El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha desafiado al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, a participar en una serie de seis debates antes de las elecciones generales que se celebrarán el próximo 23 de julio. Los debates tendrían lugar cada lunes hasta la fecha de las elecciones, comenzando el 12 de junio.
Sánchez, en una muestra de compromiso con el diálogo democrático, ha afirmado que las elecciones deberían ser una plataforma para estos debates, argumentando que «hay tiempo de sobra para que los ciudadanos se formen opinión de lo que cada uno propone».
El presidente ha anunciado que ya ha aceptado cuatro ofertas de diferentes medios de comunicación para albergar estos debates, y se muestra abierto a cualquier otro medio que quiera organizar uno. Sugiere que los debates se celebren durante programas de alta audiencia o en un espacio especialmente diseñado para ello.
Sánchez pide moderación
En cuanto a las normas de los debates, Sánchez ha pedido una moderación neutral, un equilibrio de tiempos y una normativa de respeto. Aunque las discusiones serán en su mayoría ‘cara a cara’ con Feijóo, Sánchez ha aclarado que esto no excluye la participación en otros debates con más candidatos. El presidente reconoce que el bipartidismo es algo del pasado y que hay otras fuerzas políticas nacionales que deben tener la oportunidad de expresarse.
Sánchez también propone la realización de debates sectoriales sobre economía, cambio climático, igualdad, políticas sociales y sanidad, a los que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) enviará a sus expertos en cada área.
En un ataque directo a su rival, Sánchez ha cuestionado el silencio del Partido Popular en cuanto a su líder en su eslogan electoral. «Si el PP tiene un candidato que tiene cosas tan buenas que ofrecer a los ciudadanos, ¿por qué no menciona a su propio líder en su eslogan?», preguntó Sánchez.
Además, Sánchez ha criticado el eslogan del PP «Sánchez o España», tachándolo de «peligroso, serio y grave». Según Sánchez, este mensaje parece acusar a todos los votantes del PSOE de ser antiespañoles.
El presidente del Gobierno ha subrayado que el PSOE desea lo mejor para España y ha recordado que es el único partido que lleva el nombre del país en sus siglas. Sánchez ha declarado que «en amor a España no nos ganan, podrán empatarnos pero no ganarnos».
Para la próxima campaña, Sánchez ha asegurado que su partido continuará promoviendo un mensaje positivo, resaltando las políticas que han implementado durante su legislatura y sus planes para el futuro. No obstante, Sánchez ha dejado claro que también criticarán las políticas de la derecha de manera firme y educada, y responderán a los insultos con una contundencia aún mayor.
Feijoo no se atreve. Sánchez lo sabe.