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Moreno Bonilla y su amor por Cataluña

Manel Mas
Manel Mas
Estudié contabilidad y economía, fui perito y profesor mercantil, ejercí de profesor en Alesco (Altos Estudios Comerciales) en Barcelona dando clases de contabilidad, cálculo y derecho mercantil.
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análisis

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Una vez conocidos los resultados oficiales de las elecciones andaluzas, me vinieron a la memoria una serie de dudas por la campaña que el PP había desarrollado, previa los comicios, y también por los comentarios conocidos de antes y que me gustaría explicar.

En la Junta de Andalucía se comentaba: «Si Cataluña se independiza, nuestras finanzas tendrán dificultades». Un líder sindical andaluz decía: ¿Si los catalanes se marchan, como se pagarán las peonadas? La conclusión era clara: los contribuyentes catalanes financian Andalucía. Otra conclusión curiosa: los andaluces que tuvieron que abandonar su tierra y viven en Cataluña… continúen siendo explotados por los mismos caciques que les hicieron marchar. ¿Qué pasará ahora…? ¿Dejarán los habitantes de Cataluña subvencionar Andalucía… o seguirá todo igual… o peor?

Moreno Bonilla prometió bajar impuestos y avanzar en los servicios públicos en Andalucía. ¿Generará riqueza para dejar de ser subvencionada o precisará todavía más los recursos de Cataluña y otras comunidades?

El PP ha gobernado muchos años en Galicia y continúa siendo una comunidad deficitaria. Quedan años para que Andalucía, bajo el PP como con el PSOE, sea autosuficiente en su economía. Seguirá siendo deficitaria. Por lo tanto, el argumento que el déficit fiscal es para solidaridad interterritorial no es creíble. Los Andaluces han votado PP. ¿Creen que su sanidad y educación necesitan ser recortadas o privatizadas? ¿Se olvidarán de la solidaridad catalana? La solidaridad, por definición, «es voluntaria». El que contribuyen los catalanes es «imposición» y va en detrimento de su propia sanidad, educación. ¿Es justo? Que generen riqueza y lo hagan con sus recursos. Si la «solidaridad» territorial, ¡mal entendida!, es para bajarle impuestos a los ricos en Andalucía, ¡esta solidaridad deja de serlo claramente!

Con este perverso sistema «todos» los catalanes siempre salen perdiendo. Sus gobernantes se ven obligados a subir impuestos para recaudar más. Las exigencias de su población son crecientes en todos los campos: salud, educación, asistencia social…. Tienen que atender una cifra de beneficiarios muy superior a la que admite el Estado español. Y todo esto, con el expolio de más del 9% de su PIB anual y llevar 7 años de retraso la modificación de la financiación del Estado. El reconocido economista Niño Becerra cifra el PIB en 250.000 millones. Dice que «esta» es la razón porque España niega la independencia. Números sencillos: 9% de 250.000 millones anuales… «es» la cifra que el Estado expolia a Cataluña. Por eso Cataluña se ve obligada a subir impuestos. Aun así, tiene dificultades para atender sus necesidades. ¿Por qué no admiten esto los partidos y votantes? ¿Son conscientes estos votantes del daño que les hace esta «falsa» solidaridad? ¿Aumentará cuando Andalucía necesite todavía más recursos?

El actual sistema castiga severamente Cataluña. Se descapitaliza como donante en una comunidad receptora que rebaja sus propios impuestos. Es una burla a Cataluña, a su obligada solidaridad; un desprecio, un abuso para todos los contribuyentes que viven y trabajan en Cataluña, entre ellos muchos andaluces i sus descendientes.

Se repite que los impuestos los pagan las personas, no los territorios. Pues las personas que viven en Cataluña aportan más y reciben menos que las personas que viven en lugares como Andalucía. ¡Esto va incluso en contra de lo que contemplaba el Estatuto de Cataluña que…, hoy no existe por sentencia del Tribunal Constitucional!

Ahora, de cara a preparar los presupuestos de Andalucía para el 2023, Moreno Bonilla ha visto que no podrá cumplir las promesas electorales en materia económica y, una vez más, ha dirigido la vista a Cataluña para solucionarlo.

Veamos primero los antecedentes: Más de cuarenta años de pagar impuestos y de enormes transferencias hacia Andalucía no han servido para que esta comunidad abandone los lugares más bajos del ranking.

Que, con estas cifras, un presidente baje impuestos y renuncie a recaudar 900 millones de euros es un perjuicio por su propio país y una burla al esfuerzo fiscal de otros territorios.

Es decir, el estado, está pagando veinte céntimos por litro de gasolina, está regalando el billete de tren, ha rebajado el billete de metro y bus, pero en Andalucía debe sobrar el dinero, ya que su presidente baja los impuestos.

No contento con esta medida populista, Moreno Bonilla la corona con una medida de catalanofobia necesaria para que sea imbatible: presumir que lo hace para que empresarios catalanes se hagan residentes fiscales andaluces.

Cataluña genera el 19% del PIB, el 25% de las exportaciones, es la principal fuente de riqueza productiva del Estado. Empresarios, trabajadores catalanes y otras procedencias lo consiguen. «Estas personas» necesitan infraestructuras, tienen necesidades irrenunciables en educación, sanidad, atenciones sociales, etc., pero «no pueden atenderlas cómo merecen» por el expolio, porque le sacan fondos para autonomías como Andalucía que, según el PP, rebaja sus impuestos. ¿Esto es justo? ¿Esto lo consideran justo los partidos, patronales, sindicados, con sus votantes, afiliados, «dependentistas» en Cataluña? ¿A quién representan en realidad, a la población catalana o a la andaluza? ¿Es lógico que Cataluña sea la que tiene más impuestos porque Andalucía los rebaje? ¿Cómo calificar esto?

Ver, en el siguiente video, como se tiró dinero público en lugar de hacer inversiones productivas como haría falta.

El dinero, supuestamente destinado a formación profesional y facilitar puestos de trabajo fue un fraude. La corrupción se descubrió y llevó a dos expresidentes andaluces a juicio. Esta ha sido la sentencia definitiva.

El Supremo confirma las penas de Griñán y Chaves por el fraude de los ERE. La sentencia sale adelante con el voto de tres de los jueces que formaban parte. El Supremo confirma un relato demoledor para el PSOE sobre el caso.

 La Sala de lo penal ha ratificado las condenas ya impuestas a Chaves (por prevaricación) y Griñán (prevaricación y malversación) por permitir, durante una década, un sistema fraudulento para distribuir ayudas sociolaborales, según avanzó este martes el alto tribunal. La decisión aboca a Griñán a entrar en prisión para cumplir una condena de seis años. En el caso de Chaves, la pena implica su inhabilitación durante nueve años.

Si el PP rebaja impuestos significa que piensa aprovecharse más de quienes la subvencionan, y que no necesita su recaudación. Si pueden rebajar impuestos, se supone que no precisarán la aportación catalana. La sociedad andaluza tiene que ser coherente con su voto. La sociedad catalana también tiene que ser coherente consigo misma, con sus empresas, trabajadores, familias.

Los catalanes tienen que renunciar a derechos básicos que merecen por lo que generan para atender comunidades que quieren atender sus necesidades, pero recaudando menos. Es lo que propone el PP. ¿Es de recibo?

La solidaridad, por definición, es «voluntaria». No es el caso del expolio a «todos» los que tributan en Cataluña y que «a todos» los perjudica. Una subvención forzosa a quienes rebajan sus ingresos incrementa la realidad de este expolio.

¿Qué sucederá? ¿Mejorará la calidad de vida de los catalanes porque Andalucía ya no tendrá que ser subvencionada o… empeorará porque Andalucía todavía precisará más subvenciones al rebajar sus impuestos? ¿Cómo afectará a todos y cada uno de los habitantes de Cataluña la victoria del PP en Andalucía?

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1 COMENTARIO

  1. Solo un apunte.
    Si el tirano franco en vez de industrializar Cataluña y Euskadi para tenerlos contentos por su afan de independencia hubiera industrializado Andalucia y Extremadura,otro gallo cantaria¿verdad?

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