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La ley de eutanasia sigue adelante tras decaer las enmiendas a la totalidad de PP y VOX

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análisis

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El Gobierno ha conseguido hoy jueves avanzar con la proposición de Ley Orgánica sobre la Regulación de la Eutanasia. El pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado las enmiendas a la totalidad que habían sido presentadas por el Partido Popular y Vox.

¿Qué ofrecían como alternativa el PP y VOX a la regulación de la eutanasia? Una «mejor regulación» de los cuidados paliativos. Esa era su idea. Solange Ruiz, diputada de Vox, llegó incluso a acusar al PSOE de arrogancia al pretender que «matar a una persona» sea considerado en España como «un servicio sanitario más». Así han sido las declaraciones públicas manifestadas desde los sectores de la ultraderecha española.

«La vida es un bien supremo y de ninguna manera podemos dejar recaer en los médicos la decisión de que los pacientes vivan o mueran. Por eso pedimos parar esta locura», dijo la diputada, desconociendo que, precisamente lo que hace la regulación de la eutanasia es regular las circunstancias en las que una persona puede dejar de mantener una situación agónica que desde muchas perspectivas puede considerarse como algo distinto a una vida digna.

Sin embargo, la derecha española pretende confundir el discurso entremezclando los cuidados paliativos con la eutanasia, dos cuestiones totalmente distintas que no deberían contraponerse.

Desde este discurso, se intenta dar a entender que la falta de medidas en atención paliativa es la que lleva a la «desesperación de los pacientes».

Según José Ignacio Echániz, «lo que de verdad es necesario es legislar sobre el derecho a fallecer dignamente con unos cuidados paliativos adecuados, con permisos laborales regulados para los familiares que cuidan a esos enfermos y con un acceso exprés a las ayudas a la dependencia».

Desde el Partido Popular en su enmienda planteaban una ley queunificase los cuidados paliativos en todo el territorio español, ya que no existe una armonización legislativa entre las comunidades autónomas. Además, incorporaban la necesidad de dar seguridad a los profesionales sanitarios y ponían en valor la dignidad de la persona en los instantes finales de la vida «evitando el sufrimiento innecesario». Una redacción que, como evidencia,habla de eutanasia aunque digan rechazarla. Una manera de mezclar los conceptos, para en definitiva, complicar un debate con el objetivo de que no se produzca la regulación necesaria que ampare la decisión de miles de personas que necesitan un marco legal acorde con sus circunstancias.

Y en este sentido, Maria Luisa Carcedo, la diputada socialista, ha subrayado que esta estrategia de la derecha española precisamente lo que hace es tergiversar el debate para poner trabas en la regulación. Hablar de los cuidados paliativos cuando se está queriendo abordar la eutanasia es querer confundir conceptos, además de no querer reconocer que los cuidados paliativos están regulados en España desde el año 2006.

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