El Brexit se activará con carácter normal a las cero horas en España del próximo 1 de Febrero. 73 Eurodiputados británicos están haciendo las maletas y vaciando sus despachos, tendrán que hacerlo antes del día 7 del mes de Febrero. Cuando uno como ciudadano de a pie se imagina las razones por las que el 51,9 % de la ciudadanía inglesa que votó prefiere irse de Europa, no llegamos a entenderlo. Solo votaron a favor del Gobierno del Brexit el 37% de los británicos registrados en el censo electoral, muchos se abstuvieron y otros votaron en contra. La participación hay que recordar fue solo del 72.2%. De 46.501.241 votantes registrados -censo electoral-, fueron 17.410.742 los que decidieron abandonar la Comunidad Europea, es decir un 37,44% del total del electorado (eso sí, 52% de los votantes) ¿Como es posible que estén engallados perdidos, ministros y diputados del Gobierno, marcándose faroles? Esto es un circo y la carpa es Gran Bretaña. Aunque también hay que reconocer que la amplia mayoría en las últimas elecciones de Boris Johnson y el hundimiento de los laboristas han dejado camino abierto a éste último para hacer del Brexit lo que quiera.
La primera pregunta que me viene a la cabeza, es porque tantos ciudadanos de toda Europa y miles de ciudadanos y soldados ingleses defendieron con su vida en la segunda guerra mundial la democracia europea y mundial, contra la dictadura y el nazismo de los también europeos Hitler y Mussolini. Hoy abandonan la Comunidad Europea 47 años después, gracias a una votación con una mayoría pírrica que no representan a toda la nación ni con mucho.
Es cierto que entonces no estaba todavía constituida la Comunidad Europea pero había algunas ideas para construir algo en común y el pueblo inglés combatió ferozmente a favor de la unidad de los pueblos demócratas. La segunda guerra mundial dejo un triste recuerdo con 70.000.000 de muertos entre soldados y civiles.
De los cuales 400.000 fueron ingleses.
Conviene recordar que los orígenes de Europa como comunidad se remontan al periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial, en particular a la fundación en 1951 de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero en París a pocos años de concluir la segunda guerra mundial, tras la «declaración Schuman», y los Tratados de Roma, el constitutivo de la Comunidad Económica Europea.
Tras el final de esta última guerra, las economías de los países de Europa salieron dañadas de manera crítica, lo que dio fin a la tradicional hegemonía europea en el mundo. Las nuevas superpotencias – Estados Unidos, la Unión Soviética y China – tenían un poder económico, político y militar muy superior al de cualquiera de los estados europeos. Ante esta situación, numerosas tendencias políticas pretendían reconstruir Europa como una nueva nación unificada, para evitar volver a un enfrentamiento entre los estados europeos. Debido al éxito de la CEE, el Reino Unido solicitó su ingreso a la Comunidad en 1961. Pero el presidente de Francia, Charles de Gaulle se opuso a su ingreso en la CEE, razón por la cual el Reino Unido tuvo que esperar a que De Gaulle se retirara del gobierno en Francia para ver aceptada su candidatura.
Los aranceles entre los países miembros fueron suprimidos en 1968, adoptándose un Arancel Común para los productos procedentes de terceros países. De esta manera se alcanzó la Unión Aduanera. En 1973 se hizo la primera ampliación con Irlanda, Reino Unido y Dinamarca.
En 1979 fue elegido por voto directo de los ciudadanos el primer Parlamento europeo, Ese mismo año entró en vigor el Sistema Monetario Europeo (SME). En 1.981, se incorporó Grecia y el primero de enero de 1986 la Comunidad se amplió con el ingreso de España y Portugal. La caída del muro de Berlín sentó las bases para la integración de varios países del centro y el este del continente en la UE.
En 1.995 la esfera de influencia de la UE aumenta significativamente con la incorporación de Austria, Finlandia y Suecia. En 1999 fue creado el Banco Central Europeo, fijándose su sede en Fráncfort . El 1 de enero de 2002 Billetes y monedas fueron puestos en circulación, sustituyendo a las antiguas monedas.
El Tratado de Niza, que entró en vigor el 1 de febrero de 2003, hizo los preparativos finales antes de la ampliación de 2004 a 10 nuevos miembros: Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, República Checa, Hungría, Eslovaquia, Eslovenia, Malta y Chipre. Con posterioridad se dio a Croacia, Turquía y a Macedonia del Norte el estatus de «candidato oficial», que ya poseían Rumania y Bulgaria. En 2007, la quinta ampliación se completó con la adhesión de Rumanía y Bulgaria el 1 de enero. Eslovaquia se convirtió en decimosexto miembro de la zona euro el 1 de enero de 2009.
A pesar de la constante percepción de crisis que se vive dentro de la UE, su Producto Interno Bruto es el mayor de todos los paises mundo, según el Fondo Monetario Internacional (FM)
La ERT, (European Round Table) engloba al conjunto de las empresas más importantes de Europa. Hay que decir que 50 de ellas facturan más de 2 billones de euros al año y en I+D gastan más de 55.000 millones, empleando a 6,9 millones de trabajadores europeos. Su cuota mundial de mercado es de un 16%. Gran Bretaña está mucho más protegida dentro que fuera de Europa. El País se debilita con el Brexit así como su influencia global. Recuperan soberanía pero pierden peso y poder.
El 23 de junio de 2016 se realizó el Referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, también conocido como brexit en el cual la opción de Salir de la UE ganó con un 51.9% de los votantes, no así del censo, mientras que Continuar en la UE obtiene un 48.1%, así Reino Unido se convirtió en el primer país en la historia de la unión europea en querer salir de la misma, sin embargo, en Escocia, Irlanda del Norte y Gibraltar además de la mayoría de Londres, predominó la opción de la permanencia. Los ingleses a favor del Brexit en la realidad no sobrepasan el 38%. Una nación entera se dispone a abandonar un proyecto europeo, que lo único que hace es sumar.
Su turismo invade media Europa. Ellos se encuentran cómodos con esto, pues se sienten bien atendidos en cualquier rincón europeo por donde van, además de unas coberturas sanitarias que les aseguran una buena salud. Estos son los más anti Brexit. También recurren a fichar médicos de media Europa para garantizar la salud a sus ciudadanos.
Muchos británicos afirman que rotundamente el Brexit hará la vida para los ingleses mucho más cara, tabaco, vivienda, sanidad y su bebida favorita la cerveza, la seguridad social y los medicamentos. El Brexit será un disparate, un desastre económico, es una declaración de xenofobia y arrogancia – afirman-.
Este relato pasa por contarle algunas de las verdades en relación a la inconveniencia del Brexit, los que lo cuentan son personas inglesas, dicen a los favorables al él, que se les ha engañado con consignas equivocadas por políticos que se integran básicamente en partidos conservadores y nacionalistas.
Uno se encuentra en la calle con varios razonamientos a favor y en contra del Brexit, así piensan los ciudadanos ingleses, los proBrexit y los anti en 9 puntos:
1.-Pro Brexit- Somos distintos que los demás europeos sin lugar a dudas, es una cuestión no discutible, cuando menos disponemos de rasgos propios y siempre hemos sido singulares.
Anti Brexit– Estos razonamientos son rotundamente falsos. Invita a pensar a defensores del Brexit con una mentalidad proclive a un nacionalismo sin escrúpulos, una raza superior, prepotencia y dominancia. Nacionalismo radical. Falta de criterios con rigor que avalen estas tesis. Visión xenófoba y arrogante.
2.-Pro Brexit- Somos un pueblo singular con una personalidad propia que no debe diluirse en unidad con otros países. Dios salve a nuestra Reina. La Corona Británica está por encima de la idea de Europa. No podemos mezclarnos con otros países, quebrantaría nuestra forma de organizarnos y a una monarquía muy antigua, con tradiciones singulares que debemos respetar.
Anti Brexit– Dicen que los que así piensan son nacionalistas radicales y esperpénticos. El “Dios salve a la Reina” es una forma de identificarse solo en su forma de gobernarse. Somos un país aconfesional.
3.–Pro Brexit- Nada de Banco Central Europeo, tenemos el Banco Central de Inglaterra. Además necesitamos una moneda propia como hasta ahora con nuestras propias finanzas, sin dependencia exterior. Nuestra propia regulación. No entendemos un Banco Central Europeo que dirija nuestros asuntos de dinero, como la fijación de tasas de interés por entes ajenos.
Anti Brexit– Afirman que esto no es real y más aún es falso. Inglaterra fuera de la Comunidad quedará desprotegida financiera y comercialmente. Sus exportaciones quedarán muy dañadas y el quebranto para la clase media será total. Huelgas y paros laborales y pérdida de subvenciones. En el fondo Insolidaridad y desconfianza.
4.–Pro Brexit- Nuestros ciudadanos son de primera. No debemos mezclarnos con ciudadanos de segunda o tercera. Mucho menos abandonar nuestras instituciones y nuestra personalidad profundamente inglesa.
Anti Brexit– Dictadura racial monolítica, no se mencionan expresamente cuales son esos ciudadanos de segunda o tercera, y en que países residen. No son británicos y eso es suficiente, hay que respetarlos. Conservadurismo a ultranza con un fuerte componente racial. El mantra de los Brexit es “recuperar el control de las fronteras”, conteniendo la migración de personas.
5.–Pro Brexit- No podemos olvidar que seguimos siendo Comunidad Británica y eso exige una singularidad fuera de Europa.
Anti Brexit– No son conscientes que ellos ya no poseen ningún imperio y menos aún si se integran en una comunidad de países como es Europa en el que se difuminan aún más. El hecho de perder su singularidad les aterra, socializarse con Europa es fatal para sus aspiraciones como Estado en el mundo.
6.–Pro Brexit- Seguimos manejando nuestra propia moneda, la libra esterlina. Somos distintos. Nos hemos resistido a entrar monetariamente en el euro, de lo que estamos satisfechos.
Anti Brexit– Aún más nacionalismo y mente superconservadora. Respetan la tradición, la modernidad les asusta.
7.-Pro Brexit- Nuestros coches circulan de forma diferente al resto de Europa, por la izquierda.
Señal inequívoca de que gobernamos el mundo de alguna manera. Estar fuera de Europa refuerza esta idea.
Anti Brexit.- Debemos construir una Europa fuerte, ante los bloques actuales. ¿Qué tiene que ver conducir distinto o tener una moneda propia para ello? Se aprovechan del bajo nivel cultural de muchas personas.
8.- Pro Brexit- Nuestro idioma es una forma de identificarnos en todo el mundo, distinta a los demás. Tenemos un idioma a nivel mundial que goza de una altísima penetración como lenguaje patrón.
Anti Brexit.– Pero no explican con razones evidentes porque y para qué. El Idioma inglés es una gran lengua pero hay otras también muy importantes.
9.- Pro Brexit- Nos vamos porque no necesitamos de Europa. Nunca la hemos necesitado, sencillamente entramos un poco a regañadientes, pero la realidad nos ha dicho que eso no es bueno ni para nuestro país ni para los ciudadanos, el no tener en cuenta a un 48% del país contrario al Brexit apoya nuestra idea de disciplina y de democracia al margen de esta gran minoría.
Anti Brexit.- Más mierda, desastre y pérdida de consciencia con unos políticos caducos incapaces de solucionar un conflicto que solo ellos han creado. No tienen en cuenta una minoría muy importante. A Escocia e Irlanda la menosprecian. Habrá conflictos permanentes.
Nombran a un primer ministro conservador Boris Johnson de 55 años de edad, que a los ojos del ciudadano medio español, es un personaje que no goza de simpatías, ni hace cosas consideradas como medianamente normales. Siempre se le asocia a Trump por su forma de hacer. Desde fuera se genera otra duda para el ciudadano de a pie, la de que cómo es posible que el pueblo británico confíe en lo que hace esta persona, enfrentándose a un Brexit duro (más o menos un acuerdo por las bravas). La traición está presente, un porcentaje alto de sus ciudadanos lamentan amargamente su salida de Europa. Ellos si se acuerdan del sacrificio de sus soldados y ciudadanos muertos.
Un nuevo referéndum es absolutamente necesario. Esto no será posible a corto plazo de acuerdo con las últimas elecciones. No obstante Europa debe seguir trabajando por la Unión.
Por otra parte los escoceses son mayoritariamente europeístas, antes prefieren salir del Reino Unido que de Europa. La campaña del Brexit fue populista, basada en el miedo, pero esto es igualmente lo ocurrido en España con el partido de ultraderecha VOX, que con su populismo ha conseguido 56 escaños en el Parlamento español, fuera de cualquier previsión. El Ex primer ministro laborista inglés Tony Blair respalda la permanencia en Europa, igualmente que “los verdes” británicos. Su diputada Caroline Lucas, indicaba los riesgos de dejarse llevar por un partido conservador que gobierne solo. Firmará acuerdos bilaterales tóxicos para el País. Gran Bretaña fuera de Europa estará sin lugar a dudas menos protegida, también sus ciudadanos.
La gran tragedia está a punto de producirse en Gran Bretaña. Y fuera del país el descrédito de sus ciudadanos en descenso. Esto tampoco es bueno para una Europa más sólida.
