fueron sometidos reiteradamente a un marco coactivo por parte de mandos o encargados de las empresas denunciadas.
Por ejemplo, en caso de un paro empresarial, los conductores estaban obligados a someterse a lo que ordenase la empresa, «so pena de ver mermada su nómina, por incomparecencia al lugar de trabajo», afirma la querella.
Además, en medio de la guerra contra el sector del taxi, «se les obligó a ser parte activa del conflicto. En un paro empresarial, se ordenó a los querellantes que estacionaran el vehículo asignado en la avenida de la Diagonal de Barcelona, invadiendo ilegalmente el espacio público. Durante otro paro empresarial, también en Barcelona, en el año 2019, se les impuso que captasen firmas de usuarios en apoyo de los VTC, en pro de que no se limitasen los servicios a la ciudad de Barcelona. En el caso de estos paros patronales, la empresa obligó a los querellantes a manifestarse, asumiendo un rol de defensa de la empresa y de tenedores de las autorizaciones de VTC», afirma la querella.
En concreto, se señala el día 21 de enero de 2019 cuando la empresa, presuntamente, les exigió manifestarse en la plaza de Sant Jaume, uniformados y portando pancartas con textos reivindicativos de la empresa en diversos idiomas, impresos por mandos y empleados de la misma.
Un mes después, el 9 de febrero de 2019, uniformados y con las citadas pancartas, los querellantes fueron obligados a concurrir a un mitin de ERC, frente a las cámaras de televisión, en la Plaza de la Asamblea de Cataluña. «No tenían más remedio que obedecer estas órdenes de la empresa, pues, si no concurrían al acto, lo que se constataba mediante control de firmas, sufrirían mermas en sus ingresos».
En Barcelona, la celebración anual del Mobile World Congress es uno de los acontecimientos más importantes para la Ciudad Condal. El gran número de profesionales de todo el mundo que llegan a Barcelona para asistir a este congreso internacional provoca que los servicios de transporte sean altamente demandados. Ocurre lo mismo en Madrid en la semana de Fitur.
La querella señala que, «entre los días 24 y 28 de febrero de 2019, con ocasión del evento ‘Mobile World Congress, la empresa obligó a los querellantes a participar de forma activa en una protesta empresarial, imponiéndoles que, para vulnerar la normativa recién aprobada por la Generalitat de Catalunya estableciendo un tiempo de precontratación de 15 minutos a los VTC, formasen grupos de trabajadores infractores de la nueva regulación».
Los conductores denunciantes señalan que, incluso, la empresa impartió a algunos conductores cursos de formación en el uso de redes sociales, obligándoles a difundir publicidad positiva en favor de la empresa.
Retención ilegal
Ante la aprobación de dicha nueva regulación de la Generalitat de Catalunya, que imponía un tiempo mínimo de precontratación de 15 minutos a los VTC, se prohibió a los trabajadores discutir su situación laboral en el interior de las instalaciones de la empresa.
Para reforzar esta prohibición, la empresa, presuntamente, llegó a cerrar la puerta perimetral del centro de trabajo, reteniendo en su interior a los trabajadores e impidiéndoles toda posibilidad de libre circulación.
«Con fecha de 12 de marzo de 2020, reunidos los querellantes en instalaciones de la empresa Vector Ronda en Barcelona (sala Base), sobre las 14.45 horas, entró en la sala donde se hallaban los trabajadores el señor […] quien, visiblemente irritado, ordenó suspender de inmediato la reunión. Al poco tiempo, sobre las 15.15 horas, varios trabajadores intentaron salir del recinto, pero un coordinador de Vector Ronda les ordenó que no saliesen. Pocos momentos después, el Sr. […] procedió a cerrar con un candado la puerta de la sala, a fin de conseguir que los trabajadores no pudiesen salir de la misma. En estos momentos se hallaban en este recinto, sala Base de Vector Ronda en Barcelona, unas 400 personas encerradas», señala la querella.
Sin embargo, los hechos no terminaron ahí, puesto que, según se indica en el documento, sobre las 16.30 horas, uno de los conductores denunciantes, ante el encierro que estaba padeciendo llamó a su abogado para pedir ayuda y pidió auxilio a los Mossos d’Esquadra, quienes se personaron en el lugar de los hechos sobre las 17.30 horas.