Cuando en el mismo sitio y a la misma hora se den cita este viernes 19 de mayo a orillas del Guadalquivir en Sevilla los dos principales contendientes, y aún compañeros de partido, se podrá pulsar in situ el verdadero calor que reciben de la militancia ambos líderes. Susana Díaz juega en casa, Pedro Sánchez acude a la capital andaluza para saber hasta qué punto el órdago en toda regla lanzado al aparato socialista en el feudo por excelencia del socialismo patrio atisba visos de prosperar a apenas 48 horas de que 180.000 afiliados socialistas elijan a su próximo secretario general mediante sistema de primarias, después de una larguísima precampaña y una intensa y alocada campaña con una sorprendente recogida de avales multitudinaria que movilizó al 70% del total de la militancia.

El único debate celebrado entre los tres candidatos de las primarias socialistas no ha servido más que para saber que el riesgo de fractura no existe en términos traumáticos, aunque sí es posible que las heridas tarden mucho en cicatrizar después de la huella dejada por el comité federal del 1 de octubre pasado, que se saldó con la dimisión del último secretario general del partido.

De este encuentro a tres bandas salió reforzada la candidatura que a priori lo tiene todo perdido pero puede finalmente declinar la balanza definitivamente hacia Díaz o Sánchez. Patxi López prometió llegar hasta el final aunque por el camino se le han ido cayendo pesos pesados de su candidatura como la presidenta balear, Francina Armengol, y pese al riesgo de que finalmente obtenga menos votos que avales presentados. No le importa en absoluto esta posibilidad a López, sabe que la misión está prácticamente cumplida, haber hecho dudar a muchos militantes sobre lo que siempre ha denostado de sus contrincantes: el presentimiento de que provocarán un choque de trenes que llevará al partido al desastre.

En este tumultuoso fin de campaña de primarias y ante las dudas, la candidatura de la baronesa andaluza pretende adscribir a su causa a todos aquellos militantes que a última hora desconfían del denominado “voto útil” del ex lehendakari. En las filas de Pedro Sánchez ya tienen claro que el primer candidato que hizo pública su carrera interna a la secretaría general ha trabajado en todo momento en paralelo al proyecto de la lideresa andaluza.

El equipo del ex secretario general confía plenamente el próximo domingo 21 en una masiva movilización de la militancia en todo el territorio nacional, y no solo en el gran granero socialista, el andaluz, pese a que desde el feudo por excelencia de Susana Díaz se decantará finalmente la balanza, amén de alguna que otra sorpresa en otros territorios clave como Cataluña, Madrid o Comunidad Valenciana.

Por todo ello, este mitin de precierre de campaña a orillas del Guadalquivir recuerda mucho a la famosa sevillana de Manuel Pareja-Obregón A la Puerta de Toledo, la historia de una infidelidad con condicionantes religiosos de por medio. “En el mismo sitio a la misma hora, a la misma hora estaba rezando con otra persona”. La infidelidad huelga decir qué paralelismo tiene en la disputa interna del PSOE. El condicionante religioso muta aquí en una fe inquebrantable en una ideología, la socialdemocracia, con dos modelos de ser entendidos completamente contrapuestos y antagónicos.

4 COMENTARIOS

  1. Susana es la candidata del PP, del Ibex, de Cebrián, de la COPE, del ABC y de los Jarrones Chinos que han encontrado acomodo y manutención en las «puertas giratorias».
    ¡¡Menudos avales para dirigir el PSOE del futuro!!
    ¡¡Pobres de nosotros si caemos en manos de esta «pájara de cuenta»!!

    ¡¡Animo Pedro, eres el único que posibilita la unión de la izquierda y un futuro gobierno progresista en este país!!

  2. Se puede inventar toda una épica en torno a Pedro Sánchez,pero la realidad es más prosaica.Es mediocre,monotemático,un bluff,el elefante que parió un ratón.Eso sí,en la cámara da de cine.
    El «FORREST GUM»español.
    Si ganara,se le acabaría el rollo del victimismo,y entonces…el abismo,el vacio.

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