Uno de los problemas con los que se enfrenta cualquier Ejecutivo en España en los últimos años es el la despoblación de la España vaciada. Este lunes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido la necesidad de descentralizar las instituciones comunes con sede histórica en Madrid y trasladarlas a otras ubicaciones para así fomentar una mayor cohesión territorial que para Sánchez, ayudaría a luchar contra la despoblación de la España vaciada.
No parece mala decisión ya que las instituciones en las que las transferencias únicamente afectan al Estado podrían repartirse por la geografía española y así darle movimiento y vida a territorios para los que la despoblación está resultando sangrante, sobre todo para los que intentan sobrevivir al «olvido» de los servicios públicos de los que en otro momento disfrutaron, y que hoy, por ratio de habitantes, las Administraciones autonómicas o provinciales prescinden ofrecer.
Isabel Díaz Ayuso tilda la propuesta de Sánchez de «ataque directo»
A la que no le ha gustado esta propuesta, aunque no sorprende, es a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha considerado esta declaración de intenciones del presidente del Gobierno como un «ataque directo» contra Madrid.
Para Ayuso, para la que la solidaridad no parece no ser su fuerte, la propuesta de Sánchez «es, nuevamente, un ataque frontal y directo contra Madrid y, desde luego, nosotros vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para impedirlo», dijo Ayuso a los medios tras una reunión con fondos de inversión en un restaurante del barrio neoyorquino de Manhattan, donde ayer comenzó un viaje oficial que la llevará también a Washington aunque según ha podido saber Diario16, la agenda de hoy martes de la presidenta madrileña ha sido suspendida sin que desde su gabinete de prensa expliquen el porqué de este extremo.
Madrid es España y España es Madrid, lo demás territorio ocupado, provincias; ésta es la concepción de la alucinada Ayuso. Por supuesto que esta manera de concebir el Estado llevará más pronto que tarde a la desaparición de España como entidad política. Urge trasladar la capital del Estado fuera de Madrid; cuanto más se tarde, más pronto será la desintegración de España. El gran enemigo de la continuidad de España como Estado es entender a éste como un centro de poder único, Madrid.
A mí me parece genial que Madrid sea capital de Madrid. Que toda comunidad tenga su capital. Que todas las capitales tengan poder sobre sus comunidades y haga efectivo su autogobierno, y todo el mundo en su casa y dios en la de todos. Eso no es fundentalismo ni tampoco es independentismo; es igualdad y cincuenta por ciento de la solución del abandono que algunos llaman españa vaciada.
Ésto es irrebatible, además de que supone un ahorro de miles de millones. Incluídos aquellos penosos presupuestos de la zarzuela que está claro que no precisan porque papá es rico.
Un señor que conozco llamado Pepe Díaz sabe hacer las cuentas y son asombrosas.