El Partido Popular no va a expedientar a Xavier García Albiol al que el juez ha enviado a juicio por haber cometido un presunto delito de prevaricación. La derecha cree que la prevaricación no es corrupción. Pero en el juicio de los ERES de Andalucía, los abogados de los populares se pasaron todo el tiempo acusando de “corrupto” al expresidente de la Junta, Manuel Chaves, condenado precisamente por eso: por prevaricación. Como siempre, el PP califica los hechos a su conveniencia.
Según el fiscal, Xavier García Albiol, para el que pide dos años y diez meses de cárcel y diez años de inhabilitación para ejercer cargo público, permitió la instalación de unas antenas de telefonía de manera irregular en la comisaría de policía de la guardia urbana de Badalona siendo alcalde de la localidad. Por su parte, en el auto de procesamiento, el juez instructor señala que García Albiol ostentaba la competencia para el otorgamiento de licencias de obras y ambientales, la apertura de expedientes de disciplina urbanística, y la resolución de expedientes sancionadores por infracción de la normativa medioambiental. «No consta que el referido alcalde en relación con los hechos investigados ejerciera formalmente cualquiera de las competencias antes señaladas, esto es, ex ante, con la concesión de licencia alguna o ex post, con la incoación de expediente alguno de disciplina urbanística o medioambiental” .
En Génova argumentan que a García Albiol no se le puede aplicar el artículo 21 de los Estatutos del PP que contemplan la suspensión de militancia cuando un afiliado “esté incurso en un proceso penal respecto de los cuales se haya dictado auto de apertura de juicio oral» porque sólo es aplicable en el “caso de un delito de corrupción” y en este asunto “no hay corrupción. Sólo se le procesa por prevaricación”.
Además, la dirección nacional considera que este asunto se debe resolver en el PP catalán mientras que allí creen que la decisión sobre este asunto es competencia exclusiva del comité ejecutivo nacional por entender que García Albiol es miembro de la comisión electoral nacional.
Adelantan que no van a tomar ninguna decisión hasta que “no haya condena, si es que la hay”. Insisten en que “no es un caso de corrupción. Es una antena provisional que una empresa coloca sin licencia en una finca hace 12 años. Entendemos que un alcalde de una ciudad de 220.000 habitantes no conozca ni si existe esa licencia, ni si un piso que se reforma tiene permiso municipal». Además, subrayan, «no hay enriquecimiento alguno de nadie». Fiscal y juez no opinan de la misma manera.
García Albiol, por su parte, ha comentado que “no es casualidad” que se le haya abierto juicio oral “precisamente a dos meses de las elecciones” a las que vuelve a presentarse a la alcaldía de Badalona. Es un líder emblemático del PP catalán. Histórico militante que ha hecho frente al independentismo y a la izquierda catalana, goza de mucha popularidad en la ciudad de Badalona donde fue apartado de la alcaldía por una moción de censura llevada a cabo por una alianza de partidos encabezada por el PSC donde figuran Esquerra Republicana, En Comú Podem, y Junts per Catalunya. García Albiol aparece en los llamados “papeles de pandora”, una macroinvestigación periodística en la que el edil aparece vinculado a una sociedad off shore radicada en Belice.
El dirigente catalán está convencido de que va a recuperar la alcaldía de la cuarta ciudad más importante de Catalunya en número de habitantes. Para el Partido Popular eso sería restablecer su presencia política en el territorio, cada vez más residual debido a los errores cometidos durante el “Procès”. Unos errores que le llevaron a obtener un solo diputado en Barcelona en las elecciones generales de hace tres años. Si García Albiol logra recuperar la mayoría del PP en Badalona, en la organización catalana piensan que se puede producir un efecto dominó que los llevaría a recuperar la influencia perdida en el resto del territorio. Sobre todo en lo que se refiere al llamado “cinturón industrial” del área metropolitana de Barcelona. Un importante bastión de cara a las elecciones generales de finales de año.
Y es bajo ese prisma bajo el cual hay que entender la negativa del PP a abrir expediente a García Albiol. Porque en la dirección nacional consideran que es de los pocos activos que tienen en Catalunya y no se pueden permitir el lujo de prescindir de su presencia.
Lo peor es que a los populares se les ha llenado la boca de acusaciones de corrupción en situaciones semejantes a la que atraviesa García Albiol. En el caso de los ERES andaluces, el PP se personó como acusación particular. Al expresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, lo condenaron por prevaricación y nada más. Nada de malversación ni otros delitos. Aún así, los populares andaluces se encargaron de calificar a Chaves de corrupto.
Ahora, las tornas se vuelven contra ellos. ¿No es corrupto García Albiol acusado de un delito de prevaricación? Efectivamente, no se llevó dinero. Pero tampoco Chaves y le calificaron de corrupto.
