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Racismo en la Alhambra

Una mujer denuncia a una empleada del monumento nazarí por recriminarle su procedencia por ser negra pese a tener ciudadanía española

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Una mujer de raza negra, nacida en Brasil y nacionalidad española, ha denunciado a una empleada de la Alhambra, en Granada, por presunto racismo en un altercado en el que la trabajadora le llegó a recriminar a la visitante que se fuera a su país, pese a que la denunciante le hizo constar que era española, a lo que la empleada de los palacios nazaríes le insistió: “Pues vuelve al lugar de donde viniste”.

El altercado tuvo lugar el pasado 28 de mayo y la visitante, M.V.C.N, reivindicó en la denuncia presentada en la policía al día siguiente su condición de mujer negra y también dejó constancia del trato vejatorio recibido en una reclamación oficial presentada ante la Alhambra, adelanta El Independiente de Granada.

El problema surgió cuando la denunciante y un amigo, que compraron con antelación las entradas vía internet, intentaron acceder al recinto antes de la hora fijada para la visita. Mientras su amigo no tuvo ningún problema en entrar en el monumento, ella no pudo hacer lo mismo en un primer momento y la empleada denunciada por racismo le indicó que su entrada “ya había sido utilizada”.

La visitante pudo finalmente acceder al recinto aunque se sintió tan humillada que lo abandonó al instante

Una vez subsanado el error, ambos pudieron entrar en la Alhambra, pero fue en ese momento, según consta en la denuncia, cuando la empleada del reciento la acusó de “mentirosa” mientras era escuchada por otros visitantes. A continuación le espetó un “vete a tu país” que aumentó aún más el enfado de la turista.

Debido al estado de “ansiedad” de la mujer, la denuncia no la presentó en la policía hasta el día siguiente, e incluso abandonó rápidamente el recinto por la situación en la que se encontraba. La denunciante ha agradecido el apoyo tanto de la Asociación Pro Derechos Humanos (APDH) de Granada como del Defensor de la Ciudadanía de Granada, Manuel Martín.

“No sabía qué decir para frenar a aquella mujer; me quedé paralizada, fría, avergonzada por toda la gente que me miraba. Me sentí humillada, odiada, horrorizada, discriminada por una persona que no me conoce y que estaba haciendo su trabajo y yo como una visitante más”, hizo constar en la denuncia.

 

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