Por la transparencia en el resultado electoral e higiene democrática

Es de todos sabido que corresponde a las mesas electorales recoger y procesar los votos emitidos en cada Colegio Electoral, confeccionar las actas (que dan fe de los resultados) y remitir los resultados a la Junta Electoral Central para su proceso de acumulación, con una aplicación informática que determina el resultado final.

No obstante, cada interventor debería poder consultar directamente, mediante un mecanismo informático, que los datos de su acta están incluidos correctamente (en relación a demarcación y votos a candidaturas) disponiendo de información sobre las actas que aún no han sido confirmadas por nadie.

No solo para los interventores, sino también para la ciudadanía en general, se debería disponer de una opción de acceso, que permita obtener el detalle de los votos emitidos por demarcación, con el fin de que cualquier persona pudiera efectuar los cálculos precisos para comprobar directamente que el resultado oficial publicado es correcto y, disponer, también, de la información de cuantas actas no han sido confirmadas por interventores acreditados.

Así, cualquier persona con derecho a voto, podría, por una parte comprobar que cualquier acta confeccionada en cualquier mesa, debidamente legalizada con la firma de los interventores y miembros de la mesa, está incluida en dicha base de datos además de una vez hecho el volcado de todas las actas, obtener el cómputo de los resultados finales que confirmen lo publicado.

La intención no es otra que garantizar que no se han cometido errores y confirmar de forma definitiva los resultados, o procediendo a una investigación o impugnación, en caso de que se detecte alguna irregularidad.

Posiblemente sería la mejor forma de hacer transparente todo el proceso.

IMPRESCINDIBLE LA MODERNIZACIÓN DE LA GESTIÓN DE LAS MESAS ELECTORALES POR AGILIDAD EN EL PROCESO Y TRANSPARENCIA EN LOS DATOS

Es de imperiosa necesidad establecer tal sistema que facilitaría así la participación de los votantes, garantizando el control de las actas electorales firmadas y certificadas en cada mesa, y permitir su difusión de manera automática, inmediata y segura a los interventores designados por los candidatos y a los organismos responsables del proceso y por supuesto, a toda la ciudadanía que tenga interés en contrastar los resultados.

OPERATIVA

Lo habitual es que se formen colas de ciudadanos dispuestos a votar, ya que tienen que exhibir el DNI para ser identificadas, ser localizados en los censos, tanto de la mesa como por parte de los interventores y posteriormente votar. Un proceso, a veces, lento y complicado, dependiendo del número de censados y de la agilidad del presidente y resto de miembros de la mesa que no siempre tienen experiencia.

Por todo lo anterior, como solución,   sería totalmente factible que cada una de las mesas disponga de un PC con un programa de gestión del proceso electoral (conteniendo el censo que corresponde a cada mesa), lo que facilitará el reconocimiento de las personas, utilizando un lector de DNI que presente, automáticamente, en la pantalla del PC, la foto del carnet y el número de referencia en las listas manuales de cada interventor, verificando así que aún no votó y registrándolo en el momento en que lo hace en su listado, de forma paralela con el PC, donde quedará, además, constancia de la hora y minuto en que se vote, en definitiva, un proceso rápido, automático y seguro.

Una vez finalizado el recuento, se procedería a la preparación del acta y la certificación de los resultados obtenidos, que serían distribuidos según la normativa. Parece obvio que el sistema aceleraría los tiempos de gestión aliviando las colas al introducir protocolos que aseguran la transparencia y el control del proceso. También facilita el control de los votos por correo y el «cuadre» final del número de papeletas.

Una vez que se completa el proceso y, finalizado el escrutinio, se puede redactar y conformar el acta y registro de la misma, certificando el resultado utilizando un formulario electrónico adecuado. Partiendo de este formulario, cumplimentado y firmado por las personas presentes, tanto en las copias en papel, como en el formato electrónico, se podrían imprimir cuantas copias se precisen para entregar a los componentes de la mesa, en distribución manual, pero, además, disponiendo de una conexión a internet, el presidente de la mesa procedería al envío global (con una simple pulsación) de copias certificadas a todos los interventores, apoderados acreditados y a los organismos previstos.

Esto permitiría disponer, inmediatamente, las actas de todas las mesas que participen en el proceso, para hacer las correspondientes comprobaciones del resultado, de forma múltiple y simultánea, evitando procesos fraudulentos o inseguros.

Con la informatización de la gestión de las mesas, sin duda, se alcanzaría con rapidez y sobre todo transparencia el envío del acta, además de conseguir la disponibilidad inmediata de las bases de datos con el contenido de los resultados que serían accesibles para la comprobación de datos y resultados publicados como definitivos para cualquier persona o Entidad y, que las bases de datos, conteniendo los escrutinios de la mesa, estén permanentemente accesibles para la comprobación de los escrutinios finales.

Para finalizar, como “colmo de transparencia” y, entiendo que toda la ciudadanía agradecería en modo superlativo, sería necesario crear un Tribunal Electoral ante el que todas las formaciones políticas depositaran sus programas y compromisos electorales. Este Tribunal atendería las reclamaciones por incumplimiento de promesas electorales a iniciativa de electores organizados.