Las relaciones de pareja duran poco hoy día, y son muchos los motivos que llevan a las rupturas. Hay muchas personas solas, con la única compañía de un animal doméstico a veces, algo pasa, tal vez toleramos poco, o haya muchas oportunidades de una compañía breve que satisfaga ligeramente los apetitos básicos, o al imperar el culto al cuerpo, una vez que éste ha dado todo de sí, ya no quede casi nada.

Los laberintos de la mente tienen vericuetos sin fin, y tal vez el silencio ya no sea un aliado, en todo caso, parece que hay una dualidad manifiesta entre lo que se pretende ser y lo que se es a nivel personal. Esa triple proyección que manejan los psicólogos entre lo que soy, lo que creo que soy y lo que me gustaría que los demás creyeran que soy, crea muchos problemas y fisuras. Y se anda defendiendo como paladines y quijotes la propia imagen, como si una imagen tuviera entidad en sí misma y no fuera sino algo proyectado por un objeto o sujeto. De manera que se pretende cambiar la imagen sin cambiar su origen: misión imposible, como la película.

Los teóricos de la Nueva Era indican: “El mapa no es el territorio”. Pero los necesitamos, ya que, ¿cómo hemos de conocer y conquistar un territorio sin un mapa?, necesitamos aprender a trazarlos, escenarios que es como los definen los economistas y politicos, de la realidad en la que vivimos y ser conscientes de hacia donde lleva cada rio y cada corriente para saber si nos interesa navegar en ella.

Tenemos múltiples opciones, y a veces pasa, que ya que hemos cogido una, nos cuesta compatibilizar (y mucho más combinar) la nuestra con la de otra persona en un plano íntimo y suavizar el roce de la convivencia, sin que las músicas de cada uno al unirse no suenen disarmónicas. Los seres humanos se necesitan más que nunca porque no se tienen, pero rehúyen aceptarlo y mucho más expresarlo.

En Japón hay amigos de alquiler, y novios y novias para acompañar a los que no tienen pareja y que no quieren quedar en mal lugar. Esto parece que se nos está yendo de las manos. Es como si hubiéramos empezado a perder los instintos básicos de confluencia y contacto humano a nivel íntimo. Sin embargo, esto es solo la punta del iceberg, hay mucho de falta de capacidad para llevarse bien, tal vez desde el principio de los tiempos (la manzana de la discordia debió de ser la que estaba en el Paraíso), por eso ha habido tantas disputas y tanta opresión, pero es la asignatura que inevitablemente tenemos que aprobar para vivir mejor. Como cuenta la leyenda, que es un término que significa: lo que debe ser contado, Pandora abrió la caja y de ella salieron todos los males, pero también la esperanza. Hay que decir que esta esperanza es sumamente prolífica y dota con una infinidad de bienes si se cree en ella, es la generadora de la ilusión y con ella la motivación, el deseo de algo mejor y la fuerza, se pueden hacer milagros de todas clases. Aun sin confianza en uno mismo se puede tener, es algo maravilloso.

Y bueno, tal vez lo radical no sea si estamos solos o en pareja, o en comunidad. Lo importante parece que tiene que ver con intentar ser congruentes, que es complicado, pero intentarlo, de manera que lo que pienso, lo que siento y lo que hago vayan en la misma dirección, de esta manera es más fácil dar en la diana, no es seguro pero es más probable.

En la actualidad el problema radica en buscar el éxito a través de la pareja en vez del éxito con ella, aprendiendo a crecer juntos, no utilizándola para los fines propios sin contar con los suyos.

Es muy difícil además, porque desde un punto de vista de necesidades básicas sus componentes ya no se necesitan casi nada, por lo menor en el primer mundo, cada uno puede obtener dinero con el que pagar lo que quieren de manera más o menos imperativa. Y los afectos se intentan nutrir de múltiples maneras. Por otro lado existen múltiples amenazas, así como inestabilidades. El llegar a un punto en que no se está enamorado es una de ellas. El fuego que calentaba la unión se apaga y solo queda ceniza y rescoldos.

Se habla de ser naranjas completas en vez de medias naranjas, ¿pero realmente alguien se cree que es, o será alguna vez una personalidad completa? Eso es un espejismo, necesitamos complementarnos respetando la singularidad, esta es la única esperanza de la unión sentimental, que uno aporte unos condimentos y el otro los que faltan para hacer una comida que alimente el cuerpo y el alma. El pan y el vino, fuerza y delicadeza, lógica y emoción.

El ser humano tiene fuertes instintos que le llevan a la unión, pero también tiene una personalidad que a veces es disfuncional y no quiere colaborar o quiere ser el que siempre lleve la razón. La tendencia a la posesión es intensa, lo que trae los celos y al afán de poder y de control, que si se excede de lo tolerable por las partes, conduce a relaciones patológicas, claustrofóbicas o limitantes y opresivas.

No somos ángeles, pero necesitamos saber relacionarnos con comprensión, no obstante, la relación sentimental es tan compleja que no es nada fácil mantener el afecto y perdonar las ofensas y que nos hayamos desilusionado muchas veces.

Hay que regarla con un agua muy pura, en la que estén disueltas las mejores intenciones, y no ceder a las tentaciones de ir por caminos fáciles que en muchas ocasiones están llenos de trampas.

Y es necesario procurar ser agradable para el otro, cuesta un esfuerzo grande a veces, pero lo atractivo, atrae, no solo a nivel físico, también en el afectivo, en el intelectual y en el moral. Ser humilde y pedir perdón es tan necesario como útil, y abandonar el rencor. Hay que saber ser amable, para poder ser amado. Lo que es útil siempre y en todo lugar es la creatividad, a la que hay que nutrir y entrenar para que nos ayude a amenizar la relación, y aporte soluciones a los problemas. Y dar de sí lo necesario sin ser cicatero. El roce hace el cariño, pero también lo desgasta, pero el ser humano sabe reavivar sus afectos cuando no han muerto del todo, sobre todo si es capaz de ser positivo y justo, ya que es todo un ejercicio de generosidad el saber ver lo bueno cuando hay muchos nubarrones y la precariedad del tipo que sea muerde con sus afiliados dientes el ánimo, es muy beneficioso pensar que el mañana seguro que traerá cosas valiosas que compartir, y aunque haya que enfrentarse a dragones puede ser algo apasionante.

 

 

Artículo anteriorLa bombona de butano baja en septiembre pero sigue siendo un 20,6% más cara que hace un año
Artículo siguienteLa boda de BMN y BANKIA: ¿La futura Banca Pública?
Presidente de la ONG Paz en Acción, director de Radionuevaera.es, Coproductor del programa Tiempo de Cambio, colaborador de la revista Ser Consciente, coach, empresario, escritor y conferenciante. Tiene un profundo interés por todos los conocimientos humanísticos, dedicándose al estudio de la Psicología, especialmente el análisis de C.G.Jung, mediante una introspección de más de dos años. Su interés por comprender al ser humano y su destino le lleva a estudiar también Filosofía durante ocho años. Se forma en técnicas bioenergéticas durante un año y medio, y meditación, tres años. Es colaborador en periódicos, televisiones y especialmente en numerosas radios. Desarrolla varios productos que comercializa a nivel nacional como: -CURSOS DE AUTOAYUDA (12 TÍTULOS) -REVISTA: EL MUNDO DE LO INCREIBLE –PROGRAMAS: ELIMINE SU ESTRÉS Y VALORES PARA UNA CULTURA DE PAZ -LIBROS: RELACIONES HUMANAS, TECNICAS ÉTICAS DE VENTA y ESTRELLAS DE ESPERANZA. Imparte el taller: SER CONSCIENTE EN EL AHORA.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre