El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenbergç, ha confirmado que la alianza activó esta mañana sus planes de defensa y reforzará sus activos de defensa en Europa del Este en los próximos días. “Rusia atacó a Ucrania. Es un acto de guerra brutal. Este es un momento fundamental para nuestra seguridad”.
“Este es un paso prudente y defensivo, pero necesario. Otorga a nuestros comandantes la autoridad para desplegar de inmediato nuestras fuerzas y capacidades donde se necesiten”, explicó Stoltenberg.
“Ya tenemos miles de operativos sobre el terreno, y podemos movilizar rápidamente a muchos más para reforzar nuestra presencia”, añadió, garantizando que no está en los planes de la OTAN utilizar sus capacidades en territorio ucraniano. “No tenemos planes de enviar tropas a Ucrania. Pero tendremos muchas más tropas en Europa del Este”, declaró.
“Nuestra misión es proteger y defender a nuestros aliados”, recordó el secretario general de la OTAN. “Un ataque a uno será considerado un ataque a todos. Esta es nuestra garantía de seguridad colectiva”, reiteró, al informar que convocó a los líderes de la OTAN a una cumbre virtual este viernes.
“Esta invasión no es una sorpresa, llevamos meses advirtiendo sobre este escenario”, recordó Stoltenberg, que lamentó que el Kremlin no quisiera continuar por la vía diplomática, ni se tomara en serio las advertencias de las “durísimas” consecuencias que los aliados se enfrentarían prometidos en caso de un asalto.
“A pesar de todas nuestras súplicas, ahora nos enfrentamos a una guerra en Europa de un tipo y escala que pensamos que pertenecía a la historia”, dijo, describiendo las acciones militares en curso en Ucrania como una “invasión deliberada y premeditada con derramamiento de sangre”. «. «Las intenciones de Rusia están a la vista», ha señalado, subrayando que el Kremlin será el único responsable de todas las vidas perdidas.
El secretario general de la OTAN volvió a apelar a Rusia “para que detenga de inmediato su acción militar y retire todas las fuerzas de Ucrania”, y regrese a la mesa de negociaciones. También volvió a advertir de las consecuencias de no hacerlo: los aliados nunca aceptarán los intentos de Rusia de reescribir la historia, prometió.
“El objetivo del Kremlin es restablecer su esfera de influencia, romper todas las reglas y tratados que nos mantienen a salvo y subvertir nuestros valores. Esta es la nueva normalidad: la paz amenazada, la libertad y la democracia impugnadas por regímenes autoritarios”, señaló.
“Somos una alianza de 30 democracias y no dejaremos de responder, protegiendo a nuestras poblaciones y nuestros valores. La libertad prevalecerá sobre la opresión”, prometió.
