El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participa esta mañana en un acto de campaña junto a Gabilondo para pedir el voto al PSOE y a la izquierda. A su juicio, «Vox cruzó el viernes una línea roja y será la última que cruce». Una alusión al debate de la SER que ha marcado un punto de inflexión en el bloque progresista que les hace albergar esperanzas en un cambio en los sondeos para el 4M.
Así las cosas, Pedro Sánchez llama a los «demócratas» a «levantarse» el 4M: «Vox es una amenaza para la democracia española», afirma, ante los aplausos de los asistentes.
Sanchez ha acompañado al candidato socialista en las elecciones del 4M en Madrid, Ángel Gabilondo, en un acto de campaña junto con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que esta semana ha sido amenazado de muerte junto con la directora de la Guardia Civil, María Gámez, y el candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias. Probablemente, tras estas cartas con amenazas de muerte, Marlaska participe más en la semana que falta de campaña hasta el 8M.
Tampoco ha dudado el jefe del Ejecutivo español en comparar el asalto al Capitolio de EEUU con lo que está pasando en España con la ultraderecha.
Mitin
En el mitin de esta mañana, el presidente del Gobierno, y también secretario general del PSOE, ha insistido en que «hasta ahora, hemos soportado los gritos, los insultos, el odio y las mentiras de la ultraderecha, e incluso sus amenazas». «Lo hemos soportado tanto tiempo, que hasta hemos llegado a pensar que era normal».
Sobre la tele y Vox
Sánchez también ha recalcado que «los líderes de Vox aparecían en programas de televisión, los presentadores hablaban cordialmente con ellos sobre todo y nos hemos acostumbrado a aceptar a la ultraderecha como algo normal, y eso es doloroso», ha añadido.
De esta forma, el discurso de Sánchez se acerca al de Iglesias con respecto a las críticas a los medios que han blanqueado a la ultraderecha con espacio, tiempo y sin cuestionar a Vox (salvo excepciones). La primera en seguir esta línea fue TVE.
«Nuestra democracia tiene un problema», ha proseguido, aunque ha dicho que no es «único ni exclusivo» de España, ya que lo tienen también otras «democracias plenas, maduras y solventes» como las de Francia, Alemania, Suecia o incluso Estados Unidos. Sánchez ha puesto como ejemplos de actos que «horrorizan» el asalto al capitolio de EE.UU. en enero, o cuando se ve al «neofascismo competir, incluso con garantías de poder superar la primera vuelta de las elecciones francesas». «Pero sus amigos están a muy pocos metros de nosotros«, ha advertido.
Es mas fácil destruir una nación desde dentro y no será Cataluña o el País Vasco quienes lo hagan, Madrid no se conforma con absorber España, quiere gobernarla.
Pero que dice este tío,se le va la olla cada vez que habla.Pedro dimisión.