Las mujeres víctimas de la violencia machista han pasado este 2020 el peor año de sus vidas debido fundamentalmente a la pandemia provocada por la covid-19. El obligado confinamiento domiciliario ha supuesto un nuevo reto añadido a los numerosos contratiempos que estas mujeres deben atravesar en su lucha contra sus verdugos y también contra un sistema que aún mantiene numerosas lagunas en la protección y la cobertura adecuada que requieren estas víctimas. Esta realidad se vuelve a reflejar en los datos oficiales publicados este lunes por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, donde se constata que, incluso en un año tan excepcional como el pasado 2020, los jueces siguen rechazando casi una de cada tres solicitudes de protección que presentan las víctimas de la violencia machista. Resulta demoledor el dato de que el número de órdenes de protección otorgadas descendió en 2020 un 11,94% respecto a 2019 pese a ser un año excepcional en todos los aspectos.
Así, durante 2020 se han solicitado en los órganos judiciales un total de 42.624 órdenes de protección, de las que los jueces han rechazado el 28,52% de las mismas, casi una de cada tres presentadas por estas víctimas. Los jueces adoptaron un total de 30.471 órdenes de protección y dejaron sin las mismas a 12.153 mujeres que requirieron esta protección al Estado. En este sentido, 35.860 órdenes de protección (que incluyen medidas de protección y seguridad de las víctimas) fueron solicitadas en los juzgados de violencia sobre la mujer y otras 6.764 (el 16%) en los juzgados de guardia.
Otro dato revelador que se repite años tras año es que los juzgados específicos de violencia sobre la mujer acuerdan muchas menos órdenes de protección que los órganos judiciales de guardia. Así, los juzgados de violencia sobre la mujer acordaron el 70,52% de las órdenes de protección que fueron incoadas este pasado 2020, mientras que los juzgados de guardia acordaron el 77% de las órdenes solicitadas, casi siete puntos más de diferencia. En ambos casos, se registra el mismo porcentaje de órdenes de protección adoptadas que en 2019 pese a haber sido este pasado 2020 un año excepcional debido a la pandemia sanitaria.
El confinamiento provocado por la pandemia origina la caída de las denuncias por violencia de género un 10 por ciento respecto a 2019
También llama la atención que en más de la mitad de las solicitudes de protección, exactamente en el 51,2% de los casos, la relación de pareja se mantenía en el momento en que la víctima requería la ayuda de la justicia para protegerse de su verdugo. Esto es especialmente preocupante ya que miles de mujeres víctimas de la violencia machista se han visto obligadas a convivir permanentemente con sus agresores durante los meses de confinamiento domiciliario impuestos por el estado de alarma.
El Observatorio ha destacado en el balance de los datos oficiales de 2020 que la crisis sanitaria y el confinamiento han causaron un descenso del 10% en el número de denuncias y de víctimas de violencia de género. De este modo, los órganos judiciales registraron el pasado año un total de 150.785 denuncias, un 10,31% menos que en 2019.
Las víctimas de la violencia machista, en total 145.731, presentaron el 71,44% de las denuncias. Las sentencias condenatorias alcanzaron un nuevo máximo histórico anual al representar el 73,01% del total de las 41.568 condenas dictadas, lo que significa también que casi el 27% de los denunciados por violencia machista fueron absueltos, es decir, un total de 11.223 hombres acusados de violencia machista fueron absueltos por la justicia.
Otro dato importante que mantiene la tendencia de los últimos años es que diez de cada cien víctimas, el mismo porcentaje que en 2019, se acogió a la dispensa de la obligación legal de declarar. La directora del Observatorio, Ángeles Carmona, señala que la disminución del número de denuncias y víctimas “no refleja un descenso real de la violencia de género, sino que es consecuencia de la crisis sanitaria”.
Menos denuncias y menos víctimas
El número de mujeres víctimas de la violencia de género y el número de denuncias presentadas durante 2020 disminuyeron un 9,73% y un 10,31%, respectivamente, con respecto a 2019. También fue menor el número de órdenes de protección (un 11,94% menos que en 2019) y el de mujeres que se acogieron a la dispensa del deber de declarar, que descendió un 12,66%. Este importante descenso en los principales indicadores de la violencia de género es consecuencia directa de la crisis sanitaria y, especialmente, de los meses de confinamiento, durante los que se apreciaron las mayores variaciones pese a que los juzgados especializados en violencia sobre la mujer siguieron funcionando al considerarse esencial su actividad, informa el Poder Judicial a través de una nota de prensa.
Estos y otros datos están recogidos en el Informe anual sobre violencia de género hecho público este lunes por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género. El estudio pone de manifiesto también cómo, pese a la disminución de las cifras absolutas, los indicadores de la violencia machista se han mantenido en niveles muy similares a los de 2019.
