Putin sigue masacrando a la población civil ucraniana

Impactantes imágenes que llegan desde Jersón, la ciudad ucraniana sitiada por los rusos. Las tropas han abierto fuego contra los vecinos de la ciudad que, como cada día, han salido a protestar contra la presencia de los tanques rusos. A esta hora, medios ucranianos aseguran que una persona ha muerto y que hay varios heridos por esta ofensiva. Tanto el vídeo como el sonido que le acompaña es durísimo.

Una explosión seguida de atronadores disparos de metralleta. Así han respondido los militares rusos a los manifestantes ucranianos en esta ciudad situada al sur de Ucrania, muy próxima a la Península de Crimea. Allí se habían concentrado numerosos manifestantes, frente al ayuntamiento, para pedir a las tropas que se fueran, entre otras cosas. La respuesta fue directamente abrir fuego contra ellos.

Es en ese momento cuando el pánico se apodera de los asistentes a la protesta. Se ve a civiles desarmados, e incluso una madre con su hijo en brazos que no sabe a dónde ir para escapar del ataque. Solo dejan de correr cuando están a varias calles. Poco después, las autoridades ucranianas han denunciado la represión por parte del Ejército ruso de esta manifestación pacífica.

El vicepresidente del Consejo Regional de Jersón, Yuri Sobolevski, ha contado a través de Facebook que «los orcos», en referencia a las fuerzas rusas, se han servido de la violencia para reprimir la «manifestación pacífica» que hasta el momento estaba teniendo lugar en la plaza de la Libertad de Jersón, escenario diario de movilizaciones y protestas desde que Rusia invadiera Ucrania.

Algunas de las personas presentes durante la protesta han explicado a la agencia ucraniana de noticias Ukrinform que el Ejército ha comenzado a disolver la protesta mientras algunas personas estaban limpiando la estatua dedicada a las víctimas mortales de las protestas de 2013, así como las fotos de los algunos de los ucranianos que han muerto luchando contra la invasión rusa.

Por otra parte, al menos ocho personas murieron en un bombardeo anoche de las fuerzas rusas contra un centro comercial en el distrito de Podilski, en Kiev, informó este lunes el Centro de Comunicaciones Estratégicas y Seguridad de la Información del Ministerio de Cultura y Política de la Información de Ucrania, que se remite a las autoridades locales. La Dirección Central del Servicio de Emergencia de Ucrania en Kiev informó en un primer momento de cuatro muertos y un herido, luego ascendió a seis y sobre las 11.00 horas (hora peninsular) la cifra de muertos ha sido elevada a ocho.

Ucrania ha rechazado entregar las armas de su ejército y abandonar antes del mediodía de este lunes la ciudad de Mariúpol, tal como le ha exigido Rusia en un ultimatum enviado al Gobierno de Kiev: el Ejército ucraniano que defiende la ciudad del sureste del país tiene hasta primera hora de la mañana de este lunes para entregar las armas y ceder el control a Moscú.

La viceprimera ministra y jefa del Ministerio de Transportes y Comunicaciones de Ucrania, Iryna Vereshchuk, ha expresado en declaraciones al diario Ukrayinska Pravda que el ministerio de Defensa de la Federación Rusa envió una carta a Kiev de ocho páginas “que son un regreso a la historia y un delirio”. “Enviaron la misma carta a la ONU, al Comité Internacional de la Cruz Roja y esperaban que las organizaciones internacionales reaccionaran y comenzaran a presionar a Ucrania. Esto no sucederá. El CICR y la ONU entienden que es una manipulación de Rusia y que está tomando personas como rehenes”, ha respondido.

Asimismo, ha añadido que Ucrania no puede “hablar sobre la entrega de armas. Ya hemos informado a la parte rusa al respecto”, al señalar que se respondió a Moscú que “en lugar de pasar tiempo escribiendo 8 páginas de carta, simplemente abra el corredor” humanitario para que puedan salir los civiles.

El Ministerio de Defensa ruso, según declaraciones a la agencia rusa Tass, había dado de plazo hasta las cinco de la mañana para responder. La institución también habría asegurado que habrá una salida segura para todos aquellos que entreguen las armas.

“Entreguen sus armas”, ha ordenado el coronel general Mijaíl Mizintsey, director del Centro Nacional para la Gestión de la Defensa de Rusia. “Se ha desarrollado una terrible catástrofe humanitaria. Todos los que entreguen las armas tienen garantizada una salida segura de Mariúpol”, ha expresado.