Peritos independientes, de la Universidad de Zaragoza, declaran ante el Tribunal en su última sesión sobre el auto de la Diputación Foral De Bizkaia para quitarle la custodia a la demandante, que existe aún hoy un rechazo de la hija de Irune Costumero hacia su padre. Un progenitor con el que la niña es obligada a vivir por el auto foral del 4 de agosto de 2017. La misma orden que la obliga a estar separada de su madre.
Además, Sonia Emilia Vaccaro, perito de la Defensa como psicóloga clínica, explica al Tribunal que “no vi característica o modalidad alguna de haber manipulado a la niña”. A su juicio, “es una madre amorosa y tierna”.
Sin relación el informe con las conclusiones para quitarle la madre a la niña
Por su parte, Dolores Serrat, doctora en medicina, especialista en psiquiatría y en medicina legal y forense y profesora de la Universidad de Zaragoza, ha asegurado en su declaración que “no veo la correlación entre los que describe el informe del Servicio de Menores con las conclusiones que provocan separar a la madre de la hija”.
Esta especialista, y ex consejera de Educación de Aragón, confirma que la niña, a la que ha podido examinar, mantiene con su padre una “relación adaptada, impuesta y resignada con su progenitor”. Sin embargo, la niña no quiere estar con él.
Juan Carlos Giménez, psiquiatra y profesor de Medicina de la Universidad de Zaragoza, tras analizar a Irune Costumero concluye en un informe que “la funcionalidad de la paciente es buena, sigue trabajando en su actividad normal, buen entorno familiar y con una evidente buena relación maternal”.
Rechazo de la hija de Irune Costumero hacia su padre
Serrat y Giménez insisten en su declaración en que la relación de la madre con la niña es buena y ambos han podido constatar el rechazo “evidente” de la hija de Irune Costumero hacia su padre.
Aclara el doctor Giménez que Irune sufre “un trauma como el que sufriría cualquier madre cuando le separan de su hija. Pero deja también claro que esta mujer sufre una sintomatología depresiva menor, ligera, de trastorno adaptativo”. Algo que califica como normal dada la situación que vive. De hecho, asegura que “si no lo hubiera tenido es que hubiera tenido una enfermera grave”.
Recuerda este especialista que “hasta a las madres diagnosticadas de esquizofrenia, la patología más grave que existe, se les permite la custodia compartida con las madres”.
Informes que se registran cuando ya han quitado la madre a la hija
La Acusación en este juicio ha dejado constancia también que el informe de la psicóloga de la asociación subcontratada por la Diputación Foral de Bizkaia, que el auto foral para quitar a Irune la custodia de su hija está basado en un informe que, según la autora hizo en julio, pero que no tiene registro de entrada a la institución foral hasta días después de que ya se hubiera hecho efectivo el auto. Por tanto, después de que la niña ya conviva con su padre y esté separada, por imposición, con su madre.
Síndrome de Alienación Parental
Todos los especialistas que han declarado a instancias de la Acusación han dejado claro que el Síndrome de Alienación Parental no está reconocido, y que nunca lo ha estado, en la OMS. Tampoco se reconoce como tal en la Sociedad Americana de Psicología ni en la Sociedad Americana de Psiquiatría. Tampoco lo admite la Sociedad Española de Psiquiatría y no se contempla en ninguna organización de expertos.
Queda también prohibida la aplicación del SAP por la Ley de Infancia aprobada en las Cortes el mes pasado.
Sin embargo, en el informe de la psicóloga de la asociación subcontrata por el Servicio de Menores, que lleva a tomar una decisión tan drástica, hace alusión a la situación de Alineación Parental. Aunque en su declaración ha aclarado que ella no habla de síndrome.
El abogado defensor en su conclusiones ante el Tribunal ha dejado constancia que desde la Diputación Foral se “ha torturado a la madre”. Recuerda que “no se le ha dado nada, no se le ha dejado pernoctar con su hija nunca, ni llevarla de vacaciones”.
Tampoco entiende la Defensa que si el Servicio de Menores entendía que la madre era tóxica para la niña y que podría generar un grave riesgo a la menor con consecuencias psicológicas, “no recurren la sentencia civil dictada por el auto de enero de este año en el que una decisión judicial otorga a la madre los fines de semana alternos y la mitad de las vacaciones”.
La Fiscalía recuerda, por su parte, que no representa en este juicio a la Defensa.
